¿Merece la pena pedir un préstamo puente para cambiar de casa?
Cambiar de casa es un trámite que no siempre es rápido ni sencillo. La llegada de un miembro más a la familia, un traslado por trabajo o querer mudarte de ciudad son algunos de los motivos más habituales por los que se toman este tipo de decisiones.
¿Pero, cómo comprar una nueva vivienda si no he vendido la actual? Para estas situaciones hay algunas entidades bancarias que ofrecen lo que se conoce como préstamo o hipoteca puente. Un producto bancario específico que permite a los hipotecados cambiar de vivienda y comprar una nueva aún con la hipoteca de la anterior pendiente.
Si quieres saber cómo funciona una hipoteca puente, puedes consultar todos los detalles del proceso de esta operación en la información enlazada. Aunque si lo que quieres es valorar opciones y conocer las principales ventajas y desventajas, te lo explicamos a continuación.
Contenido de la información:
Las 3 ventajas de pedir un préstamo puente
La principal ventaja de contratar este tipo de préstamos es que puedes comprar una vivienda nueva sin las prisas de tener que vender antes la antigua y pudiendo tomarte el proceso con calma. Puedes dedicar más tiempo a la venta de la otra casa y elegir al mejor comprador. Además, al tener la casa nueva antes de vender, no te quedarás sin casa en ningún momento.
En otras palabras, la contratación de este tipo de préstamo ofrece una mayor tranquilidad en el proceso de cambio de casa que ya de por sí es ajetreado. De esta manera, se evitan ciertas gestiones, como traslado de muebles, alquilar un trastero para dejar los enseres o tener que trasladarte de manera temporal a la casa de un familiar porque durante unas semanas te quedas sin vivienda. Es la manera más cómoda de hacer el cambio de vivienda y que ello no suponga un trastorno en la vida diaria.
Otra de las ventajas es que mientras no encuentres comprador para tu vivienda, puedes poner la casa en alquiler y sacar un dinero extra para hacer frente a los gastos. Si encuentras con rapidez a alguien que quiera convertirse en tu inquilino, es una fórmula perfecta para generar ingresos pasivos que te permiten sufragar parte de los gastos del cambio de vivienda.
De manera adicional, al tener la casa alquilada, evitas las preocupaciones asociadas de dejar una vivienda vacía y, en cualquier caso, eliminas por completo que te ocupen la vivienda.
Las 3 desventajas de las hipotecas puente
Al igual que este producto bancario tiene sus ventajas, también tiene una serie de inconvenientes asociados. En concreto, el préstamo puente es un producto bancario que lleva asociado una serie de riesgos. El más evidente es que si una persona que contrata este préstamo no es capaz de vender la vivienda anterior en los plazos marcados, el pago de las dos casas podría volverse inasumible.
Para tomar la decisión en el mejor momento hay que tener en cuenta la situación y contexto económico e inmobiliario del país. Puedes contratar los servicios de un experto asesor inmobiliario para hacerte una idea de si la venta de la vivienda va a ser una gestión medianamente fácil o, si, por el contrario, no es el mejor momento. Es muy importante tener poner todos los datos sobre la mesa porque un impago de la hipoteca y una falta de liquidez acaban convirtiéndose en un auténtico calvario.
Precisamente este es otro de los inconvenientes, que el cliente debe ajustarse a los plazos legales marcados por la entidad bancaria para vender la casa. Porque la concesión de este tipo de hipotecas está sujeta a que el cliente se ajuste a una serie de requisitos marcados por el banco. Y el incumplimiento de alguno de ellos acaba volviéndose en contra de los solicitantes. Motivo por el que no todo el mundo puede acogerse a este tipo de hipoteca. Por el contrario, solo determinados perfiles con buen historial financiero, altos ingresos y estabilidad pueden contratar este tipo de productos.
Por otra parte, al contratar este tipo de préstamos la cuota a pagar cada mes aumenta porque además del interés, se hace frente a la deuda pendiente y, como ambas viviendas actúan como garantía de este préstamo, podrías perder las dos propiedades.
Cómo saber si merece la pena pedir una hipoteca puente
En resumen de todo lo anterior, no hay una respuesta única a esta pregunta. Aunque sí puede decirse que la posibilidad de contratar una hipoteca puente para cambiar de vivienda es una opción a valorar siempre que el solicitante se ajuste a los requisitos marcados por la entidad bancaria en cuestión. Y, de manera adicional, cuando haya una buena viabilidad y situación para que la venta de la casa anterior sea un trámite rápido y sencillo.