Tengo una entrevista de trabajo, ¿cómo me preparo? Si mañana es el día de mi entrevista de trabajo, ¿puedo prepararme en tan poco tiempo? La entrevista es sin lugar a dudas una de las situaciones más difíciles de afrontar en el proceso de búsqueda de empleo. Una preparación previa, como por ejemplo repasando las típicas preguntas que te hacen en una entrevista de trabajo, es clave para dejar a un lado los nervios y afrontarla con más seguridad y tranquilidad.
Muchas veces, lo primero que nos preocupa o en lo que pensamos cuando concertamos la entrevista es algo que no es tan importante, aunque no por ello hay que descuidar la ropa: Cómo vestir en una entrevista de trabajo ¿Ir informal o arreglado?
Pero además debes proyectar lo mejor de ti mismo y destacar del resto. Y lo que verdaderamente cuenta es que sepas expresar por qué eres bueno para esa empresa y ese puesto. Para esto una buena idea es recrear cómo será esa entrevista y qué aspectos no debes olvidar comentar. También puedes practicar con alguien cercano, un familiar o un amigo, que te ayude a realizar una simulación.
Ten en cuenta también aspectos de la comunicación no verbal porque es probable que el reclutador los analice: tu postura, claridad en la expresión, ese primer saludo… Aquí te detallamos los errores más comunes en una entrevista de trabajo.
Pero sobre todo no olvides que debes dejar constancia de tus fortalezas, qué clase de profesional eres, cuáles son tus objetivos, qué te gusta del cargo, cuáles son tus logros y qué aspiraciones tienes. Sé honesto y sincero, confía en ti mismo, la honestidad también será una característica que no debes olvidar. Recuerda que los entrevistadores son profesionales, de manera que no intentes ser alguien que no eres y no inventes historias falsas que solo jugarán en tu contra.
Profesiones como la de controlador aéreo deben tener en cuenta todos estos aspectos a la hora de afrontar el proceso de selección.
Para que sepas cómo solucionar con éxito la prueba de entrevista personal y saber los trucos y consejos que pueden ayudarte a pasar una entrevista para conseguir empleo te damos también más consejos. Como por ejemplo cómo preparar tu CV, cómo preparar una carta de presentación y recomendación...
¿Cómo enfrentarse a una entrevista de trabajo?
Puesto que la competencia en el mercado laboral es feroz, hoy más que nunca hay que saber venderse cuando hemos logrado llegar a la entrevista personal que precede a toda contratación. Seguir una serie de puntos clave hará que nos diferenciemos de los demás y que aumenten las opciones de conseguir el puesto de trabajo al que optamos:
- La autoevaluación es esencial y ha de hacerse antes de acudir a la entrevista. El candidato debe hacer un análisis de sus puntos fuertes y sus áreas de mejora preparando los argumentos más adecuados para defenderlos y superar con éxito la entrevista.
- Tener información sobre la empresa a la que va. Es esencial conocer previamente la empresa que oferta el puesto entrando en su página web, averiguando sus principales funciones, investigando con qué puntos de trabajo opera, qué proyectos tiene en marcha o quiénes son sus clientes.
- La puntualidad. Es importante no llegar tarde, aunque no hace falta llegar con más de 10 minutos de antelación, se recomienda salir de casa antes por si hay imprevistos.
- Los documentos, listos. Aunque no lo hayan solicitado, es aconsejable llevar un par de copias de un CV actualizado, dará una buena imagen del candidato y facilitará la entrevista al seleccionador.
- Nuestro lenguaje corporal habla por nosotros. Durante la conversación es aconsejable mantener una postura cordial, evitar gestos defensivos (como cruzarse de brazos o sentarse hacia atrás en la silla marcando distancias) y favorecer los gestos de entendimiento (asentimiento, contacto ocular con el entrevistador, etc.).
- La sinceridad también cuenta. Los entrevistadores buscan personas de confianza, por ello es crucial ofrecer respuestas sinceras. Una mentira es una pésima carta de presentación.
- Dar respuestas directas y razones en lugar de responder con monosílabos ayudarán en el trascurso de la entrevista a crear una buena impresión.
- Escritura cuidada. Ante la posibilidad de rellenar un formulario o alguna solicitud, la letra ha de ser pulcra, legible y sin tachaduras.
- Mostrar interés y entusiasmo por el puesto interesándose por cada aspecto.
- Tener buena presencia cuidando la imagen personal y adecuando el vestuario al puesto solicitado.
