Los trabajos que más se adaptan a discapacitados, mayores y mujeres sin experiencia

Los trabajos que más se adaptan a discapacitados, mayores y mujeres sin experiencia
NOTICIA de Javi Navarro
26.10.2009 - 19:16h    Actualizado 03.01.2024 - 11:50h

Las personas con discapacidad, los mayores de 45 años, las mujeres con responsabilidades familiares no compartidas y/o víctimas de la violencia de género y los ex deportistas de alto rendimiento. Todos ellos se enfrentan a un doble desafío: superar las dificultades derivadas de sus circunstancias y encontrar un puesto de trabajo adecuado a sus necesidades y expectativas. Las posibilidades que tienen de incorporarse a una empresa vienen determinadas por su lugar de residencia, formación, aptitudes y experiencia profesional.

Sin embargo, y huyendo de estereotipos, la Fundación Adecco ha identificado ciertas áreas de actividad donde hay trabajos para discapacitados a las que tienen más posibilidades de acceder y que además, en la mayor parte de los casos, gozan de una importante demanda en el mercado laboral a pesar de la crisis económica. Fruto de ello surge el estudio “Empleo y colectivos desfavorecidos”, cuyo objetivo es ser la linterna que ilumine a los que lo tienen más difícil en su búsqueda de empleo.


Sorteo lotería de Navidad 22 diciembre 2024

¿Qué número es el Gordo? Buscador de números premiados para comprobar los décimos de la Lotería de Navidad.

Comprobar Lotería de Navidad 2024


Para destacar sobre el resto de candidatos, en esta información te damos las claves para que sepas cómo hacer un currículum sin experiencia laboral.

En pleno siglo XXI, siguen existiendo prejuicios y estereotipos asociados a los tres primeros grupos, lo que les sitúa en inferioridad de condiciones a la hora de competir en el mercado laboral. Por su parte, los deportistas de elite suelen retirarse a edades muy tempranas y sin apenas formación, lo que dificulta su acceso al empleo y les desorienta a la hora de reconducir su carrera profesional.

  • Para las personas con discapacidad intelectual, existen profesiones repetitivas y rutinarias, que además son muy demandadas en numerosas zonas de España. Es el caso de ordenanza u operario de limpieza.
  • Las personas con discapacidad auditiva tienen un alto poder de concentración, cualidad muy valorada en empleos como grabador de datos.

  • Las personas con discapacidad psíquica u orgánica pueden desempeñar casi cualquier trabajo, aunque se recomienda que no sea estresante. Manipulador de alimentos o preparador de pedidos son algunas de las opciones con más futuro.
  • Los mayores de 45 años deben optar por empleos que transformen su edad en un valor añadido. Suelen integrarse exitosamente en el sector telemarketing o industrial.

  • Para las mujeres con responsabilidades familiares que no tengan experiencia, los empleos relacionados con el cuidado a dependientes se convierten en la mejor opción, puesto que están en auge, sus horarios son flexibles, y en muchos casos la única formación requerida es un Curso de Ayuda a Domicilio.
  • Los ex deportistas de élite suelen ser muy valorados en las empresas como comerciales, profesión además muy solicitada debido a la crisis económica.

Dada la pluralidad y diversidad de situaciones existentes -sobre todo en el caso de las personas con discapacidad- este informe no pretende sentar cátedra ni adaptarse al 100 % de los casos, sino realizar una aproximación a las opciones laborales más adecuadas para estas personas.

Empleos con futuro para personas con discapacidad

Tener limitadas ciertas capacidades no implica carecer de la concentración y las habilidades necesarias para ocupar un puesto de trabajo. Muy al contrario, las personas con discapacidad ven reforzados valores como la motivación, el afán de superación o la responsabilidad. Por tanto, la Fundación Adecco apuesta por ellos como fuerza laboral y trabaja porque no se sientan excluidos de un activo tan vital como empleo.

¿Y en qué sectores tienen más posibilidades de integrarse? ¿Qué puestos de trabajo son más adecuados para ellos? Existen tantas discapacidades, que resulta imposible establecer unos criterios comunes a todas. Sin embargo, podemos clasificarlas en cinco grandes grupos: intelectual, física, sensorial, psíquica y orgánica, dentro de los que expondremos unas opciones laborales determinadas.

Discapacidad intelectual: más metódicos que nadie

Las personas con discapacidad intelectual cuentan con dos cualidades muy valoradas por las empresas: son metódicas y constantes. Lejos de lo que pudiera parecer, la posibilidad de fallo en el trabajo es mínima, porque cuando adquieren una rutina, la interiorizan por completo y no se les escapa ni una: no hay lugar a la dejadez o a la falta de atención.

