Subir a la oficina sin ascensor y tomar fruta para mejorar la productividad

Si el lugar de trabajo es el espacio donde más tiempo pasamos durante la semana, ¿por qué no aprovechar estas horas, además de para trabajar, para cuidarnos? Según la Organización Mundial de la Salud, el estilo de vida es el factor que más incide en nuestra salud, por encima de la genética y los factores medioambientales.

Datos que contrastan con los resultados de otros estudios que evidencian que los empleados que comen mal rinden hasta un 20 % menos en el trabajo.

Pensando en mejorar la calidad de vida de sus trabajadores y, por tanto, la productividad, Sanitas ha puesto en marcha el programa Sanitas Smile, un proyecto piloto que ha comenzado a implantarse en la sede central que la compañía, situada en Madrid, entre más de 700 empleados para mejorar su calidad de vida con consejos para mejorar su actividad física, descansar correctamente, realizar una dieta sana y equilibrada y mejorar sus niveles de estrés a través de técnicas como incentivar el consumo de fruta e implantar ‘los martes sin ascensor’.

Hábitos laborales saludables

Este plan tiene como principal objetivo conseguir una visión global de la salud de los empleados de la compañía, tomando como referencia los parámetros de descanso, ejercicio, dieta, estrés y hábitos mejorables (revisiones periódicas, consumo de tabaco o alcohol, etc.). Con él, Sanitas pretende ofrecerles medidas concretas para adoptar hábitos saludables de vida.

Creado a la medida de las necesidades personales de cada empleado, un equipo formado por diferentes profesionales y supervisado por un médico, elabora los diferentes diagnósticos en función de variables como el sexo, la edad, el peso y la altura o las respuestas a un cuestionario sobre hábitos de vida.

Sanitas Smile se puso en marcha el pasado junio y consta de tres pasos:

1. Test y cuestionario sobre hábitos de vida. Los empleados que quieran cumplimentan de manera voluntaria un cuestionario, donde valoran el ejercicio que practican, su alimentación, su nivel de estrés, su descanso y su consumo de alcohol y tabaco. Este informe se complementa con extracciones de sangre para determinar el Índice de Riesgo Cardiovascular (IRC) de la plantilla.

2. Diagnóstico y programa personalizado. El empleado recibe un diagnóstico y un programa personalizado basado en sus respuestas y en el análisis realizado.

3. Actividades de bienestar. Para ayudar a sus empleados a llevar una vida más activa y saludable, Sanitas ha puesto en marcha una serie de iniciativas, comenzando por la dieta. Así, la compañía ha aumentado la oferta de fruta en el comedor de su sede, para fomentar una alimentación rica en vitaminas como las que aportan las frutas de temporada.

“Los martes sin ascensor” es otra de las iniciativas de Sanitas Smile, con la que se trata de motivar a los empleados a subir las escaleras en lugar de coger el ascensor. La compañía no sólo ha colocado carteles en las cuatro plantas del edificio recordando la propuesta, sino que cada martes sólo deja en funcionamiento 2 de los 4 ascensores del edificio principal. Con esta medida no sólo se pretende que los trabajadores vayan abandonando la vida sedentaria, mejoren su circulación sanguínea y se sientan más fuertes y tonificados, sino que su humor y su estado de ánimo mejoren notablemente gracias a la secreción de endorfinas que la actividad física provoca.

Y de cara a las vacaciones estivales, otra iniciativa del programa es la que consiste en que cada empleado ha recibido un plan de entrenamiento de 45 minutos, con objeto de que durante el verano continúen practicando ejercicio en su lugar de vacaciones.

Durante un año se irán incorporando nuevas actividades, algunas de las cuales requerirán el compromiso y el esfuerzo individual, que será recompensado con diferentes incentivos. Pasados 12 meses, la compañía volverá a repetir el cuestionario y los análisis de sangre, para comprobar la mejora tanto de los hábitos de vida como del estado físico de sus empleados.

El cuidado de la salud de sus empleados forma parte de la apuesta de Sanitas por la conciliación de la vida personal y profesional. Con ese espíritu, la compañía realiza, de forma periódica, exámenes de salud específicos a todos los trabajadores y lleva a cabo diferentes campañas de vacunación y de deshabituación tabáquica. Además, la sede de Sanitas cuenta con un gimnasio abierto 12 horas al día, donde se imparten clases de pilates y aerobic, sala de fisioterapia para los empleados, y zonas comunes de descanso, así como con un restaurante con menús revisados por asesores nutricionales.

