Qué son y cómo funcionan los seguros
De vida, del hogar, de coches, de decesos… Existen un montón de tipos de seguros que cualquier persona pueden contratar en algún momento de su vida, en función a sus necesidades. ¿Pero qué son y para qué sirven? A continuación te explicamos qué es un seguro, los conceptos básicos de estos contratos, cómo funcionan y los distintos tipos que hay.
Contenido de la información:
¿Qué es un seguro?
Firmar un seguro supone una relación contractual entre un individuo u objeto (asegurado) y la empresa que ofrece los servicios (aseguradora). En este contrato, la empresa se compromete a indemnizar los daños producidos o a ofrecer un capital a cambio en el caso de que se produzca alguno de los hechos que se contemplan en la póliza.
Es decir, si aseguras tu hogar y hay una cláusula que cubre todos los daños provocados por un pico de tensión, si el hecho se produjese, la aseguradora debe cubrir los daños ocasionados. Puede hacerlo ofreciendo un capital a cambio que iguale el precio de todo lo que se te ha roto para que puedas volver a comprarlo. O que, directamente te compre los dispositivos que se han dañado.
Conceptos básicos para entender los seguros
Si necesitas contratar un seguro, puede que empieces a leer ciertos términos que no comprendas del todo. Por ello, hemos consultado a los expertos de Finanzas para todos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, para explicar los conceptos clave de cualquier seguro y que así puedas contratar el mejor para ti.
Lo primero que debes saber es que en un seguro hay varios agentes participantes:
- Asegurador. Es la empresa a la que contratas los servicios. El funcionamiento es sencillo. Como cliente, debes pagar mensualmente una renta a la aseguradora, para que, en caso de que se produzca alguno de los hechos contemplados en el contrato, la empresa ofrezca sus servicios.
- Tomador. Es la persona física o jurídica que contrata los servicios. En ocasiones, si el seguro que quiere contratar es de vida para sí mismo, la figura del tomador coincide con la del asegurado.
- Asegurado. Es la persona u objeto sobra la que se contrata el seguro. Puede ser un bien, el patrimonio de una persona o el individuo en sí mismo.
- Beneficiario. La persona que recibe la prestación económica u otra compensación fijada en el contrato. Esta figura, en el caso de tratarse de un seguro de vida, puede ser la misma que el tomador y el asegurado. Aunque no siempre coinciden.
Por otra parte, en cuanto al documento, hay que distinguir entre los siguientes términos:
- Póliza. Es el contrato en sí en el que quedan detalladas todas y cada una de las cláusulas y condiciones del contrato.
- Suma asegurado. Este concepto hace referencia a la cantidad máxima que la compañía aseguradora va a pagar al asegurado en el caso de que se produzca alguno de los hechos contemplados en el contrato.
- Contingencia o siniestro. Los hechos previstos en el contrato que suponen la actuación de la empresa aseguradora.
- Prima. El precio mensual de la contratación del seguro.
Tipos de seguros
En España, existen dos tipos de seguros:
- Personas
- Daños y patrimonio
Seguros de personas
Dentro de los seguros de personas hay que distinguir entre los siguientes:
Seguros de vida
Los seguros de vida se dirigen a disminuir los posibles efectos que pueda acarrear el fallecimiento de una persona. Pueden ser de ‘caso de fallecimiento’, para que sus descendientes no tengan problemas económicos si el asegurado fallece. Y también pueden ser para ‘caso de supervivencia’. Son los que se contratan para que los ingresos de una persona no disminuyan una vez llegue su jubilación.
El precio de estos seguros depende directamente de los riesgos existentes que puedan aplicarse a cada caso. Si quieres saber más sobre este tema, aquí te explicamos todo lo que necesitas saber sobre los seguros de vida.
Seguro de decesos
Conocido como el seguro de los muertos, es aquel que se encarga de cubrir los costes de los servicios funerarios, siempre y cuando el fallecimiento se produzca dentro del periodo de cobertura del seguro. Descubre más sobre los seguros de decesos.
Seguro de accidentes
Son los que se contratan para que la empresa aseguradora les indemnice si el asegurado sufre un accidente que le produzca el fallecimiento o una incapacidad permanente o temporal.
Seguro de enfermedad
Estas pólizas cubren la indemnización de personas con invalidez permanente.
Seguro de asistencia sanitaria
En este caso la compañía debe hacerse cargo de la atención sanitaria del asegurado.
Seguro contra daños y patrimoniales
A diferencia de los anteriores, en este caso, los daños que cubre el seguro son los que se producen sobre algunos bienes o sobre el patrimonio de las personas. Los hay de distintos tipos:
Seguros del hogar
Son pólizas que incluyen distintas coberturas sobre daños que pueden producirse en una vivienda. Aquí puedes consultar todos los detalles que necesitas saber antes de contratar un seguro de hogar.
Seguros de responsabilidad civil
Es un seguro que se hace cargo de los daños y prejuicios que el asegurado pueda ocasionar a terceros. La compañía es la que paga la indemnización al tercero perjudicado.
Seguros de coches
Los seguros de coches cubren los daños que un conductor pueda ocasionar a terceros, aunque depende del tipo de póliza que tenga contratada. Si quieres saber qué es mejor, si contratar un seguro a todo riesgo o uno a terceros para coches, aquí te ayudamos a elegir el mejor seguro de coche.
Seguros de la hipoteca
Estos seguros los exigen las entidades bancarias al contratar un préstamo hipotecario.