En este sentido y teniendo en cuenta la complejidad que plantea el mercado laboral, podemos destacar varios empleos en los que encajan de forma muy positiva, pues apenas necesitan apoyo una vez los aprenden. Además, todos ellos siguen generando trabajo a pesar de la crisis económica:

  • Operario/a de limpieza. Se encarga de la limpieza y el mantenimiento de inmuebles. Es un trabajo que no requiere formación y cuyas funciones son rutinarias, repetitivas y sencillas. Su demanda tiende a incrementarse.
  • Reponedor/a. Sus funciones básicas son reponer el género de las estanterías y mantener ordenado el almacén. Estas tareas son rápidas de interiorizar y motivan a los trabajadores con discapacidad intelectual, puesto que advierten que su trabajo es de gran importancia para el buen funcionamiento de la empresa.
  • Ordenanza. Se encarga, entre otras cuestiones, de gestionar el correo diario, repartir la valija interna, acudir a organismos públicos y realizar diferentes tareas administrativas. Es un perfil que sólo requiere una mínima formación en lenguaje y cálculo. Además, su demanda es constante independientemente de la situación del mercado laboral, pues realizan funciones esenciales para su departamento o empresa.
  • Trabajos relacionados con el medio ambiente. La lucha ambiental y la protección de nuestro ecosistema son cuestiones en auge en la actualidad, habida cuenta de la creciente toma de conciencia por parte de los ciudadanos. Asimismo, está demostrado que la interacción de las personas con discapacidad intelectual con el medio ambiente, resulta muy positiva para su desarrollo personal y bienestar emocional. De modo que, naturaleza y discapacidad funcionan como un tándem perfecto. En nuestro país, este nicho de empleo cobra un especial sentido en zonas como Andalucía donde habitualmente se generan empleos relacionados con la gestión del agua y la protección y el mantenimiento de zonas naturales. Además, en determinados territorios de España, y a nivel estacional, las campañas de recogida hortofrutícola y la vendimia, crean puestos de trabajo temporales.

Discapacidad física: empleos que eviten sobreesfuerzos

A diferencia del grupo anterior, las limitaciones físicas se convierten en la única barrera que encuentran estas personas para acceder a un empleo, puesto que su discapacidad no afecta a nivel cognitivo y su formación puede ser muy avanzada.

A grandes rasgos, podemos afirmar que las personas con discapacidad física comparten una característica: no pueden levantar pesos ni realizar sobreesfuerzos, lo que las delimita a trabajos sedentarios y de oficina, en muchos casos con algunas adaptaciones. Aunque resulta difícil generalizar, podemos citar ciertas profesiones que están resultando ser accesibles para las personas con este tipo de discapacidad:

  • Gestor/a de cobros. La crisis ha acentuado la morosidad y estos profesionales son los encargados de garantizar el cobro de impagos. Por otra parte, estamos asistiendo a un importante cambio en la figura del gestor de cobros. El buen negociador ya no se caracteriza por su capacidad de coacción, sino que adopta un estilo asertivo y de comprensión con la persona deudora. En este contexto, algunas empresas están comenzando a interesarse por las personas con discapacidad, pues contribuyen a derribar el estereotipo de profesión agresiva y coaccionadora.
  • Administrativo/a.

    Se encargan de las funciones esenciales de su departamento: documentación, gestión de nóminas, contabilidad, atención telefónica, etc. Para este perfil, son aptitudes muy valoradas el trabajo en equipo, la motivación y la capacidad de comunicación, todas ellas muy presentes en las personas con discapacidad física, ya que sus limitaciones les obligan a reinventarse y desarrollar nuevas habilidades comunicativas día a día. Es un trabajo muy demandado, sobre todo en la coyuntura actual: ante el aumento de la morosidad, se requieren profesionales que realicen el control de facturas, albaranes y pedidos.

  • Operador/a de venta telefónica o de atención al cliente. El sector del telemarketing está en constante crecimiento, puesto que la utilización de servicios de call center reduce costes a las empresas y permite una mayor cercanía con el cliente en un momento en que su fidelización es esencial para que las ventas no decaigan. Las compañías son cada vez más conscientes del valor añadido que estas personas aportan a su plantilla, pues crean un buen clima laboral, y más humano, en medio de una profesión que se caracteriza por elevados índices de rotación e insatisfacción.