Desde hace más de 10 años, Sanitas es pionero en implantar medidas para facilitar la conciliación de la vida privada y profesional, la flexibilidad laboral, la igualdad de oportunidades y el bienestar de sus empleados. Y parece que funcionan: el índice de satisfacción de los trabajadores de la compañía en 2008 fue del 76,5 %, frente al 72,9 % del año anterior.

Con iniciativas como esta no es de extrañar que Sanitas sea valorada, por la prestigiosa lista Best Workplaces 2009, el Ranking MERCO Personas 2009 y la revista Actualidad Económica 2009, como una de las mejores empresas para trabajar en España.

Otro de los objetivos de Sanitas con este programa es el de hacerlo extensivo a sus clientes corporativos, a través de la creación de un producto diseñado y personalizado según sus necesidades. La compañía tiene previsto comercializar este novedoso producto en 2010.

Un estudio británico asegura que la productividad baja si no se desayuna

Según un estudio presentado por la marca hotelera Express by Holiday Inn, que ofrece desayuno gratuito a sus huéspedes, se pierden más de 900 millones de horas de trabajo cada año en productividad por saltarse esta comida: uno de cada diez (13 %) trabajadores no desayuna nunca entre semana, mientras que un 45 % no lo hace de forma apropiada. Casi la mitad de los encuestados dice sentir falta de energía (46 %) los días que no desayuna; más de uno de cada tres (36 %) asegura sentirse cansado, y más de un cuarto (28 %) refiere falta de concentración. Reveladoramente, otra cuarta parte admitió ser menos productivo (25 %) si no ha desayunado, y uno de cada cinco asegura ser incapaz de hacer su trabajo correctamente (20 %).

Por esta causa, se ha calculado que el equivalente a 923 horas de trabajo se pierde cada año a causa de la falta de un buen desayuno por parte de los trabajadores, lo que en la economía británica equivaldría a pérdidas de más de 24.500 millones de euros, según la investigación publicada por el estadístico Dr. Geoff Ellis sobre los efectos del desayuno en la productividad en el Reino Unido y basada en una encuesta sobre los hábitos de 1.500 trabajadores.

Ellis, quien ha llevado a cabo el estudio, explica: “Esta investigación demuestra que la falta de energía de los trabajadores por la mañana provoca una enorme pérdida de productividad. Además, dado que la mitad de los encuestados admitió tomar sólo un desayuno ‘parcial’ (definido como una tostada, una pieza de fruta o una barra de cereales), los efectos reales de la gente que se salta un buen desayuno pueden ser mucho mayores”.

Puede que los trabajadores no desayunen de forma habitual, pero reconocen los beneficios de comer bien por las mañanas: el 73 % dice sentirse más espabilado cuando ha tomado un buen desayuno. La encuesta identifica también dolores de cabeza entre aquéllos que se saltaron el desayuno. Casi uno de cada tres (33 %)de los que no toman nada por la mañana tarda más de una hora en ‘despertarse’, mientras que el 10 % tarda más de dos horas.

Otros resultados del estudio en cifras:
· Hombres contra mujeres: el 44 % de las mujeres dice sufrir de mareos tras saltarse el desayuno, para los hombres la cifra es significativamente más baja, un 22 %.

· Jóvenes frente a maduros: Quizá sorprendentemente, el grupo de edad de ‘más de 55′ tiene menos probabilidades de sentir falta de energía si se salta el desayuno que el de ’16 a 24 años’ (35 % frente a 57 %).

· Sin tiempo para desayunar: claramente, muchos trabajadores sienten que no tienen tiempo de desayunar por la mañana. Uno de cada tres (33 %) asegura que si tuviera 15 minutos más por la mañana los usaría para desayunar.

· Desayuno a toda prisa: el estudio también examinó la cantidad de tiempo utilizada para disfrutar del desayuno por la mañana. De los que sí toman algo para desayunar, casi la mitad lo engulle en menos de cinco minutos. Una vez más, los jóvenes fueron los más rápidos en desayunar por la mañana, con un 57 % del grupo de ’16 a 25′ admitiendo tomar el desayuno en menos de cinco minutos, comparados con el 35 % de los mayores de 55.

· Desayuno en el trabajo: un cuarto del grupo de edad de ’25 a 34 años’ prefiere tomar el desayuno por el camino o en el trabajo.

· Saltarse el desayuno lleva a un picoteo poco saludable: el estudio arroja luz sobre el impacto dietético negativo que sufren los que no desayunan. De los encuestados que no desayunan, más de la mitad lo compensa comiendo alimentos poco saludables, como galletas (23 %), chocolate (21 %) o patatas fritas (11 %) para obtener energía, mientras que sólo uno de cada cuatro elige fruta (26 %). Otra de las conclusiones del estudio es que casi tres cuartos de los más jóvenes, franja de 16 a 24, se siente culpable por reemplazar el desayuno por un snack poco saludable horas después (74 %).

