Qué es el alquiler social: requisitos y cómo solicitarlo a los bancos
Un alquiler social es, básicamente, una vivienda en la que se paga una renta mensual inferior que en el mercado libre y que está dirigida a personas que no tienen los ingresos suficientes para acceder a una vivienda en condiciones normales.
Los alquileres sociales en España están gestionados por el Fondo Social de Viviendas, por la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) y por las propias entidades bancarias que poseen pisos y que comercializan también por su cuenta.
Contenido de la información:
Solicitud
Si quieres solicitar alguna de las viviendas de alquiler social de la Sareb en España, tienes varias opciones:
En primer lugar, tienes que elegir y comparar las convocatorias y listas de viviendas de alquiler social de todas las entidades bancarias. Puedes ver los pisos de alquiler social disponibles en estos enlaces:
Fondo Social de Viviendas. La entidad tiene viviendas de las siguientes inmobiliarias de bancos:
- Pisos de alquiler Solvia
- Pisos Altamira
- Pisos Liberbank
- La Caixa alquiler social
- Alquiler Haya Inmobiliaria
Por otra parte, también existen convocatorias de pisos de alquiler social a nivel autonómico. Te dejamos el listado completo de los programas de alquiler social que existen:
Alquiler social en Castilla-La Mancha
Después de realizar la búsqueda y encontrar el piso que más se ajuste a tus necesidades, tienes que iniciar la solicitud en la entidad concreta.
Para ello, tienes que completar un modelo de solicitud, tal y como te explicamos en cada una de las guías que te acabamos de enlazar, y entregar toda la documentación que te soliciten. También puedes concertar una cita para ver la vivienda y firmar el contrato de alquiler. En cada uno de los artículos que te hemos dejado enlazados unas líneas más arriba puedes informarte con detalle del proceso a seguir en cada una de las entidades bancarias y comunidades autónomas.
Además, en 2021 el Gobierno prometió ya la cesión de viviendas de la Sareb para destinarlas al alquiler social. También en 2023, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prometió 50.000 viviendas en alquiler de la Sareb.
Aquí te indicamos qué hay que hacer para tener un alquiler social de la Sareb.
Los alquileres sociales son un programa del Gobierno que tiene como objetivo ofrecer viviendas a personas que se encuentren en alguna de las siguientes circunstancias:
- Haber perdido su vivienda por no poder pagar la hipoteca
- Encontrarse en riesgo de exclusión social
- Personas jóvenes o mayores de 60 años con pocos ingresos que se ajusten al resto de requisitos específicos en cada caso.
Las principales diferencias entre un alquiler social y un arrendamiento del mercado libre son:
- La renta a pagar es inferior que en los alquileres del mercado libre
- El pago del alquiler no puede suponer más de un porcentaje concreto de los ingresos anuales familiares
- El contrato de este tipo de alquileres es de 2 años como máximo. Aunque puede existir opción a prórroga si el inquilino sigue cumpliendo las condiciones. Por ello, durante este periodo no te pueden echar de un alquiler social.
Requisitos
Los requisitos y condiciones para acceder a una vivienda de alquiler social dependen de cada entidad bancaria u organismo que gestione y publique las convocatorias de los pisos. Aunque en términos generales, los requisitos son los siguientes:
- No puedes tener vivienda en propiedad
- Los ingresos no pueden superar unos límites máximos
- Hay que ser mayor de edad
- No recibir ingresos ni prestaciones
En resumen, el objetivo del alquiler social es proteger y asegurar el acceso de una vivienda a todas las familias que se encuentren en riesgo de exclusión social. Sobre todo para aquellas personas que mantienen un nivel de deuda con el banco por no poder hacer frente al pago de la hipoteca.
Hay que tener en cuenta que no se trata de un servicio exclusivo para familias, sino que el alquiler social es una iniciativa que pueden solicitar todas las personas que lo necesiten, desde las propias familias hasta las personas mayores o los jóvenes que se encuentren en situación de necesidad. Aunque hay que tener en cuenta que la resolución de este tipo de peticiones no suele ser inmediata. La concesión y aprobación de este tipo de alquiler social suele demorarse unos seis meses.