Discapacidad sensorial: un alto poder de concentración

La discapacidad sensorial conlleva principalmente deficiencias visuales o auditivas y dificulta la comunicación y el lenguaje de quienes la padecen. Por este motivo, y salvando excepciones, suelen descartarse los trabajos que requieran la atención al público personal o telefónica.

Aunque su inserción no es sencilla, especialmente en afectaciones severas, se están desarrollando múltiples adaptaciones que les permiten realizar muchos trabajos en condiciones normalizadas. La experiencia de la Fundación Adecco es que estas personas no cuentan con una elevada formación, por lo que analizaremos sólo esta situación por ser la más frecuente.

  • Discapacidad visual

Su principal valor añadido es la tenacidad. Cuando la ceguera es parcial, las personas con problemas de visión tienen posibilidades de integrarse en empresas de telemarketing. Muchas de ellas, están incorporando adaptaciones a sus programas de ordenador: magnificadores de pantalla, lupas aumentativas, conversor de textos en braile, etc, que las permiten desarrollar eficazmente el trabajo en condiciones normalizadas. En estos casos, y al igual que en otras discapacidades, son empleos adecuados el de administrativo, teleoperador o gestor de cobros.

Cuando la ceguera es muy acusada o total, resulta difícil lograr una integración laboral efectiva. Sin embargo, en los últimos años se está abriendo una nueva posibilidad para estas personas: la radio, el único medio al que las personas ciegas no tienen que adaptarse. Son muchas las emisoras que manifiestan su fascinación por los locutores invidentes, pues su imaginación es superior a la del resto de las personas y son capaces de transmitir con gran fuerza sus emociones.

  • Discapacidad auditiva

Las personas con este tipo de discapacidad tienen más posibilidades de desempeñar un puesto de trabajo de manera exitosa. Además, destacan por su alta capacidad de concentración. Según Rocío López, consultora de selección de la Fundación Adecco: “Estos trabajadores suelen encajar perfectamente en las empresas, pues suelen ser poco conflictivos y rápidos”.

Una opción muy recomendable es la de grabador de datos, pues tras un curso de mecanografía pueden alcanzar altos niveles de productividad, gracias a su capacidad de concentración.

Además, destacan otras como la de operario/a de limpieza -sobre todo en oficinas-, peón/a de producción o jardinero/a (mantenimiento y conservación de zonas ajardinadas), pues todas ellas siguen creando empleo, no requieren comunicación continua y no hay peligros derivados de su falta de audición.

Discapacidad orgánica y psíquica: empleos sin estrés

La discapacidad orgánica, también conocida como “invisible”, es aquella que afecta a los órganos internos, por lo que resulta imperceptible a los ojos ajenos. Por su parte, la discapacidad psíquica afecta a la estabilidad emocional de aquellos que la padecen, pero puede controlarse si se trata adecuadamente, hasta el punto de pasar totalmente inadvertida.

Por todo ello, ambos colectivos tienen capacidades para desempeñar cualquier tipo de trabajo y en cualquier sector. Sin embargo, desde la Fundación Adecco se recomiendan empleos poco estresantes y cuyo ritmo no sea muy elevado, pues ayudan a mantener el equilibrio físico y emocional. En general, sobre todo en el caso de la discapacidad psíquica,los trabajos de atención al cliente son poco aconsejables para las personas en esta situación.

Las perspectivas de empleo variarán en función de la formación, pero de modo genérico, enunciaremos varias profesiones que están capeando bien la crisis y en las que estas personas pueden encajar a la perfección:

  • Manipulador/a de alimentos (en cadenas de producción, líneas de envasado, etc). El sector alimentación está sobrellevando bien el trance económico, especialmente en lo que se requiere a las marcas blancas, puesto que éstas se convierten en la mejor opción para las familias que quieren reducir el gasto de la cesta de la compra. Este perfil es especialmente aconsejable para personas con discapacidad psíquica, pues favorece su capacidad de planificación y organización.
  • Mozo/a preparador de pedidos. La actividad de las plataformas de logística y transporte, y de los entornos industriales en general – sobre todo en regiones como el País Vasco- sigue generando una importante demanda de profesionales. El repunte es aún mayor ahora, en los meses previos a navidad, debido al aumento de la producción. Sus funciones son sencillas: identificar mercancías, proceder a su etiquetado y realizar la gestión de albaranes.
  • Grabador/a de datos.

