9 trucos para ahorrar en la factura de la luz en invierno

Ahorrar en la factura de la luz sin renunciar a tener una temperatura agradable y sensación de confort en casa es posible. ¿Cómo? Usando elementos en el interior que contribuyan al aislamiento de la vivienda para retener el calor en las estancias y sustituyendo algunos dispositivos por otros de bajo consumo.

Además de estos trucos, te recomendamos que consultes esta otra información con los errores más comunes que aumentan el gasto en calefacción y que puedes evitar.

Colocar cortinas aislantes en las ventanas

Las cortinas aislantes para frío y calor son perfectas para mantener una temperatura agradable en el interior de casa. El tejido de la tela es más grueso y son más opacas que las cortinas tradicionales, características que permiten que la tela actúe como barrera para que no entre el frío del exterior.

Como medida de refuerzo a las cortinas aislantes, si las ventanas de casa son viejas o de poco grosor, lo ideal es sustituirlas por otras de doble cristal y mayor capacidad aislante. Se trata de una inversión económica mayor, pero que puede suponer un gran cambio a mejor en los recibos mensuales de la factura de la luz.

Burletes para puertas y ventanas

Los burletes para puertas y ventanas son otro de los grandes aliados del hogar para ahorrar en la factura de electricidad. Se colocan en los pies de las puertas y de las ventanas para evitar que entre el frío o se escape el calor por las rendijas inferiores de los marcos de las puertas y ventanas.

Su instalación es muy sencilla y los hay de diferentes diseños y tamaños. Además de contribuir al aislamiento térmico, reducen el ruido exterior y son perfectos para colocarlos en las estancias de teletrabajo, para que el sonido que llegue de otras habitaciones sea el mínimo.

Usar alfombras en el suelo

Una alfombra gruesa contribuye a favorecer el aislamiento térmico de una habitación. Pero no sirve cualquier alfombra, sino que para que ayude a mantener el calor y temperatura de una estancia debe ser gruesa, con bastante densidad de tejido y de materiales de calidad. Puedes consultar algunos ejemplos en esta guía de las mejores alfombras granes para el salón.

Cambiar las bombillas por luces LED

Sustituir las bombillas tradicionales por otras de bajo consumo es uno de los cambios que más va a repercutir de forma directa en la factura de electricidad. En la práctica, apenas se nota diferencia de luminosidad y, lo mejor de todo, es que sí va a notarse un gran cambio con el paso de los meses en el gasto. Además de ser de bajo consumo, son bombillas inteligentes, que puedes controlar desde el teléfono para una mayor comodidad.

Para las zonas de paso, como los pasillos, escaleras o para las zonas de terraza y jardín, una de las mejores opciones es apostar por las luces con sensor de movimiento, que solamente van a consumir y a encenderse cuando alguien pase a cierta distancia. Y el resto del tiempo no supondrán ningún gasto.

Colocar enchufes inteligentes

Los enchufes inteligentes te permiten reducir el gasto en electricidad y mantener un control del consumo de los dispositivos. Sirven para saber cuánto gasta cada aparato que tienes conectado en tiempo real y, lo mejor de todo, es que permite encender y apagar los electrodomésticos en cualquier momento para minimizar el gasto en el hogar cuando no se usan.

Otra variante de este dispositivo es el enchufe programable con temporizador, que permite fijar las horas exactas a las que quieres que se encienda un aparato para controlar el consumo y reducir el gasto en determinados electrodomésticos.

Regletas individuales

Otra de las medidas consiste en utilizar regletas que tengan enchufes individuales para evitar que los dispositivos sigan consumiendo energía en stand-by. Es un pequeño gesto que mes a mes va a permitir ahorrar un pellizco en electricidad al desconectar por completo muchos de los dispositivos electrónicos que tienes en casa, como el cargador, la televisión, el ordenador o las lámparas, entre otros.

No encender la calefacción y usar otros sistemas

Si por las tardes sueles estar en el salón o en la cocina, ¿para qué tener toda la calefacción encendida tantas horas? Una opción es usar otros sistemas alternativos, como las estufas de gas butano o los radiadores eléctricos de bajo consumo. Y media hora antes de trasladaros a las habitaciones o a cualquier otra zona de la casa, encender la calefacción para que el resto de la vivienda alcance una temperatura agradable.

Aprovechar el termo de forma eficiente

Las viviendas que tienen un termo instalado para el agua caliente pueden ahorrar enormemente en el coste de esta partida al usar este dispositivo de forma eficiente. La clave está en encenderlo durante horas puntuales para que caliente la cantidad de agua suficiente que necesita la vivienda para todo el día y dejarlo apagado el resto de horas. Si quieres saber más, en esta otra información te explicamos cómo ahorrar de forma inteligente con el termo eléctrico de tu casa.

Usar sábanas y pijamas de franela

Dentro de casa hay que estar cómodo, pero también algo abrigado. El gasto en calefacción va a ser mayor en los hogares en los que en invierno el atuendo de ir por casa sea un pijama de verano o muy fino, mientras que al usar pijamas de franela, que son más gordos, la sensación de confort será mayor con menos gasto.

Lo mismo a la hora de irse a la cama. Optar por unas sábanas de franela para no pasar frío al dormir es una de las medidas a tener en cuenta para no tener que usar tanto la calefacción y ahorrar en electricidad. Para completar la ropa de cama, una buena manta de invierno, que son suaves, gruesas y transpirables.

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