El poder que tiene el WhatsApp en una relación de pareja

¿Cómo afecta el WhatsApp a las relaciones de pareja? El WhatsApp puede ser muy utilizado para la primera parte de una relación, en la que os estáis conociendo, pero en las fases posteriores de la relación, este método de comunicación puede ser un problema.

Te contamos por qué.

Cómo influye WhatsApp en una relación de pareja

Los españoles utilizamos el WhatsApp a diario y sin ningún lugar a dudas aplicaciones como esta suponen un cambio en la forma de comunicación de la sociedad en general y también en las diferentes relaciones de pareja, ya sea de forma positiva o negativa.

Primera fase: romper el hielo

Esta aplicación puede hacer que hables con esa persona que tanto te gusta, en el caso de que no te atrevas a hacerlo a la cara. De esta manera puedes hablar algunos temas que a la cara nunca hubieras podido.

Segunda fase: más romanticismo

Una vez que el momento de conquista haya finalizado, se pasa a una fase más seria de una relación, en el que es necesario ser detallista y WhatsApp también te puede ayudar en ese momento tan especial de la pareja, por ejemplo mediante enviar un mensaje de texto al trabajo para ver qué tal va su jornada laboral.

Tercera fase: comienzan los problemas

>> Cómo saber si espían mi WhatsApp
En el momento en el que una pareja empieza a ser más estable, el WhatsApp puede traer problemas a la pareja debido a que los momentos que tenéis para vosotros pueden ser interrumpidos al hablar con otras personas que no están presentes. Eso es un problema para la relación.

Ver cuándo ha visto el último WhatsApp

Además, en el WhatsApp puedes ver en qué momento la otra persona ve los mensajes (el doble check azul de visualización o de que no has visto el mensaje) y esto puede suponer problemas porque, por ejemplo, tu pareja te ha mandado un mensaje y lo has leído pero no has contestado. Esto puede suponer enfrentamientos en la pareja. También se puede ver la última hora de conexión de la otra persona, y con esa última conexión se pueden sacar muchas conclusiones que pueden acabar en una fuerte discusión.

Hay dos formas de comprobar la hora en la que tu pareja o cualquier otro contacto ha leído el mensaje que le has pasado.

La primera manera es a través de WhatsApp Web y, además de tenerlo instalado en tu ordenador y entrar al programa debes hacer doble clic en el doble check azul del mensaje en el que quieras ver si tu destinatario lo ha leído. Entonces al hacer el doble clic abrirás una ventana y ahí podrás ver qué persona ha leído el mensaje y a qué hora.

La segunda manera de comprobar si otra persona ha leído un mensaje es pulsando en la fecha que aparece en el mensaje y después pinchar en ‘Información’, entonces también aparecerá la ventana con la información de la primera manera de comprobar si ha leído un mensaje.

Por todas estas razones, algunas veces el WhatsApp puede ser beneficioso para una relación y otras veces puede ser muy traicionero.

Los distintos usos del WhatsApp, los sms y el correo en las relaciones de pareja

¿Cuáles son los distintos usos del WhatsApp o de tecnologías informáticas entre las parejas? Declárate por SMS, confírmale que le quieres por WhatsApp y déjale por correo electrónico. Las tecnologías de la comunicación están cambiando la forma de relacionarnos. Nos permiten una relación más directa, fluida y, sobre todo, más continua. La nueva forma de interactuar con quienes nos rodean se refleja también en las relaciones sentimentales. Según investigaciones llevadas a cabo en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), las parejas o las personas que desean serlo han adaptado su lenguaje y su forma de interactuar a los nuevos canales disponibles, que son muchos.

Así, el tan popular WhatsApp (casi 1.350 millones de personas lo usan a diario) es utilizado por las parejas estables para reforzar su compromiso.

Usos del WhatsApp

Según Mireia Fernández, investigadora de la UOC y experta en las implicaciones sociales de la telefonía móvil, “las parejas usan los móviles, ya sean los SMS o la mensajería instantánea como WahtsApp, para “decirse cariñitos”, para quedar y hasta para gestionar el día a día y tomar decisiones menores, como por ejemplo comprar algo para la casa. Las aplicaciones más avanzadas permiten mandar fotografías al instante e incluso mensajes de voz, lo que las convierte en el medio ideal para que las parejas estén en contacto constante, sin necesidad de hablar delante de los demás, por lo que preservan la intimidad. Además, como son gratis, pueden usarse continuamente”.

Esta nueva aplicación de los teléfonos inteligentes (smartphones) ha dejado un poco atrás a los SMS, tan utilizados hace solo unos años. Aunque las parejas siguen usando los SMS, sobre todo al principio de la relación, para manifestar su interés, para declararse o para confirmar el enamoramiento en los primeros momentos de la relación, explica el profesor Francesc Núñez, director del programa de Humanidades de la UOC y experto en sociología de las emociones, pasado ese primer momento, la relación de pareja cambia y también cambia el canal para comunicarse.