    Es un trabajo repetitivo, donde apenas existen imprevistos y que requiere un corto periodo de adaptación. Por tanto, es adecuado al ritmo de aquellas personas con una salud física o psíquica delicada.

Además, para aquellos que gusten de los trabajos temporales, la navidad abre una nueva posibilidad: se demandan empaquetadores de regalos en las grandes superficies, un empleo mecánico y corto en el tiempo, por lo que no genera estrés.

Mayores de 45: empleos que transforman la edad en ventaja

Dado que el principal valor añadido de estas personas es su experiencia, la Fundación Adecco recomienda el reciclaje profesional, es decir, actualizar conocimientos y recibir formación en áreas como la informática, las nuevas tecnologías o las técnicas de marketing y ventas. El objetivo último es equiparar a los mayores de 45 años con aquellos más jóvenes en materia de formación, y de esta forma conseguir que la mayor experiencia de los primeros se convierta en un valor añadido.

La fotografía del parado mayor de 45 años que acude a la Fundación Adecco es la de una mujer española, con responsabilidades familiares, estudios elementales y procedente del sector servicios. La mayoría de ellas suele buscar trabajo después de largos periodos de inactividad. Sin embargo, también acuden hombres que suelen encontrarse en paro a causa de despidos, EREs y otros reajustes de plantilla.

Normalmente han estado mucho tiempo en una misma empresa, frecuentemente del sector industrial, y les suele costar adaptarse a los cambios.

Estos son algunos de los puestos con más futuro para las personas mayores de 45 años:

  • Operador/a de venta telefónica o de atención al cliente. Los mayores de 45 años son candidatos muy válidos para ocupar estos puestos de trabajo en auge. A menudo son sensatos y asertivos y los clientes tienden a confiar más en ellos.
  • Promotor/a (de alimentos, electrodomésticos…) Actualmente, este perfil se está demandando bastante, pues tras periodos de crisis en los que las empresas se han mostrado prudentes en el lanzamiento de nuevos productos, se buscan promotores que den a conocer sus mercancías y consigan su adquisición por parte de los consumidores. En muchos centros comerciales, el perfil que se busca es el de una persona mayor de 45 años, sobre todo mujeres, pues suelen estar familiarizadas con las tareas domésticas y ello inspira una mayor confianza a los futuros compradores.
  • Encuestado/a. Es un puesto que está adquiriendo una importante demanda, debido al interés de las empresas e instituciones por conocer la opinión de la sociedad sobre ciertos productos o acciones. Sus funciones consisten en realizar encuestas telefónicas o presenciales, registrando posteriormente las respuestas en papel o en soporte informático. En una sociedad en la que los ciudadanos se muestran reticentes a participar en sondeos de opinión telefónicos, y no suelen atender a las personas que llaman a la puerta de su casa, los mayores de 45 se convierten en una alternativa muy rentable, habida cuenta de la confianza y seguridad que transmiten.
  • Mozo/a preparador de pedidos. Es una opción laboral rentable pues no requiere una elevada formación y resulta fácil de aprender para muchos mayores de 45 años, sobre todo hombres con experiencia en el sector industrial.
  • Técnico/a de mantenimiento. Actualmente, existen muchas ofertas de empleo para este puesto, debido a que las empresas han reducido considerablemente sus gastos en renovación de maquinaria y realización de obras en sus instalaciones. Sus funciones son muy amplias y permiten a los mayores de 45 con experiencia en estas tareas, poner en valor sus conocimientos: labores de electricidad, climatización del edificio o reparación de maquinaria, son algunas de éstas.
  • Oficios.

    Su demanda es constante al margen de la desfavorable situación económica, más en un momento en el que el consumidor no puede permitirse renovar sus electrodomésticos, automóviles y demás bienes. Si el demandante de empleo tiene experiencia como mecánico/a, electricista, albañil o carpintero/a – circunstancia bastante frecuente entre muchos hombres mayores- puede optar por actualizar sus conocimientos y apostar por los oficios tradicionales como opción para abandonar las listas del INEM.

  • Monitor/a de transporte escolar. Sus funciones son, entre otras, la recogida de alumnos en las paradas correspondientes, la supervisión y control durante el trayecto y la posterior entrega en los centros escolares. En general, son muy valorables cualidades como la responsabilidad y la seriedad, todas ellas muy presentes en los mayores de 45 años. En zonas como Andalucía, este perfil cuenta con una importante demanda.

