Qué pasa si un gestor hace mal la declaración de la Renta

Contratar a un profesional para que haga la declaración es una de las alternativas al alcance de los contribuyentes que no saben hacer la Renta. Se trata de una vía rápida mediante la que un gestor reúne todos los datos personales y económicos de un contribuyente para confeccionar el borrador y enviarlo a la Agencia Tributaria. ¿Pero, qué pasa si el gestor hace mal la declaración de la Renta? Ausencia de datos, un error en las cifras o cualquier otro aspecto que esté mal en la declaración es motivo de sanción en Hacienda.

¿Quién tiene la culpa, el contribuyente o el gestor?

Si hay algún error en el documento de la Renta, es fundamental actuar con rapidez para subsanarlo. ¿El objetivo? Que este fallo se quede en un simple susto y poder saldar las cuentas con Hacienda dentro de plazo y evitar posibles consecuencias legales por errores en la declaración.

Por otra parte, hay que tener en cuenta que a ojos de la Agencia Tributaria, por norma general, es el contribuyente es el que tiene la responsabilidad de asumir estos fallos. Aunque haya sido un gestor el que haya confeccionado la declaración. Es decir, que aunque el ciudadano tenga que asumir el precio de lo que cuesta que un gestor haga la declaración de la Renta, no significa que pueda olvidarse del trámite porque pueden producirse errores o fallos en el camino.

Ahora bien, la responsabilidad no solamente recae sobre el contribuyente si el gestor tiene culpa de la existencia de los fallos contenidos en la declaración. Si los errores del documento son consecuencia directa de que el contribuyente ha ocultado información al gestor o le ha dado mal los datos, la responsabilidad recae sobre el titular del documento. Mientras que si el fallo es a causa de una mala confección por parte del gestor, las responsabilidades, consecuencias y multas también se extienden a la gestoría.

Hay otra excepción a la norma y es en aquellos casos en los que existe un representante legal que realiza el documento en nombre de un tercero. En este supuesto, la culpa de los errores recae sobre el representante.

Qué hacer si el gestor ha presentado mal la declaración

Para subsanar o modificar cualquier dato que esté mal en la declaración de la Renta, el contribuyente tiene varias opciones, desde realizar una petición para corregir errores, hasta realizar una declaración complementaria de la Renta. Estas son las dos posibilidades para modificar una declaración ya presentada y, por tanto, para subsanar los posibles errores que contenga.

De forma paralela, si el contribuyente quiere, puede presentar una reclamación al gestor mediante notario por los perjuicios que este le haya podido ocasionar. Una situación que puede darse si el fallo del documento es responsabilidad única de la empresa gestora.

Cuál es la multa por una declaración de la Renta mal hecha

Las sanciones de la Agencia Tributaria por presentar mal o con errores la declaración de la Renta varían en función del error cometido y de la gravedad del mismo. Aunque, en cualquier caso, se trata de una multa económica que puede llevar asociados intereses de demora. No hay que confundir esta multa con las sanciones por no presentar la Renta o hacerlo fuera de plazo.

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