El mensaje por correo electrónico, por su parte, según el profesor Núñez, sirve para que las parejas se envíen reflexiones más profundas. Por ejemplo, después de una discusión pueden disculparse tras haber reflexionado, puesto que no necesita una respuesta inmediata. Aunque este uso es minoritario, las parejas sí utilizan el correo electrónico habitualmente para hacer planes e intercambiar información, como puede ser organizar un viaje a la playa o intercambiar opiniones sobre cuál es el sofá más bonito para el salón. Fernández apunta que también es utilizado por las parejas, paradójicamente, para romper una relación, puesto que, aunque no esté bien visto, puede resultar más fácil que decirlo cara a cara.

Las redes sociales son también un medio de relación para las parejas, aunque se trate de una comunicación pública. Sobre Twitter, Francesc Núñez explica que de sus investigaciones se desprende que es una red poco utilizada por las parejas estables en su relación habitual. Sin embargo, podemos ver a diario a personajes famosos que lo utilizan como un escaparate para anunciar noviazgos, bodas, declaraciones de amor y -¿cómo no?- rupturas.

En cuanto a Facebook, es poco utilizado por las parejas para interactuar entre sí, puesto que en el lado negativo de esta red social se trata más de un nido de envidias. Por eso es normal que cada miembro de la pareja tenga un perfil individual y, aunque tengan acceso mutuo a los perfiles, lo utilicen más para relacionarse con amigos o familiares. Mireia Fernández apunta que también se usa como un canal para ligar, incluso comenta que “es muy habitual que aumenten las solicitudes de amistad de personas del sexo contrario según sea la foto que se cuelgue en el perfil”.

Los hombres son más vigilados en Facebook por sus novias o esposas

El número de hombres, de edades comprendidas entre los 25 y los 34 años, cuyas novias o esposas instalan una aplicación de monitoreo en sus cuentas de redes sociales, es más del triple que el número de mujeres, según el estudio realizado por Bitdefender entre 1.605 voluntarios. Las mujeres controladas disminuyen a medida que sus parejas son más mayores (de 35 a 44 años). Aunque todavía sigue siendo dos veces más frecuente que la de los hombres que vigilan a las mujeres de su misma edad. Así, la actividad en Facebook de los hombres jóvenes tiene casi tres veces más probabilidades de ser controlada que la de las mujeres de su misma edad.

“Los celos son un disparador emocional fuerte, y hace parecer a las mujeres más curiosas que los hombres, cuando se trata de la actividad de su pareja en las redes sociales” afirma Catalin Cosoi, Chief Security Strategist de Bitdefender. “En el mundo digitalizado actual, las relaciones sociales online y su alta apuesta en fidelidad, están consideradas fuentes de estrés para una pareja joven”.

Los resultados del estudio también muestran que las mujeres americanas e inglesas están más predispuestas a monitorear la actividad de Facebook de sus parejas. Más del 67 % de las cuentas de usuarios de EE. UU. o Reino Unido que han participado en el estudio, eran de hombres. Alemania ocupa el segundo lugar, con el 66 % de los hombres controlados en Facebook, en comparación con el 44 % de las mujeres alemanas. Alrededor del 60 % de los hombres franceses y españoles son vigilados en la red.

Los celos provocan que seis de cada diez espíe el móvil de su pareja

Se dice que los celos son la enfermedad del amor; un sentimiento motivado por la desconfianza y el miedo a la infidelidad que muchas veces acaba en ruptura. Pero, ¿y si hubiera algún indicio de cuernos en una relación? Ante la duda, el 60 % de los españoles prefiere mirar a escondidas el móvil de su pareja y así poner fin a todo tipo de sospecha, según un estudio elaborado por FriendScout24, plataforma de ‘online dating’.

El informe -elaborado entre un total de 2.500 hombres y mujeres- pone de manifiesto que en el ámbito sentimental los celos pueden perjudicar gravemente las relaciones de pareja. De ahí que el 51 % de los encuestados reconozca haber sufrido un descalabro amoroso por las dudas infundadas de su, hasta entonces, media naranja.

Sin embargo, a pesar de que el 63 % de los internautas no se considera una persona celosa, sí reconocen reaccionar de forma posesiva cuando le dan motivos para ello. Controlar las salidas de su pareja, ver por dónde se mueve o interrogarle cada noche cuando sale de fiesta son algunas de las actitudes más comunes.

Los ex ¿piensa mal y acertarás?
Los ex son la principal causa que aviva los celos en una pareja y más cuando se guarda una buena relación con ellos. Según la encuesta, siete de cada diez españoles reconoce haber sentido celos de algún ex, siendo partidarios del ‘donde hubo fuego siempre quedan cenizas’.

