Nuda propiedad o cómo vender tu casa y seguir viviendo en ella
¿Tu pensión no es suficiente para llegar a fin de mes? Si tienes una vivienda en propiedad y vives con lo justo, en este artículo te proponemos una alternativa, ¿te imaginas poder vender tu casa y seguir disfrutando de ella mientras vivas? Pues sí, es una opción y es lo que se conoce como nuda propiedad de una vivienda.
Si has barajado opciones como la hipoteca inversa, pero no te convence, en este artículo te proponemos que leas con detalle en qué consiste la nuda propiedad. Se trata de una práctica a través de la que una persona puede vender su vivienda, recibir el dinero de la misma y seguir viviendo en ella. Se posiciona como una de las fórmulas que permite usar tu vivienda para mejorar la jubilación sin mudarte ni compartir casa.
Contenido de la información:
Ventajas e inconvenientes del vendedor
- La principal ventaja es que una persona que ponga a la venta su vivienda a través de la nuda propiedad puede recibir un dinero por ella mientras sigue disfrutando de su casa.
- Otro de los beneficios de esta operación es que si el vendedor tiene más de 65 años y esa vivienda es su domicilio habitual no tendrá que tributar por ella en el IRPF.
- La consecuencia directa de vender una vivienda en nuda propiedad es que en caso de haber herederos, no podrán disfrutar de la vivienda, puesto que la propiedad tiene nuevos dueños.
- Entre las obligaciones del vendedor está la de hacer frente a las facturas de luz, agua o gas además de las plusvalías municipales, mientras que el comprador es el que hará frente a los gastos de comunidad, IBI o derramas.
- La gran desventaja para el vendedor es que el precio de la venta de la vivienda experimenta una gran rebaja que dependerá en gran medida de la edad del vendedor y de si en ella viven una o varias personas. A través de estas operaciones el comprador puede obtener una vivienda con un ahorro de entre el 50 y el 80 % en el precio.
Obligaciones y derechos del nuevo propietario
- El comprador de la vivienda tiene los derechos de propiedad, pero no de uso y disfrute del inmueble. El nuevo propietario puede vender esta vivienda a un tercero siempre y cuando respete los derechos del uso y disfrute del primer vendedor.
- El nuevo propietario tiene derechos a realizar obras y mejoras en la vivienda siempre y cuando no afecte ni perjudique a la persona que tiene el usufructo de la vivienda.
- Por otra parte, está obligado a hacerse cargo de las reparaciones del inmueble a respetar el derecho de uso y disfrute del anterior propietario y a hacer frente al pago de los impuestos y tributos correspondientes.
Diferencias con la hipoteca inversa
La hipoteca inversa es un préstamo que se ofrece al propietario y que toma como garantía la vivienda. La principal diferencia con la nuda propiedad es que la finalidad de la hipoteca inversa no es vender la vivienda mientras que en la nuda propiedad sí.
¿Qué es mejor, hipoteca inversa o nuda propiedad?
Según las palabras del consultor inmobiliario Eduardo Molet, depende de cada situación. “Al pequeño propietario le interesa más la venta de la nuda propiedad porque le da más rendimiento que la hipoteca inversa”, concluye. De hecho, señala que esta opción “permite a los mayores monetizar más y mejor su vivienda”.
Para respaldar la afirmación lo ejemplifica con el siguiente caso. Una persona con 80 años que tiene una vivienda de 400.000 euros, si contrata una hipoteca inversa, recibe una renta de 800 euros al mes o 160.000 euros de golpe. Por el contrario, en nuda propiedad puede llegar a recibir unos 280.000 euros. Este caso ficticio evidencia la diferencia de hasta 120.000 euros de dinero que podría ganar el usuario si elige la nuda propiedad frente a la hipoteca inversa.