Mujeres con cargas familiares: empleos que permitan conciliar

A menudo, a la Fundación Adecco acuden mujeres con responsabilidades familiares no compartidas y que carecen de formación. Si a esta situación desfavorable añadimos que apenas cuentan con experiencia y que necesitan horarios flexibles para compatibilizar con sus cargas familiares, el abanico de salidas profesionales se reduce considerablemente.

Sin embargo, el entorno actual está abriendo nuevas posibilidades para las mujeres que se hallan en esta situación. Nuestra sociedad está asistiendo a un nuevo modelo familiar que viene marcado por la incorporación de la mujer al trabajo y el creciente envejecimiento de la población española. Tal circunstancia está incrementando el número de personas dependientes – sobre todo niños y ancianos- que carecen de un familiar que pueda responsabilizarse de ellos. De la necesidad que muchas familias tienen de acudir a “proveedores externos” para cuidar de los suyos, están surgiendo numerosos puestos de trabajo a los que puede optar cualquier mujer, si bien en muchos casos se exige un Curso de Ayuda a Domicilio valorable a partir de las 480 horas. Además, todos ellos son compatibles con sus responsabilidades familiares, debido a la flexibilidad de sus horarios.

  • Atención a las personas dependientes.

    Consiste en atender las necesidades de aquellos que no pueden valerse por sí mismos, tales como ancianos, niños o personas con discapacidad. Este oficio comprende funciones muy variadas en función de las características del dependiente: desde la administración de medicación oral a los ancianos hasta el traslado de los niños a la escuela. Las mujeres resultan ser las mejores candidatas para desempeñar estos puestos, dado que suelen contar con experiencia en el cuidado de pequeños y mayores e inspiran una mayor confianza en los familiares que van a contratarlas.

  • Cuidadoras de comedor escolar.

    Cada vez son más las familias en las que ambos progenitores trabajan fuera de casa. Es por ello que los colegios están ofertando servicios que permiten a los padres dejar a sus hijos en sus centros escolares mientras ellos trabajan. En este contexto, los comedores de escuela están viendo crecer el número de alumnos de manera vertiginosa. Ello ha ocasionado la necesidad de crear varios turnos de comida, pero también de contratar a más personas que puedan vigilar y asegurar el cumplimiento de las normas, así como velar por la correcta alimentación de los niños fuera de casa. Esta profesión está generando una importante demanda en zonas como Andalucía.

Además, podemos destacar otros empleos que ofrecen flexibilidad horaria y que no exigen elevada formación. Es el caso de algunos ya mencionados como operaria de limpieza o encuestadora.

Ex deportistas de elite, mejor preparados de lo que imaginan

Plantearse desarrollar otra profesión fuera de su ámbito, puede resultar muy complicado para los deportistas de alto rendimiento. Sin embargo, estas personas no lo tienen todo perdido, sino que cuentan con cualidades que las empresas valoran especialmente en los procesos de selección: motivación, interés, dinamismo, aptitud para el trabajo en equipo o constancia son algunas de ellas. El secreto está en saber aprovecharlas.

La Fundación Adecco viene desarrollando el Programa Deportistas desde el año 1999 para facilitar la inserción laboral de este colectivo. Diez años de experiencia en la integración de deportistas, ponen de relieve varias evidencias:

  • La mayoría de ellos no cuenta con una formación muy extensa – aunque actualmente esta situación está mejorando-
  • La práctica totalidad no quiere desvincularse del universo deportivo. Es su mundo y se sienten cómodos en él.
  • Al estar acostumbrados al trabajo en equipo, tienden a ser extrovertidos y comunicativos.

Una vez expuestas estas consideraciones, ¿qué profesiones son más adecuadas para los ex deportistas? Sin duda, aquellas que están relacionadas con el mundo del deporte: entrenador, árbitro o gestor de entidades deportivas. Esta última opción se convierte en una modalidad laboral a la que se apuntan muchos deportistas, puesto que prefieren emprender su propio negocio que acogerse a las normas laborales de cualquier compañía. Además, los valores que adquirieron durante su etapa deportiva, les convierten en emprendedores aventajados a la hora de montar su propia empresa.


Fuera del ámbito deportivo, el sector comercial es la opción con más futuro para ellos. Actualmente, la red comercial de las empresas está cobrando una importancia adicional, cuando la crisis económica impone la necesidad de incrementar las ventas. Los comerciales son los responsables de mantener, captar y ampliar la cartera de clientes, funciones que las organizaciones están demandando más que nunca. Al contar con buenas habilidades sociales y de comunicación, los deportistas resultan ser excelentes vendedores por lo que esta puede ser una buena oportunidad de empleo para aquellos que tengan vocación comercial.

