Pececillo de plata: esto es lo que debes hacer si ves este insecto en casa

Pececillo de plata, langosto, gusano de polvo, lepisma de la harina, lepisma del azúcar, traza, come santos, bicho del zócalo, cucaracha de agua, sardineta, comecuadro o chiripa. Estos son algunos de los nombres utilizados para llamar al lepisma saccharina. Este insecto que posiblemente alguna vez hayas visto por casa suele aparecer en zonas húmedas y con poca luz dentro del hogar, siendo el cuarto de baño su hábitat más habitual.

En esta información te explicamos si son peligrosos estos insectos, cómo evitar su aparición y cómo ahuyentarlos de forma casera, al igual que puedes evitar otras plagas de insectos con plantas.

Qué es un pececillo de plata

El pececillo de plata o lepisma saccharina es un insecto no volador que se mueve de forma rápida. Los habrás podido ver alguna vez entre grietas, rendijas o esquinas del cuarto de baño u otros lugares de la casa con poca luz y humedad. El nombre de este insecto se corresponde con el color plateado que presenta en sus escamas.

Su cuerpo tiene forma de lágrima, de unos 0,5 y 1,5 cm de longitud. Además, cuenta con dos largas antenas en la cabeza y tres apéndices en la parte de la cola.

Qué pasa si me pican

Mucha gente entra en pánico cuando se encuentra un insecto dentro de casa y ya ni hablemos si se posa encima, el grito se puede llegar a escuchar por todo el vecindario. Sin embargo, en el caso de los pececillos de plata, se trata de unos insectos totalmente inofensivos en cuanto a picaduras. No tiene veneno ni muerde.

El gran problema de este insecto viene cuando aparecen grandes plagas en casa. El pececillo de plata huye de la luz y se resguarda en zonas oscuras y húmedas. Es por ello que por las noches pueda ser habitual toparte con estos bichos.

Solo buscan almidón

Como acabamos de decir, los pececillos de plata son unos insectos inofensivos en cuanto a picaduras, pero puede ser un problema para la salud. La principal fuente de alimentación de este lepisma es el almidón, presente en el azúcar, los cereales, el pan, la pasta o las patatas, entre otros alimentos.

Por este motivo es muy importante mantenerlos alejados de la cocina, especialmente de la despensa donde almacenes aquellos alimentos ricos en almidón. Aunque eso no es todo. También pueden roer silicona, papel o cartón. Así que ten cuidado si algún día aparece algún libro o unas fotografías con pequeños agujeros, ya sabes quién ha podido ser el culpable.

Cómo expulsar a los pececillos de plata

Pese a que sean insectos inofensivos, seguro que no quieres que se cuelen en la comida, ¿verdad? Para prevenir su aparición puedes tapar bien las grietas y sellar aquellas juntas de los azulejos del baño por las que se cuelan. Y si ya tienes la plaga en casa, puedes seguir alguno de los siguientes consejos caseros para ahuyentarlos para siempre:

• Lavanda. Esta planta, además de ser útil para ahuyentar a las chinches de casa, su olor también alejará a estos insectos.
• Cedro. Las hojas en forma de púa que tiene esta planta también provoca un olor desagradable para los pececillos de plata.
• Canela. Aunque para las personas el olor a canela sea agradable y se use en perfumes, a estos insectos no les gusta nada. Prueba a poner unos saquitos de canela en polvo en aquellas estancias de la casa donde sea más común su aparición.
• Ácido bórico. Este producto lo puedes comprar en farmacias o droguerías y solo tendrás que colocar un poco en las esquinas y grietas en las que aparecen los lepismas.
• Trampa casera. Ya que les gusta tanto el almidón, coloca una trampa casera. Solo necesitas un tarro con un poco de cereal y tápalo con una cinta. Haz pequeños agujeros para que se cuelen y no puedan salir debido a que no vuelan ni trepan.

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