Valencia endurece las medidas y controles de seguridad sobre los patinetes eléctricos
Controles de drogas y alcohol para los usuarios que circulen en patinete eléctrico. Este es el anuncio que ha realizado el concejal de Movilidad Sostenible y Espacio Público del Ayuntamiento de Valencia, Aarón Cano, que ha indicado que esta medida se suma a los ya existentes controles de velocidad sobre estos vehículos. El objetivo es intentar reducir los accidentes en los que están involucrados estos Vehículos de Movilidad Personal (VPM). Medidas que se aplican para todos los usuarios que circulen en estos vehículos, incluso aquellos que hayan decidido alquilar un patinete eléctrico para un trayecto puntual.
La medida surge a raíz de la creciente tendencia de los accidentes de los usuarios de los patinetes eléctricos a lo largo de 2021. Según los datos del Ayuntamiento de Valencia, a 31 de octubre y sólo en lo que va de año, en la localidad se han producido un total de 500 accidentes con patinetes eléctricos.
La ausencia de normativa y la proliferación del uso de este vehículo han provocado un aumento de la siniestralidad en los último años. Y aunque no hay datos de oficiales al respecto, puesto que no es obligatorio que estos vehículos tengan una matrícula ni que el propietario esté asegurado, el caso concreto de Valencia, el Ayuntamiento detalla cómo han crecido los accidentes con estos últimos 4 años. Desde los 9 accidentes ocurridos en 2017 con patinete eléctrico hasta los 500 en lo que va de año en 2021.
Este endurecimiento de las medidas es debido a que “la normativa existente sobre la movilidad de estos vehículos no es suficiente“, según señala Eduardo Olmedo de la Calle, Fiscal Delegado Provincial de Seguridad Vial de Valencia. Por ello, propone “modificar el código penal para incluir los posibles delitos cometidos por este tipo de conductores”.
Olmedo hace especial hincapié sobre “tres puntos que considera de vital importancia: Identificar a los conductores a través de una matrícula, tener un seguro obligatorio y una mínima formación en seguridad vial”, añade. En definitiva, “el objetivo es “adaptar la legalidad a la realidad de estos nuevos vehículos y su siniestralidad”, concluye.
Además de estas medidas, desde 2019 Valencia tiene una Ordenanza de Movilidad que indica por qué zonas pueden circular estos vehículos así como las pautas de la regulación del alquiler. Y aunque la gestión y regulación de la normativa en términos de seguridad vial recaiga en cada una de las Comunidades Autónomas, no hay que olvidar que lo que sí es común en toda España es el uso obligatorio del casco en el patinete eléctrico.