Las empresas también pueden contratar autónomos con discapacidad

Recientemente se ha aprobado la Estrategia Global de Acción para el Empleo de Personas con Discapacidad, que se desarrollará entre 2008 y 2012, cuyo objetivo es promover el acceso al mercado de trabajo de un colectivo que, según cifras del Ministerio de Trabajo e Inmigración, representa el 8,6 % de la población entre 16 a 64 años, y sólo el 4,1 % del total de ocupados.

Organización de Profesionales y Autónomos recuerda que, según la Ley de Integración Social de los Minusválidos (Lismi), aquellas empresas con más de 50 trabajadores fijos, tienen la obligación de que al menos el dos por ciento sean personas con algún tipo de minusvalía. No obstante, desde OPA, se incide en que, de forma excepcional, las empresas pueden quedar exentas de esta obligación, siempre y cuando cumplan alguna de las medidas alternativas que se recogen en el Real Decreto 364/2005 de 8 de abril.

El presidente nacional de OPA, Camilo Abiétar, ha señalado que “varias de estas opciones hacen referencia a la contratación de autónomos con discapacidad, como la celebración de un contrato mercantil o civil con un Centro Especial de Empleo (CEE) o con un trabajador autónomo con discapacidad para el suministro de materias primas o maquinaria, o para la prestación de servicios ajenos y accesorios a la actividad normal de la empresa“.

OPA ha insistido en que, en la práctica diaria, numerosas empresas no cumplen con la normativa. Así, Abiétar incidió en que “los esfuerzos y los recursos que las administraciones públicas han destinado y siguen destinando a modernizar y a facilitar la accesibilidad de nada sirven sin la concienciación y sensibilización social”.

De esta manera, OPA considera urgente dar apoyo al autónomo con discapacidad, dentro de la lucha por la igualdad de oportunidades. Y, siguiendo esta línea, apuesta por el reconocimiento a la labor de las personas con discapacidad que eligen el autoempleo como salida profesional. “Es una decisión muy valiente. No debemos olvidar que tienen una tasa de desempleo bastante superior a la media y cuya duración es más larga que la del resto de la población“, añadió el presidente de la organización.

Por todo ello, la delegación de Castilla-La Mancha de OPA, con el patrocinio de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y la colaboración de COCEMFE, ha preparado la primera edición del Reconocimiento a la mejor labor Empresarial dentro de la Discapacidad en Castilla-La Mancha”, cuyo objetivo es reconocer la trayectoria, iniciativa y proyecto del profesional autónomo castellano manchego con discapacidad.

Los discapacitados, los más optimistas para encontrar empleo

Las personas con discapacidad suponen el 8,5 % del total de la población activa en España. Por este motivo, la Fundación Randstad, ha querido indagar cómo es el tejido poblacional de esta región y cuáles son sus preferencias e inquietudes a la hora de buscar un empleo. Para empezar, se ha querido conocer cuáles son las previsiones sobre el empleo de este colectivo de aquí a medio plazo. En este sentido, curiosamente, las personas con discapacidad se desmarcan del resto por su optimismo y ante la pregunta “¿Cómo te ves laboralmente dentro de tres años?” un abrumador 88 % afirma verse en un empleo mejor, un 9 % cree que se encontrará en la misma situación y sólo un 3 % considera que su estado laboral empeorará.

A priori, estos colectivos cuentan con más dificultades que otros a la hora de buscar trabajo por distintos motivos: las empresas desconocen qué empleos pueden desempeñar, dudan de que puedan desenvolverse con normalidad en su puesto de trabajo, desconocen las obligaciones legales de contratar a personas con discapacidad, etc. Esto, unido a que muchas de estas personas han tenido dificultades para finalizar su formación o para acceder un puesto de trabajo acorde a sus intereses, les hace más vulnerables a la hora de buscar empleo y por eso se incluyen en los conocidos como colectivos de difícil inserción.

Sin embargo, todas estas trabas desaparecen una vez consiguen un trabajo. De hecho, un 74 % de consultados reconoce que nunca ha sentido ningún tipo de discriminación en su puesto de trabajo, lo que equivale a decir que el empleo es una forma de integración y una vez acceden al mercado laboral esa exclusión social desaparece en la mayoría de los casos.

