Qué preguntas hacer a un entrevistador para destacar en una entrevista de trabajo
‘¿Tienes alguna pregunta para mí?’ Esta es la frase que el personal de recursos humanos suele hacer a los distintos candidatos antes de finalizar una entrevista. Un momento clave y decisivo que muchos candidatos pierden por no ir preparados para afrontar este tipo de situaciones.
Vittoria Ponti, experta en empleo y manager en Walters People, compañía de selección de personal, explica que en muchas ocasiones las personas que buscan empleo desaprovechan una gran oportunidad de destacar del resto de candidatos en este momento final de la entrevista. Por ello, la experta ha analizado cuáles son las preguntas que le han hecho diferentes candidatos durante las entrevistas de trabajo y que han marcado la diferencia a la hora de pasar el filtro.
Contenido de la información:
- Cómo acabar bien una entrevista de trabajo
- ¿Cuáles son los principales retos a los que me enfrentaría en los primeros meses en el puesto?
- ¿Cuál es la estructura del equipo con el que trabajaría y que esperan de mí?
- ¿Cómo se evalúa el empleo y cada cuánto tiempo?
- ¿Hay algo de lo que hemos hablado que te haga dudar sobre mi candidatura?
- ¿Cuáles son los próximos pasos y cuándo podré tener un feedback?
Cómo acabar bien una entrevista de trabajo
Las preguntas que puedes hacerle a tu entrevistador al final del encuentro pueden servir para destacar frente a otros candidatos en un proceso de selección. Es un momento decisivo en el que el entrevistador pregunta si el candidato tiene alguna duda o quiere saber algo más sobre el puesto o empresa. El problema, explica Ponti es que, cuando se hace esta pregunta, muchos candidatos se relajan y ya dan por terminada la entrevista.
Sin embargo, insiste, este es un momento muy interesante para cambiar roles y poder poner sobre la mesa cuestiones que no se han abordado durante la entrevista y que pueden dejar muy buena impresión. Por ello, a continuación se detallan las principales preguntas que pueden hacer los candidatos para destacar en el proceso de selección al finalizar una entrevista. Se trata de unas cuestiones que se suman a otras recomendaciones de expertos en el sector sobre lo que no hay que hacer en una entrevista de trabajo.
¿Cuáles son los principales retos a los que me enfrentaría en los primeros meses en el puesto?
Con esta pregunta, el candidato muestra su interés en comprender e interiorizar los desafíos que puedan presentarse en su nuevo puesto de trabajo para prepararse ante ellos.
Es una manera, explica Ponti, de demostrar la proactividad del candidato, así como que cuenta con habilidades necesarias para aplicar estrategias efectivas en la resolución de problemas.
¿Cuál es la estructura del equipo con el que trabajaría y que esperan de mí?
Demostrar interés por el resto de miembros del equipo y no solo por el que puede ser el futuro jefe puede evidenciar que el candidato es un buen trabajador en equipo que quiere alinearse con la dinámica de trabajo del grupo.
Una habilidad que cobra especial importancia, puesto que, tal y como explica Ponti, en las descripciones de las ofertas de empleo es habitual leer como requisito que una persona tenga capacidad para trabajar en equipo. Se trata de una soft skill que, en ocasiones, es muy difícil de abordar en una entrevista, por lo que haciendo este tipo de pregunta se deja claro que el candidato piensa e el equipo y que quiere encajar bien en él desde el primer momento.
¿Cómo se evalúa el empleo y cada cuánto tiempo?
Esta es una pregunta que, según Ponti, denota el interés del candidato por recibir retroalimentación continua sobre su trabajo. Una cuestión que puede posicionarse como un candidato comprometido con su desarrollo profesional a lo largo del tiempo, su flexibilidad y las ganas de aprender de forma constante.
¿Hay algo de lo que hemos hablado que te haga dudar sobre mi candidatura?
Ponti detalla que esta podría considerarse casi una pregunta trampa. Porque en estas situaciones, el entrevistador señalará cuáles son los puntos débiles del candidato y este tendrá una segunda oportunidad para justificarse y expresar con detalle todos estos aspectos. Es una buena manera de venderse y de aclarar cualquier comentario desafortunado o malentendido que hubiera podido surgir en la conversación.
¿Cuáles son los próximos pasos y cuándo podré tener un feedback?
Para terminar, hacer una pregunta sobre qué viene ahora y los tiempos de cada etapa del proceso denota confianza y real interés en el puesto. Además, concluye Ponti, fortalece la relación con el entrevistador, que será más propenso a proporcionar un feedback detallado y minucioso, así como a comprometerse con los timmings dados.