Requisitos y cursos para ser tatuador
El mundo del tatuaje cuenta cada vez con más adeptos y, lejos de posicionarse como una moda pasajera, crece el número de personas que sienten auténtica pasión por la tinta y su expresión artística sobre el cuerpo. España es uno de los países del mundo que más tatuajes se hacen, tanto en jóvenes como adultos, hasta llegar a ocupar la sexta posición en el ranking mundial. Además, muchos de ellos deciden hacer de este arte, su profesión y medio de vida principal. Si eres uno de ellos, toma nota de la siguiente información y comprueba todo lo que se necesita para tatuar y ser tatuador.
Contenido de la información:
Cursillo para ser tatuador
¿Alguna vez te has preguntado qué hay que estudiar para ser tatuador profesional? En primer lugar, debes tener claro que no existe una formación académica reglada u oficial para tatuar o realizar tareas como tatuador profesional. Aunque si indagas un poco, podrás definir rápidamente cuáles son las habilidades y aptitudes concretas que tiene que tener un profesional del mundo del grabado.
Sin ninguna duda, saber dibujar a la perfección es uno de los requisitos esenciales. Tanto si has estudiado Bellas Artes, tienes una faceta artística o te encanta crear cómics, adquieres los conocimientos básicos para aprender a dibujar como un profesional. Esto te permitirá trabajar directamente sobre la piel de tus clientes de una manera sobresaliente.
A pesar de todos, existen decenas de profesionales del mundo del tatuaje que no tienen ningún tipo de formación en dibujo, sino que han comenzado su andadura desde muy jóvenes y tienen una destreza innata de carácter artístico.
Título higiénico-sanitario
En la actualidad, el sector de los tatuajes dispone de unas importantes medidas higiénicas y de sanidad. En este sentido, si te estás planteando ser tatuador profesional, debes disponer obligatoriamente del título higiénico-sanitario. De lo contrario, no podrás ejercer bajo ningún concepto ni situación.
Esta formación te garantiza el hecho de conocer perfectamente, entre otros, los siguientes aspectos:
- Técnicas de asepsia, desinfección y esterilización de instrumentos y herramientas
- Manejo y control de residuos sanitarios
- Requisitos aplicables sobre los locales e instalaciones para tatuar
- Prevención de riesgos sanitarios y primeros auxilios
Kit para empezar
¿Qué necesito para empezar a tatuar? En lo referido al material necesario, debes tener en cuenta y tomar nota de todos los que aparecen en el siguiente listado:
- Máquina de tatuaje (rotativa o de bobinas): varían en función de su robustez y el motor de su interior. Hay diferentes modalidades así que será mejor que te informes antes de lanzarte a comprar alguna de las máquinas para empezar a tatuar.
- Agujas: son el elemento fundamental para inyectar la tinta. Para empezar, necesitarás RL (agujas de líneas), RS (agujas de relleno) y MG (agujas de sombras). También existe diferencia entre las convencionales y las de cartucho.
- Gomas para la máquina: solo necesarias si utilizas agujas convencionales para evitar las vibraciones.
- Fuente de energía: para dar energía a la máquina, es decir, una fuente con toma de electricidad y regulador de intensidad.
- Clip cord: es un cable que conecta la máquina y la fuente de energía
- Switch Pedal: sirve como ayuda para tatuar, puesto que funciona igual que los pedales de las máquinas de coser, controlando su ritmo con el pie.
- Tinta negra: especial para tatuajes cuando estás comenzando.
- Cups: recipientes de plástico para colocar la tinta en su interior.
- Grip: es una herramienta de acero de la propia máquina, por donde pasa la aguja. Sujetas en ella la máquina para comenzar a trabajar.
- Guantes desechables: para evitar el contagio por contacto.
- Vaselina: con el objetivo de mantener la piel hidratada y permitir que la aguja se deslice mejor. Debe ser un producto de buena calidad para evitar el sangrado.
- Lengua para la vaselina: para coger este producto sin tener que utilizar las manos directamente.
- Papel film transparente: perfecto para evitar todo tipo de contaminación cruzadas. Lo más recomendable es que empapeles todo con este material, incluyendo máquinas y materiales.
- Jabón y agua destilada para limpiar el tatuaje: esta mezcla es la más adecuada para mantener limpia toda la zona sobre la que se ha tatuado.
- Alcohol: para desinfectar la piel a la hora de tatuar (en gel para que no resulte tan abrasivo) y también para limpiar bien todos los materiales (alcohol 99 % es lo más común).
- Stencil: es un producto para que la calca de tu dibujo se quede fija mientras tatúas.
- Papel hectográfico: se trata de un calco especial para superficies como la piel y totalmente saludable para tus clientes.