Perfil del buscador de empleo

Los datos recogidos por la Fundación Randstad permiten identificar un “perfil tipo”: un primer esbozo de este colectivo sería el de un hombre (56 %), de entre 30 y 40 años (38 %), con estudios de Formación Profesional (48 %) y español (97 %).

Los porcentajes se sintetizan de la siguiente manera: un 56 % de demandantes de empleo son hombres frente al 44 % de mujeres.

Por edad, los porcentajes varían desde un 6 % de jóvenes menores de 25 años; un 11 % de personas de entre 25 y 30 años; un 38 % de personas de entre 30 y 40 años; un 15 % de personas de entre 40 a 45 años y, finalmente, un 31 % que engloba el colectivo de mayores de 45 años.

Los datos de formación también permiten identificar conclusiones interesantes ya que un 48 % de consultados cuenta con estudios de Formación Profesional, un porcentaje mucho mayor que el de la media de la población total. A este porcentaje le siguen el 30 % de personas con estudios básicos, el 11 % de universitarios y el 10 % de personas con Bachillerato. Tan sólo un 2 % de consultados afirma no contar con ningún tipo de estudios. Si bien el nivel formativo es de media más bajo que el de la media nacional, existe un momento clave en el desarrollo profesional de estas personas: cuando llega el momento de acceder a la universidad muchos frenan sus posibilidades ya que no todos los estudios y centros están preparados para su incorporación.

Sin embargo, cuando se tienen que enfrentar a la búsqueda de empleo, pocos son los que consiguen un puesto de trabajo adaptado a su perfil: un 65 % de consultados reconoce que no ha trabajado en lo que ha estudiado, cifra similar a la de la media total de trabajadores (64 %).

Qué buscan en las empresas

Otra de las cuestiones que la Fundación Randstad ha querido conocer sobre sus candidatos es qué factores son los que más valoran a la hora de buscar empleo, de esta manera se puede orientar el asesoramiento laboral a sus necesidades específicas ofreciendo empresas y puestos que responden a sus inquietudes. Según el análisis de los datos, se decantan mayoritariamente por puestos de administrativos/secretariado (así lo eligen un 26 % de consultados), atención al público (23 %) y, a mayor distancia, mozos (7 %), etc.

En cuanto a las áreas en las que preferirían trabajar se reparten entre Administración (27 %), el sector Servicios (17 %), Industria (12 %), Sanidad (8 %) o Logística-transporte (8 %).

Un tema manido es que las personas con discapacidad no se adaptan a las necesidades del mercado en cuanto a horario laboral. Nada más lejos de la realidad: más de la mitad de los encuestados reconocen que buscan un empleo a jornada completa (53 %); un 36 % preferiría empleos de jornada intensiva y sólo un 11 % prefiere una jornada parcial.

Eso sí, uno de sus puntos débiles sigue siendo la movilidad geográfica: un 69 % de consultados reconoce que no cambiarían de ciudad por un trabajo, cifra contraria a la ofrecida por la media nacional donde seis de cada diez consultados estarían dispuestos a cambiar de ciudad por un empleo.

Por último, se pidió a los candidatos que valorasen en una escala de 1 a 10 los siguientes factores en un empleo: condiciones económicas, desarrollo, ambiente y competencias.

Los resultados revelan que los trabajadores dan mucha importancia a cualquiera de estos cuatro valores, con promedios que en todos los casos ascienden hasta el 8: a las condiciones económicas les otorgan un 8; a las posibilidades de desarrollo les dan de media un 8,5; a las competencias que ejecutan las valoran como un 8,5 y, por último, el ambiente es lo más valorado en el trabajo, con un 9.

Cómo buscan empleo

Cómo afrontan la búsqueda de empleo es también una herramienta que permite conocer en mayor medida a estos candidatos. En este sentido, el estudio realizado por la Fundación Randstad ha detectado que Internet se posiciona como el principal canal a la hora de intentar acceder al mercado laboral: así lo reconocen un 75 % de consultados, un porcentaje más alto que el de la media total de población activa (66 %). El segundo canal mayoritario para buscar empleo en el caso de personas con discapacidad son las Fundaciones, que representan el 15 % de las respuestas. Los medios escritos, los conocidos y familiares y otras fuentes de reclutamiento completan el 100 % restante. De hecho, otra de las cuestiones asociadas a esta pregunta ha sido si los candidatos reconocían el valor añadido de buscar trabajo a través de una entidad como la Fundación Randstad y el resultado fue abrumador: un 96 % afirmó que sí ante esta pregunta.