Top 5 de los celos: Motivos

– buena relación con exnovi@s

– hablar con gente desconocida cuando vas de fiesta

– quedar entre semana con los amigos

– hacer planes de fin de semana con los amigos

– dedicar muchas horas a Internet y a las Redes Sociales

Tras los ex, el estudio refleja que otro de los motivos para estar celoso es salir juntos de fiesta y que uno de los dos se pase horas hablando con desconocidos. Ante esta situación y para calmar la “pelusa”, más de la mitad de encuestados hace todo lo posible por romper la conversación y dejar bien claro quién es su chic@.

Los amigos también pueden llegar a provocar ataques de celos en una relación sentimental. El 35 % de los encuestados cree que dedicar más tiempo entre semana a los “colegas” o hacer más planes con ellos de lo normal puede desembocar en un conflicto amoroso.

Finalmente, Internet y los social media también son causa justificada para irritar a la pareja. Según el 15 % de los encuestados, pasar horas y horas en el Facebook, conocer gente online o acudir a eventos convocados en las redes sociales, puede dar pie a discusiones conyugales alegando falta de atención.

Facebook o WhatsApp provocan muchas rupturas de parejas

Celos, inseguridades, envidias, desconfianza… Todo se junta en Facebook y WhatsApp cuando se trate de la actividad que hace nuestra pareja si no confiamos y pensamos que nos puede ser infiel. Si bien la crisis ha frenado el número de divorcios, muchas rupturas de parejas están provocadas por las redes sociales como Facebook, las aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp y la comunicación electrónica en general. Todas ellas pueden estar detrás de las relaciones de pareja que llegan a su fin.

Todos estos nuevos sistemas de comunicación han facilitado y amplificado las relaciones sociales, lo que puede tener efectos en la vida en pareja”, advierte Francesc Núñez, director del programa de Humanidades de los Estudios de Artes y Humanidades de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), aunque siempre puedes dejarlo atrás y decidirte a borrar tu WhatsApp.

Divorcios por WhatsApp o Facebook
Los datos del Instituto Nacional de Estadística muestran, un año más, cómo la crisis explica la reducción del número de divorcios ante el alto coste económico que supone separarse. Así, en los años previos a la crisis el porcentaje de divorcios superó el 3 % mientras que desde 2009 se sitúa entre el 2,3 % y el 2,4 %. “Las estadísticas parecen indicar que la situación económica en España ha frenado la tendencia al alza que habían tenido los divorcios y que, significativamente, llegó a su máximo histórico en 2006, antes de la crisis. A partir de entonces la cantidad fue deshinchándose ligeramente. Como acostumbra a decirse, la hipoteca y los hijos son dos cimientos sociales más fuertes que el amor. “Y es que la pareja, como el divorcio, es una cuestión de principios y valores, pero también de constreñimientos y circunstancias”, explica Núñez.

Facebook ha provocado 28 millones de rupturas de pareja
En este sentido, hay que recordar que la revista Cyber Psychology and Behaviour Journal publicó en marzo un estudio en el que afirmaba que desde 2004 –año de la creación de Facebook– esta popular red social ha sido la causante de 28 millones de rupturas de pareja en el mundo. Otra prueba de cómo las redes sociales afectan a las relaciones sentimentales son los datos de la Asociación Norteamericana de Abogados Matrimoniales, que el año pasado calculó que un 20 % de los divorcios producidos en 2011 en los Estados Unidos tenían su origen en el uso de Facebook.

“Los seres humanos nos movemos entre dos grandes tensiones. Por un lado, nos atrae la posibilidad de iniciar nuevas relaciones, la posibilidad de nuevos principios, de emociones intensas, pero, por el otro, también nos gusta tener relaciones duraderas y sabemos que la fidelidad y la confianza son su base”, afirma Núñez. “En la vida de pareja –prosigue– a menudo sufrimos conflictos entre estos extremos. Además, actualmente, la mayor facilidad para comunicarnos con otras personas aumenta la tensión y el sufrimiento a la hora de gestionar estas dos fuerzas. Y es que ahora es mucho más fácil abrirnos a nuevas relaciones y la imaginación le dice al corazón que hay muchos más amores potenciales… los cantos de las sirenas”.

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Esta facilidad a la hora de comunicarnos con los demás se convierte, según este experto, en un potencial liberador de los constreñimientos económicos. “Frente a vidas deprimidas por una situación que puede resultar límite, como es una crisis, las redes sociales abren todo un campo de fantasías y permiten soñar con la promesa de un futuro mejor y una vida más llena gracias al amor. Porque un nuevo amor siempre promete una vida mejor y a menudo comporta una revolución en la que uno está dispuesto a dejarlo todo, a quemar el pasado. La clave para entender mucho de lo que pasa en las redes sociales es la imaginación, la creencia de lo que podrá pasar, la atracción de lo desconocido”, apunta el director del programa de Humanidades de la UOC.

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