¿Se puede conducir estando de baja laboral?
¿Está permitido conducir estando de baja laboral en el trabajo? Cuando una persona deja de trabajar de forma temporal por haber sufrido un accidente o enfermedad, es habitual que surjan este tipo de cuestiones. Aunque no existe una respuesta cerrada.
De la misma manera que sucede con la posibilidad de irse de vacaciones estando de baja laboral, para saber si está permitido conducir durante una baja hay que conocer las particularidades de cada caso concreto.
Contenido de la información:
Cómo saber si se puede conducir estando de baja
La mejor forma de saber si se puede conducir estando de baja es preguntando al profesional que ha autorizado esta situación. En concreto, es el médico el que debe determinar si la persona que se encuentra de baja está capacitada o no para conducir. Una posibilidad que está sujeta en función al problema que haya ocasionado la situación de baja y que depende en función de cada persona y cada caso.
Qué dice la DGT sobre conducir estando de baja
En cuanto a la normativa específica que recoge el Reglamento General de Circulación, no existe ningún artículo que determine si una persona en situación de baja laboral está capacitada o no para conducir.
Aunque sí se detalla en este reglamento algunas pautas acerca de cómo debe ser el estado del conductor para poder ponerse al volante. Entre otros aspectos, la normativa específica que deben estar en condiciones de controlar el vehículo, así como de mantener su libertad de movimientos, campo necesario de visión y la capacidad para garantizar su seguridad y la de sus pasajeros.
De estas líneas se evidencia que si una persona está de baja porque tiene un brazo escayolado, no puede conducir. Dado que no cuenta con libertad de movimientos suficientes.
En el caso de sufrir un episodio de gripe fuerte con mareos o bajones de tensión, tampoco tendría permitido conducir porque no estaría en condiciones de mantener su seguridad ni de controlar el vehículo.
Enfermedades con las que no es recomendable conducir
Aunque no existe prohibición expresa, la Dirección General de Tráfico señala que existen determinadas enfermedades que influyen en la conducción y pueden poner en riesgo la seguridad vial. En concreto, estas son las siguientes:
- Alzhéimer
- Apnea del sueño
- Depresión
- Diabetes
- Epilepsia
- Gripe o alergias
- Ictus
- Parkinson
- Alteraciones de la visión