Como has podido leer, hay infinidad de materiales que se necesitan para realizar esta práctica de forma legal y con las condiciones higiénicas que se exigen. Por eso, no se recomienda bajo ningún concepto desarrollar esta actividad en casa.
Hacer líneas
Lo más recomendable para tatuar líneas es utilizar una aguja RL 09 y calibrada especialmente para este tipo de tarea. Lo primero que hay que hacer es estirar muy bien la piel, ayudándose con la mano que se tiene libre, es decir, la contraria a la máquina.
Además, con la mano ocupada, al apoyarla, ya se está echando también la piel hacia abajo. Este detalle es muy importante para que el resultado sea el esperado, sobre todo, en aquellas zonas del cuerpo en las que la piel está un poco más suelta.
Para tatuar líneas existen dos maneras diferentes: de forma empujada, que es la alternativa perfecta para que quede sólida y firme (empujando la máquina hacia adelante) o arrastrada (moviendo la máquina hacia atrás). Esta última se emplea para conseguir otros efectos, aunque no para conseguir una línea muy marcada como en el caso anterior.
Por otro lado, también hay que tener muy claro cuál va a ser el punto de partida de la línea y dónde va a finalizar. Para ello, se debe ensayar el movimiento varias veces, previamente, con la mano.
En cuanto a la profundidad de la aguja para dibujar líneas, en aquellos puntos en los que la piel sea más fina, se introducirá menos la aguja para no dañarla.
Por regla general, cuando se inicia un tatuaje, se tiene que sacar muy poco la aguja del puntero, tan solo lo necesario para que entre bien, sin lastimar. Con el paso del tiempo y, sobre todo, con más práctica, irás comprobando cómo si sacas la aguja un poco más, puedes ver claramente lo que estás trazando con la punta.
¿Qué personas no pueden tatuarse?
Al contrario de lo que podemos pensar, no todo el mundo puede hacerse un tatuaje. En algunos casos, esta práctica está contraindicada, puesto que se podrían producir ciertos riesgos:
- Personas que no tienen sus vacunas al día (con especial atención a las de la hepatitis y el tétanos).
- Diabéticos.
- Tienen el sistema inmunitario debilitado.
- Con enfermedades y dolencias cutáneas.
- Con tendencia a sufrir cicatrices queloides (aquellas con aspecto muy abultado).
- Mujeres embarazadas.
Si te encuentres en alguna de estas situaciones, lo más recomendable es que consultes directamente con un profesional sanitario antes de hacerte un tatuaje. Además, algunas profesiones como la de militar, pueden impedirte si alguno de los tatuajes que te hayas hecho es visible cuando vayas de uniforme o contengan proclamas o mensajes controvertidos.
Ranking países por tatuajes
Italia es el país del mundo donde sus habitantes más tatuajes se hacen, según un estudio por Internet entre 9.054 personas de 18 países. Esta clasificación del sitio Dalia coloca a España como el sexto país más popular del tatuaje, con nada menos que el 42 % de los encuestados contestando afirmativamente a la pregunta de si tenían al menos un tatuaje.
Por orden de este ranking queda en primer lugar Italia como hemos visto (48 %), seguida de Suecia (47 %), Estados Unidos (46 %), Australia (43 % y Argentina (43 %).
La tendencia es además a pintarse más de un tatuaje. Según el estudio entre los tatuados, solamente la cuarta parte se conforma con uno, mientras el resto tiene dos o más. La mediana entre los estadounidenses y suecos es nada menos que de casi 4.
En contra de lo que pueda pensarse, los jóvenes, hasta 29 años, no son los que más se tatúan (32 %), quizás porque no andan tan bien de dinero o no lo ven bien en casa de sus padres, donde la mayoría viven todavía. Las personas con edades comprendidas entre 30 y 49 años son las más proclives al tatuaje, 13 puntos porcentuales por encima de los jóvenes.
Los mayores de 50 años, menos propensos a aceptar las modas y más conservadores son los que menos se han tatuado. Las mujeres, quizás con dibujos más pequeños, signos y caligrafías, se tatúan aún más que los hombres (4 puntos porcentuales), aunque en España todavía los hombres ganan por un punto.
Otros datos interesantes de la encuesta es que el tatuaje es más popular entre la gente con más nivel educativo (32 % frente a 26 %) y lo que sí encaja con lo que se pensaba es que esta afición tiene más adeptos en la ciudad que en las zonas rurales. El 72 % de los tatuados asegura que con el tiempo no se han arrepentido, aunque el negocio de borrar los tatuajes ha crecido mucho porque las técnicas, láser, quirúrgicas y cremas, se han abaratado mucho.
El negocio total de la industria global del tatuaje, creadores, máquinas, agujas, tinta, remoción, etc, puede acercarse a los 20.000 millones de dólares, según algunas fuentes.