Y un consejo, no olvides apagar tu teléfono móvil antes de entrar a la entrevista. Es la mejor manera de evitar interrupciones bruscas a tu interlocutor y detener la entrevista antes de tiempo.
Preguntas y respuestas
En el transcurso de una entrevista personal pueden surgir decenas de preguntas en relación con la trayectoria profesional del candidato. Aunque también sobre sus competencias laborales, de casos prácticos de resolución de conflictos en la empresa, de las expectativas económicas, sobre los conocimientos previos de la empresa o una exposición de las mejoras que el candidato puede aportar a la compañía si es seleccionado.
El objetivo de la entrevista no es otro que demostrar que los conocimientos, experiencia y aptitudes del entrevistado encajan con el perfil que el seleccionador demanda. Por ello, es bueno ofrecer respuestas claras, directas y sinceras. No hay que perder de vista las siguientes consideraciones:
- Aunque la pregunta sea sencilla, no hay que precipitarse en la respuesta porque en todo momento habrá que buscar cierta originalidad que nos diferencie del resto.
- Evitar las respuestas cerradas o monosilábicas. En cada contestación hay que dar razones y argumentos que respondan a la pregunta realizada.
- No hacer comparaciones que puedan desacreditar a otros candidatos del proceso de selección.
- Procura no manifestar críticas hacia antiguos compañeros y superiores o mostrar excesiva desaprobación con la política empresarial de otras empresas en las que se haya trabajado.
- No es pertinente solicitar al entrevistador una valoración de la entrevista. Este tipo de preguntas puede ser interpretada como ansiedad por conseguir el empleo, inseguridad y falta de capacidad para evaluar por ti mismo cómo ha ido.
Algunas de las preguntas más comunes en las entrevistas de trabajo hacen referencia a la descripción del candidato. Son cuestiones con las que se pretende que el entrevistado muestre sus capacidades profesionales, por lo que la mejor respuesta es una descripción de las mejores cualidades para el puesto.
Cuando el entrevistador se interesa por los planes de futuro del candidato busca saber si este es ambicioso o no, si se marca objetivos y si tiene claro hacia dónde va su carrera profesional además de saber cuáles son sus expectativas hacia la nueva empresa. En estas ocasiones, es acertado mostrar inquietud por aprender, por el reciclaje profesional y por otros aspectos similares que la empresa sepa valorar e incentivar.
Por último, si las preguntas se centran en experiencias negativas anteriores o motivos para el cambio de trabajo, siempre es acertado dejar de lado la parte negativa para destacar la lección positiva que se ha aprendido de ella. Más retos, mayores responsabilidades, nuevas oportunidades, son respuestas adecuadas a este tipo de cuestiones.
Pero una entrevista no es unidireccional, sino que implica un intercambio de información por lo que el candidato debería mostrar su interés realizando algunas preguntas. Una visita al sitio web de la compañía y su actividad puede ser una buena fuente de inspiración para preparar algunas cuestiones con las que impresionar al entrevistador. Además, hay una serie de preguntas que puede efectuar y que ayudarán a averiguar más datos acerca del puesto al que se opta como: ¿se trata de un puesto de nueva creación o sustituyo a alguien?, ¿recibiré formación inicial al incorporarme?, ¿quién será mi responsable directo?, ¿contaré con personal a mi cargo?, ¿cuándo será la incorporación?, ¿cuál es el siguiente paso en el proceso de selección?.
Hablar de la remuneración en una primera entrevista personal no es adecuado salvo que el entrevistador lo mencione. Cuestiones de esta índole es mejor tratarlas en una entrevista posterior, como candidato finalista.
¿Qué debemos evitar en una entrevista?
Una vez dado el paso de conseguir una entrevista personal, teniendo en cuenta todos los consejos expuestos, es bueno recordar que hay una serie de tópicos en los que no se debe caer:
Mala apariencia personal
Falta de interés y entusiasmo
Demasiado interés en el dinero
Falta de objetivos, planificación o propósitos laborales
Incapacidad para expresarse claramente
Faltas de cortesía o modales
Falta de vitalidad
Indecisión
Incapacidad de aceptar las críticas
Ser autoritario, agresivo, vanidoso y sabelotodo
Sobre los trabajadores
¿Sabes qué necesitas para optar a ese trabajo que tanto llevas esperando? ¿Conoces los trámites necesarios en cada caso? Te contamos todo lo que te puede interesar a la hora de optar a un nuevo trabajo o de promocionar en el tuyo.
Clasificación de trabajadores
A la hora de conocer los tipos de trabajadores en España hay que tener claro dos conceptos básicos: grupo profesional y grupo de cotización.