En cuanto al tiempo que dedican a buscar empleo, destaca que un 58 % emplea entre 1 y 3 horas al día a esta tarea. El 29 % de los consultados por la Fundación Randstad emplea más de tres horas diarias a buscar trabajo y el 13 % restante intenta encontrar un empleo durante una hora o menos.

La integración laboral de los discapacitados: una asignatura pendiente

El 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, fecha que tiene como objetivo sensibilizar a la opinión pública sobre las cuestiones relacionadas con la discapacidad y movilizar el apoyo a la dignidad, los derechos y el bienestar de las personas con cualquier tipo de discapacidad. En España hay 3,5 millones de discapacitados, y en una de cada cuatro familias uno de sus miembros tiene alguna discapacidad.

Estudios recientes muestran que la Ley Social de Integración de Minusválidos (LISMI), que obliga a las empresas con más de 50 trabajadores a que el 2 % de sus plantillas estén formadas por trabajadores con discapacidad, aún se incumple en numerosas empresas. Un elevado número de empresas desconocen la existencia de la Lismi, y muchas otras la aplican sólo parcialmente, sin llegar a contratar al mínimo de discapacitados que ordena la Ley.

Actualmente, hay en Europa más de 50 millones de discapacitados, y en España la cifra es de unos 3,5 millones, lo que supone que en una de cada cuatro familias uno de sus miembros tiene alguna discapacidad, según datos del estudio Discapacitados y Empresas: Un Análisis de la Productividad, promovido por la Fundación MAPFRE. De estas, el 40 % se encuentran en edad laboral (lo que supone 1,4 millones), pero un millón de esas personas (2 de cada 3) están fuera del mercado laboral.

Carlo Umberto Bonomi, Presidente de Invest for children, comenta que “el trabajo es un paso fundamental para la integración social, aún más para las personas con discapacidad. Resulta fundamental que la sociedad sea flexible a la hora de integrar. Además, es muy importante que las empresas tanto públicas como privadas fomenten dicha práctica y sean conscientes de que se trata de una situación en la que todos ganan“.

Coincidiendo con el Día Mundial de las Personas con Discapacidad, desde Invest for children se hace hincapié en que, pese a los avances logrados en los últimos años, aún es necesario mejorar e intensificar las labores de integración. El lema de la Fundación, “entendemos la discapacidad y trabajamos por la integración” se dirige en este día tanto a la Administración Pública como a las empresas y a la propia sociedad civil.

Invest for children trabaja en numerosos proyectos en esta línea. El más reciente ha consistido en donar diez planes de pensiones a trabajadores con Síndrome de Dowm a través de Caja Navarra. Esta iniciativa, única en España, pretende fomentar la creación de productos financieros adaptados a personas con discapacidad. Estos empleados, debido a su incapacidad, en principio trabajan solo media jornada, lo que les supone recibir unas pensiones mínimas cuando llega su jubilación. El proyecto, además de contar con el respaldo de Caja Navarra, se ha realizado junto a la Fundación Projecte Aura, que se constituyó hace más de 20 años para defender los intereses de personas con discapacidad, ofreciéndoles un programa de inserción laboral y otros de formación continuada, aprendizaje y vida independiente.

Invest for children ha trabajado también con Icària Iniciatives Socials (www.icaria.biz), a la que ha apoyado en su plan de comunicación para promocionar el albergue INOUT Hostel (www.inouthostel.com), donde el 90 % de los puestos de trabajo son ocupados por jóvenes discapacitados.

Para el Hospital Sant Joan de Déu, Invest for children ha contratado a un becario para que analice, en la UCI, los beneficios que aporta a los niños la instalación en nuevo equipo de respiración asistida. También en el sector hospitalario, y por mediación de la Fundación Alex (Fundacion Alex), Invest for children ha contratado a un trabajador con discapacidad intelectual que desarrolla satisfactoriamente actividades laborales en Hospitales USP.

AVANCES, PERO INSUFICIENTES

Por su parte, el sindicato UGT defiende la integración laboral de las personas con discapacidad a través del acceso al empleo ordinario, y para ello considera que es necesario impulsar el cumplimiento efectivo de las cuotas de reserva de puestos de trabajo, y la lucha contra la discriminación como elementos imprescindibles para hacer realidad el principio de igualdad de oportunidades de estos trabajadores.

En el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, UGT destaca el impulso que se ha dado a la inserción sociolaboral de estas personas tras la aprobación de la Estrategia Global para 2008- 2012, que materializa una política acorde con las posición del sindicato en este tema.



WhatsApp Casacochecurro