Qué es un neobanco y en qué se diferencia de un banco tradicional

Los neobancos son instituciones financieras que se caracterizan por realizar todas las gestiones y desarrollar su negocio, usando única y exclusivamente los canales digitales para ello. No tienen oficinas físicas ni sucursales a las que acudir y todo lo relacionado con sus productos o compañía debe hacerse por internet, a través de los canales habilitados para la comunicación empresa-cliente.

Pero más allá de la forma de contacto e interacción entre los clientes con la compañía, estos bancos presentan alguna que otra diferencia respecto a las entidades financieras tradicionales. Unos aspectos que hay que tener en cuenta antes de contratar cualquier servicio para evitar cualquier problema o malentendido.

Qué es un neobanco

El Banco de España explica que esta se trata de empresas financieras que hacen sus gestiones y negocio a través de canales digitales y que se caracterizan por no tener ni oficinas ni sucursales bancarias físicas a las que acudir.

Por el contrario, la gestión para ofrecer los productos y servicios de siempre se hace íntegramente por internet, desde la banca online hasta el uso de aplicaciones. Y de la misma manera que las entidades tradicionales, ofrecen en su catálogo cuentas de pago, tarjetas y hasta préstamos. Aunque con la particularidad de que apuestan por este tipo de gestión y comercialización de sus productos, lo que les permite asumir menos costes. Dado que no tienen oficinas físicas y no ofrecen a sus clientes la posibilidad de realizar gestiones en persona.

Sin embargo, esto no quiere decir que no ofrezcan un servicio de atención al cliente. Por el contrario, cuentan con una interacción con los clientes similar a la de los bancos tradicionales, pero a través de la vía online.

Diferencias con los bancos tradicionales

Las diferencias de los neobancos frente a los tradicionales pueden resumirse en dos grandes puntos:

• Por un lado, en que en estos neobancos no es posible hacer gestiones de forma física, sino que todo se reduce a la banca digital.
• Por otro, las diferencias pasan porque hay neobancos que no se registran como entidades de crédito, sino bajo otras modalidades de negocio, lo que implica cambios en las posibilidades de operar en ellos y en la salvaguarda o protección del dinero ante posibles quiebras.

Qué es un neobanco según los modelos de negocio

Algunos de ellos están registrados en el Banco de España como entidades de crédito, lo que supone que están sometidos a su regulación y que el dinero depositado en estas empresas está cubierto por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).

Pero no todos. Hay otros que operan bajo diferentes modalidades de negocio. De tal manera que pueden registrarse como entidad de dinero electrónico o asociarse a una ya constituida. Estas son entidades que se dedican a emitir dinero electrónico.

También operar como entidades de pago o prestar únicamente servicios de agregación de cuentas e iniciación de pagos. Las primeras son un tipo de entidad que permiten hacer determinadas gestiones, como el ingreso o retirada de efectivo, ejecución de operaciones de pago o el envío de dinero, entre otros. Mientras que las segundas son las que permiten a los usuarios acceder desde una app a la información agregada a las cuentas de pago accesibles en línea.

En la práctica, esta diferencia implica que mientras que las entidades de crédito dan acceso a un abanico de operaciones más amplio, las otras se limitan al ámbito de los pagos. Y, lo más importante, las entidades de crédito protegen el dinero bajo el FGD, pero las otras no cuentan con esta garantía. Por todo ello, antes de contratar los servicios financieros en alguna de estas entidades, convine comprobar de qué forma operan y cuáles son los servicios que puede prestar. Es posible saberlo a través del registro oficial de entidades elaborado por el Banco de España.

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