Grupo profesional
El grupo profesional es el grupo en el que se encuadra a cada trabajador teniendo en cuenta las características del puesto de trabajo, las tareas a desarrollar, las responsabilidades, etc. No se tiene en cuenta la titulación o la experiencia del trabajador, sino que el grupo profesional dependerá de las tareas que realizará en ese trabajo.
Grupo de cotización
El grupo de cotización es la categoría que le corresponde al trabajador de acuerdo al trabajo que desempeña, según los criterios previamente establecidos en el convenio colectivo que aplique en su empresa. En la actualidad, existen 11 grupos de cotización con sus bases de cotización máximas y mínimas.
- Grupo 1: Ingenieros y Licenciados. Personal de alta dirección no incluido en el artículo 1.3.c) del Estatuto de los Trabajadores.
- Grupo 2: Ingenieros Técnicos, Peritos y Ayudantes Titulados.
- Grupo 3: Jefes Administrativos y de Taller.
- Grupo 4: Ayudantes no Titulados.
- Grupo 5: Oficiales Administrativos.
- Grupo 6: Subalternos.
- Grupo 7: Auxiliares Administrativos.
- Grupo 8: Oficiales de primera y segunda.
- Grupo 9: Oficiales de tercera y Especialistas.
- Grupo 10: Peones.
- Grupo 11: Trabajadores menores de dieciocho años, cualquiera que sea su categoría profesional.
Es importante conocer a qué grupo de cotización se pertenece, ya que de eso va a depender la base mínima y máxima de cotización.
Obligaciones de la empresa con los trabajadores
Cuando la empresa contrata a un trabajador debe cumplir una serie de obligaciones:
- Afiliar y dar de alta al trabajador en la Seguridad Social.
- Presentar el contrato de trabajo al SEPE.
- Abonar las cotizaciones del trabajador a la Seguridad Social.
Una vez contratado, la empresa debe:
- Entregar una copia del contrato al trabajador, la nómina a final de mes y el certificado de retenciones.
- Ingresar las retenciones del IRPF del trabajador cada tres meses.
- Mostrar el calendario laboral en un lugar visible: jornada de trabajo, vacaciones, días hábiles, etc.
- Cumplir con el periodo de vacaciones establecido y con los permisos de ausencia justificada del trabajo.
- Contratar un seguro de accidentes o de vida para el trabajador.
- Presentar al trabajador el plan de prevención de riesgos laborales.
Obligaciones de los trabajadores con la empresa
Los trabajadores que pasan a formar parte de cualquier empresa deben cumplir con las siguientes obligaciones:
- Cumplir las normas y obligaciones concretas del puesto de trabajo.
- Cumplir las medidas de seguridad e higiene interpuestas por la empresa.
- No realizar la misma actividad en una empresa de la competencia.
- Cumplir las órdenes e instrucciones del empresario.
- Contribuir a mejorar la productividad de la empresa.
- Respetar todas las normas que se indiquen en el convenio de trabajo.
Derechos de los trabajadores
Cada trabajador tiene una serie de derechos con respecto a la empresa en la que ejerce su función:
- No ser discriminado para acceder a un puesto de trabajo.
- Garantizar su integridad física e intimidad.
- Hacer un trabajo real y adecuado, es decir, a la ocupación efectiva durante la jornada laboral.
- Percibir la remuneración pactada mensualmente.
- Promocionar, ascender y formarse en el trabajo para acceder a un puesto más cualificado y mejor remunerado.
- Garantizar el cumplimiento de las condiciones pactadas en el contrato de trabajo.
- Disfrutar del periodo de vacaciones estipulado en el contrato de trabajo.
- Ausentarse del trabajo sin reducción de salario por alguna de las siguientes causas justificadas: matrimonio, embarazo, nacimiento, maternidad, lactancia, adopción, fallecimiento y enfermedad grave de hijo, cónyuge o parientes hasta segundo grado de consanguinidad, mudanza, exámenes oficiales, derecho a voto, búsqueda de nuevo empleo tras despido o asuntos propios (siempre que esté estipulado en el convenio colectivo).
- Derecho a la libre sindicación y negociación colectiva.
- Derecho a huelga en defensa de sus intereses.
- Derecho de información, consulta y participación en la empresa.
Ahora que ya sabes todo lo que puedes y no puedes hacer en el trabajo y conoces todos los derechos que tienes como empleado, no dudes en buscar el empleo que mejor se adapte a tus necesidades e intereses. Permanece atento a esta página y descubrirás las mejores ofertas de empleo del mercado laboral.