Por qué la orina huele mal
¿Has ido al baño a orinar y has notado un olor desagradable? Lo primero, no hay que asustarse. El olor fuerte no tiene por qué significar que algo va mal. De hecho, en la mayoría de los casos, el cambio de olor de la orina no es síntoma de enfermedad, sino que es algo puntual que desaparece con el tiempo. Sin embargo, si el mal olor persiste y es continuado, es recomendable acudir al médico para que te examine y pueda emitir un diagnóstico.
Las causas más comunes que provocan el mal olor de la orina son la falta de hidratación, la infección urinaria o cistitis o como efecto secundario de haber comido algún alimento.
Contenido de la información:
Por qué huele la orina
La orina siempre desprende cierto olor, aunque de manera general suele ser neutro y bastante suave para el olfato. Este olor característico es consecuencia de la presencia de la urea, que es un componente presente en la orina. A mayor cantidad de concentración de urea, mayor olor.
De hecho, al hablar de mal olor de la orina hay que distinguir entre los distintos aromas e intensidades que puede tener. Los expertos de Medline Plus establecen un total de tres olores distintos: fétido, dulce y a moho. Cada uno de ellos está asociado a una causa o problema distinto. Motivo por el que es fundamental saber distinguirlos.
Motivos por los que la orina huele mal
Algunas de las causas que pueden provocar una mayor concentración de urea en la orina y, por tanto, aumente la intensidad de su olor son las siguientes:
Comer determinados alimentos
Esta es una de las causas más habituales que provoca un olor fuerte característico de manera temporal y que no supone ningún problema médico. Hay alimentos que son diuréticos, es decir, que contribuyen a eliminar toxinas del organismo. Por ello, la orina huele más fuerte.
Uno de los más conocidos es el espárrago, tanto el verde como el blanco. Pero también destacan otros alimentos como el salmón, el café, el ajo o la cebolla.
Deshidratación
Si sueles beber poca agua, puede que este mal olor sea consecuencia de ello. Recuerda que en verano es recomendable beber tres litros de agua al día, sobre todo, en estas épocas de mayor temperatura para evitar un golpe de calor.
De hecho, la orina es uno de los indicadores que recuerda cuánta agua has bebido para saber si estás bien hidratado. Cuanta más cantidad ingieras en un tiempo determinado, menos olor y de un tono más claro es la orina. Mientras que, por ejemplo, después de dormir toda la noche, al ir al baño, la orina suele ser algo más oscura y tener mayor olor.
Para conseguir que se reduzca el olor en este caso, solamente hay que beber más agua al día y lo notarás.
Todas estas recomendaciones cobran una mayor relevancia si haces deporte de alta intensidad en verano. Al sudar, el organismo pierde líquidos y sales minerales que hay que reponer. Por ello, no beber suficiente agua al hacer ejercicio, puede provocar deshidratación y un olor fuerte de la orina
Tratamiento médico
Tomar algunas pastillas o medicamentos bajo tratamiento puede provocar este efecto en el organismo. No supone peligro ni es motivo de alerta, siempre y cuando el olor sea temporal y desaparezca una vez el cuerpo elimine este medicamento.
Infección de orina
Las personas que sufren infección de orina saben bien que la orina huele más fuerte en estas épocas. Esta es una infección que afecta mucho más a las mujeres que a los hombres y es muy incómoda, puesto que los síntomas más habituales son las ganas constantes de ir al baño y el escozor al hacerlo.
Para evitarlo, en este caso, además de mantener una higiene y limpieza constante y evitar coger frío, hay algunos tratamientos que ayudan a prevenirlo. Uno de ellos tiene que ver con los frutos rojos, en concreto las pastillas de arándano, puesto que ayudan a prevenir esta infección.
Indicador de diabetes
En ocasiones, un olor dulzón de la orina puede ser un síntoma de tener diabetes avanzada. Cuando el organismo detecta un exceso de glucosa en personas con esta enfermedad, la envía a los riñones para que la expulsen mediante la orina. De ahí el olor dulce. En este caso, es fundamental acudir al médico para valorar la situación y que pueda realizar un diagnóstico.
Problemas hepáticos
Si el olor de la orina es muy desagradable, como a moho, puede ser problema de un fallo hepático o problema en los riñones. En estos casos, sí es síntoma de gravedad que hay que tener en cuenta y acudir a un médico cuanto antes.
Fístula en la vejiga
Si el olor de la orina es fétido, como podrido, puede ser consecuencia de una fístula en la vejiga. Problema que se produce cuando hay una filtración y se comunican el recto y la vejiga. Si desde el recto se cuelan partículas fecales a la vejiga, aparece un olor pestilente. En estos casos también es importante acudir al médico para que pueda examinar el problema y diagnosticar un tratamiento.