¿Qué cortezas de queso se pueden comer y cuáles son peligrosas para la salud?

Queso con corteza comestible.
NOTICIA de Cristian Pinto
18.06.2024 - 11:51h    Actualizado 18.06.2024 - 11:54h

El queso es uno de los alimentos más empleados en la gastronomía de varios países. Suaves, intensos, duros, blandos, curados, semicurados, tiernos, de cabra, de oveja, de vaca y un largo etcétera. Siempre hay un tipo de queso que se adapta a cada paladar. Pero, ¿alguna vez te has parado a pensar cómo se elabora el queso?

Cuando vas a empezar una cuña de queso, seguramente retires la capa externa. Esta corteza es un elemento protector para este alimento. Ojo, porque algunas cortezas son comestibles y puedes estar desaprovechando el producto. En esta información te detallamos cuáles se pueden comer y cuáles no.

Y, si eres un amante del queso, puedes probar a hacer la tarta de queso de Eva Arguiñano y sorprender a tu familia y amigos.

Función de la corteza

La corteza del queso es una capa superficial que recubre el alimento y puede estar elaborada de varias formas. La función principal de la corteza es proteger el interior del queso y evitar que se forme el moho. De este modo, el producto se puede conservar durante un mayor tiempo y favorece la correcta maduración. Por ello, más que un elemento que dé sabor al queso, es un protector que ayuda a conservar la humedad ideal.

Eso sí, debes saber que existen dos tipos de cortezas: naturales y artificiales.

Álvaro Fernández, más conocido en redes sociales como @farmaceuticofernandez, ha detallado en un vídeo el tipo de cortezas que sí son comestibles y las que nunca puedes ingerir.

Qué cortezas se pueden comer

En el caso de las cortezas naturales, estas están compuestas de pimentón, aceite, vino o especias aromáticas que son totalmente comestibles. Además, estas aportan un sabor especial al queso, por lo que no se recomienda la retirada a la hora de consumir.

Corteza de queso natural.

Durante el proceso de maduración del queso también se puede formar una corteza más dura sin la necesidad de añadir ningún ingrediente. Estas cortezas naturales forman parte del propio queso, pero con una parte más dura por fuera.

Nunca comas estas cortezas de queso

Por otro lado, las cortezas artificiales suelen estar compuestas por cera, parafinas o aceites minerales. Eso sí, deben cumplir estrictamente con el Real Decreto 1113/2006, de 29 de septiembre, por el que se aprueban las normas de calidad para quesos y quesos fundidos.

Por norma general, los quesos más baratos del supermercado suelen incluir un tipo de corteza artificial hecha de cera y plásticos. En estos casos, aunque no sean componentes tóxicos y no presenten un grave problema de salud, el farmacéutico Álvaro Fernández recomienda no ingerirlas porque no aportan nada.

Ojo, porque algunas cortezas naturales de quesos de calidad pueden presentar moho o haber estado expuestas a agentes externos. De este modo, lo más recomendable es retirar la corteza antes de consumir el queso y evitar así una mala digestión.



WhatsApp Casacochecurro