· La nutricionista Fiona Hunter añade: “Además de los bien documentados efectos en concentración mental, otros estudios muestran que la gente que se salta el desayuno tiene más posibilidades de sufrir sobrepeso, se siente más estresada y tiene más posibilidades de sufrir resfriados”.

Por su parte, Jane Bednall, portavoz de Express by Holiday Inn, explica: “En estos duros tiempos económicos, los viajeros de negocios necesitan estar por delante de sus competidores tomando un buen desayuno. Nosotros estamos convencidos de que ofreciendo a nuestros clientes el desayuno gratis, no hay excusas para no empezar el día de la mejor manera posible”.

Notas:
1. La compañía de encuestas Tickbox.net encuestó a 1.505 personas entre el 20 y el 23 de febrero de 2009 para descubrir sus hábitos de desayuno.

2. Dr. Geoff Ellis – La interpolación de los resultados del estudio fue llevada a cabo por el estadístico Dr. Geoff Ellis, de la firma especialista en datos Jaywing, miembro de Digital Marketing Group. Anteriormente, el doctor Ellis dio clases durante cinco años en el área de estadística en la Universidad Sheffield Hallaman. Jaywing es la compañía especialista en servicios de datos líder del Reino Unido, y se dedica principalmente a las áreas de marketing y riesgos en un amplio abanico de sectores, incluyendo servicios financieros, retail, utilities y telecomunicaciones.

3. Notas del doctor Geoff Ellis:
Ha habido numerosos estudios sobre el efecto de la falta de desayuno en las funciones cognitivas. Estos estudios difieren en su argumento, definiciones de desayuno, medición de las funciones cognitivas y metodología. Por tanto, los resultados varían ampliamente, aunque la mayoría muestra que desayunar tiene un significativo efecto positivo. Algunos de los resultados más extremos han sido ignorados, así como algunos donde los sujetos no eran apropiados para el Reino Unido. Los resultados del estudio utilizados sugieren que el efecto de tomar desayuno añade entre 15 y 20 puntos porcentuales al rendimiento cognitivo.

El estudio ha utilizado una figura escogida de firna conservadora de un 15 % de mejora del rendimiento. La naturaleza conservadora de esta asunción se sustenta en una evidencia empírica que sugiere que el incremento real de la productividad, gracias a una mejor nutrición, gracias al desayuno, está cerca del 20 %. Todo este estudio ignora las más extremas (y posiblemente políticas) aseveraciones como que el desayuno añade 30 minutos productivos a la jornada laboral, o incrementa la productividad en un 70 %. El efecto del desayuno ha sido tomado como modelo por tener efecto en la productividad sólo hasta la hora del almuerzo. Por otra parte, puede ser asumido que podría haber un efecto ‘post-almuerzo’ (particularmente en personas que también se saltan esta comida), esto no ha sido tenido en cuenta. La incidencia de saltarse el desayuno ha sido calculada de forma independiente para Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte y Gales.

Los efectos en la productividad han sido modelados asumiendo una pérdida de productividad del 15 % a causa de la falta de desayuno.

La escala de estos efectos ha sido calculada aplicando estas cifras al PIB regional (tomado de los datos de 2006 escalados para conseguir el agregado de 2008), y utilizando estadísticas de horas trabajadas agregadas de 2008.

Las siguientes referencias han sido utilizadas:
– The Breakfast Research Institute
– Food at Work book by C Wanjek (International Labour Office, Geneva)
Ver libro
– Summary of research into Breakfast & Cognition by E Pollitt & R Matthews
– https://academic.oup.com/ajcn/article/67/4/804S/4666123
– Breakfast Eating Habit and its Influence on Attention-concentration, Immediate
Memory and School Achievement paper by N Gajre, S Fernandez, N Balakrishna & S Vazir
– The Relationship of School Breakfast to Psychosocial and Academic Functioning Cross-sectional and Longitudinal Observations in an Inner-city School Sample Paper by J. Michael Murphy, EdD; Maria E. Pagano, EdM; Joan Nachmani, MS, CNS; Peter Sperling; Shirley Kane; Ronald E. Kleinman, MD
– https://jamanetwork.com/journals/jamapediatrics/fullarticle/189855
Breakfast, Blood Glucose & Cognition paper by D Benton, PY Parker
– https://academic.oup.com/ajcn/article/67/4/772S/4666100
– A study on Breakfast & School performance in a group of adolescents (Spanish study on the quality of breakfast eaten)
Find Health Articles
– The Office of National Statistics
Statistics Gov UK

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