Tipos de minusvalías que hay en España y cómo saber a qué grado de discapacidad perteneces
Conocer el grado de discapacidad que sufre una persona es determinante para saber a qué ayudas o pensiones tiene derecho, como sucede con los beneficios por tener una discapacidad al 33 %. ¿Pero, cómo se determina el grado de minusvalía en España? Aunque es el tribunal médico el que tiene la última palabra, hay una serie de criterios que establecen los distintos grupos y grados de discapacidad en función de las actividades que puede realizar una persona de manera autónoma.
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AVD, el indicador que determina el grado de discapacidad
Para saber el tipo de minusvalía o discapacidad que tiene cada persona, la normativa fija el baremo en un concepto que denomina AVD. Este conjunto de letras hace referencia al término actividades de la vida diaria, que son comunes a todos los ciudadanos y que se dividen en cinco grandes grupos. Dependiendo de la cantidad de actividades de esta clasificación que una persona pueda realizar por sí sola o las que no, estará incluido en un determinado grado de discapacidad.
- Actividades básicas del autocuidado. Se trata de un conjunto de tareas entre las que se incluyen la de comer o aquellas de higiene personal.
- Actividades relacionadas con la comunicación, entre las que se encuentran las capacidades para hablar, entenderse y relacionarse con otras personas.
- Realización de actividades físicas. No se incluye en esta categoría la realización de un deporte o entrenamiento físico, sino actividades básicas, como levantarse, agacharse o desplazarse de un lugar a otro.
- Actividades funcionales, como sujetar un objeto o dar la mano y apretar, entre otros.
- Control del sueño y funciones sexuales.
Grados de discapacidad y porcentajes
Una vez aclarado el apartado anterior, las personas se distribuyen en los distintos grados de discapacidad en función de la cantidad de actividades que puedan realizar de manera autónoma de todas las categorías de AVD.
Grado 1 o discapacidad nula, del 0 %
Se encuentran en este grado las personas que en el caso de tener algún síntoma o dificultad para ejecutar alguna de las tareas de las AVD es prácticamente mínimo. Motivo por el que no se le reconoce ningún tipo de discapacidad, dado que no tiene problemas a la hora de realizar las actividades de la vida diaria. En este caso se entiende que es una discapacidad del 0 %.
Discapacidad leve o del grado 2, de entre el 1 y el 24 %
Se encuentran en este grado las personas que pueden hacer todas las actividades de la vida diaria detalladas, pero que encuentran dificultades en el desempeño de algunas de ellas. En este caso es el tribunal médico el que debe determinar el nivel de complejidad o dificultad al hacer las distintas actividades para establecer un porcentaje específico de discapacidad de entre el 1 y el 24 %.
Discapacidad moderada de grado 3, de entre el 25 y el 49 %
Las personas con discapacidad de grado 3 o moderada son aquellas en la que se aprecian importantes limitaciones en la realización de diferentes actividades de las AVD. Dentro de este grupo se encuentran las personas con una discapacidad reconocida al 33 %, que es el baremo o nivel de corte que establece diferenciaciones entre las personas con discapacidad que tienen derecho a una ayuda o pensión y aquellas que no.
Discapacidad de grado 4 o grave, de entre el 50 y el 70 %
Se incluyen en este grado las personas que experimentan dificultades en todos los distintos grupos de actividades de la vida diaria para hacerlas de manera autónoma, incluidas las de autocuidado, como comer por si solos o realizar las tareas de higiene personal.
Discapacidad de grado 5, de gran capacidad, de más del 75 %
Es el grado de discapacidad más alto que está regulado en España. Se encuentran en este grupo las personas que no son capaces de ejecutar de forma autónoma ninguna de las actividades detalladas en las AVD y que necesitan, por tanto, una asistencia continuada de otras personas para poder vivir y cubrir cualquiera de las necesidades básicas.