Los timos más comunes de la crisis, desde el billete premiado de lotería al ‘nazareno’ o las estafas por Internet

Cómo evitar estafas a través de Internet
NOTICIA de Javi Navarro
30.09.2010 - 17:48h    Actualizado 13.03.2023 - 11:36h

Recientemente se han detenido por el timo de los billetes tintados a tres personas cuando intentaban estafar a una mujer en Tres Cantos (Madrid) con el ‘timo del nigeriano’ o ‘timo de los billetes falsos’. Los estafadores hicieron creer a sus víctimas que eran grandes empresarios cameruneses que, por los problemas de su país, se habían visto obligados a tintar los billetes para pasar la aduana. Luego, aseguraban, mediante un proceso químico, podrían recuperarlos convirtiéndose en billetes de curso legal. Obviamente, todo era un timo. Recordamos a continuación otros timos también comunes, como el timo de la Lotería por Internet.


Sorteo lotería de Navidad 22 diciembre 2024

¿Qué número es el Gordo? Buscador de números premiados para comprobar los décimos de la Lotería de Navidad.

Comprobar Lotería de Navidad 2024


Trileros

La estafa consiste en incitar al público a participar, mediante apuestas de dinero, en juegos de habilidad que, aparentemente, permite grandes posibilidades para el que participa y que se ofrecen en plena vía pública, sobre una pequeña mesa. El juego más utilizado consiste en descubrir en qué lugar se esconde una bolita que es tapada por una chapa o vaso. Para que el juego parezca más fácil, en torno a la persona que mueve las chapas o los vasos (el que dirige el juego), hay uno o varios “falsos jugadores” (ganchos), los cuales ganan dinero fácilmente de acuerdo con la persona que mueve las chapas. Al principio, se deja ganar a la persona que inicia el juego, para que, animado por el éxito, juegue una cantidad importante. La mano es más rápida que la vista, por lo que cuando la cantidad es importante, la víctima pierde irremisiblemente su dinero. Es frecuente en ferias y mercadillos.

El Tocomocho

El timo de la lotería. La estafa suele desarrollarse en lugares de tránsito (estaciones, cajeros, etc.) mediante una persona que abordando a la víctima manifiesta tener un billete de lotería premiado y que por las prisas no puede cobrar. Pide a la víctima desesperadamente que le abone la cantidad del premio o, incluso, menos, puesto que debido al viaje que tienen que hacer no puede cobrar. Para dar mayor credibilidad interrumpe otro aparente transeúnte (gancho) que suele afirmar la autenticidad del premio exhibiendo un listado de boletos premiados en un periódico. La víctima accede a aportar la cantidad del dinero premiado y cuando va a recuperarlo a la ventanilla de la lotería comprueba que el billete es falso.

La Estampita

La víctima (el ciudadano) es abordado por una persona que aparenta tener cierta discapacidad intelectual (estafador 1). Ésta le enseña una bolsa que parece estar llena de billetes, incluso pueden verse algunos. El estafador 1 no da ninguna importancia a lo que lleva diciéndole a la víctima que en la bolsa lleva “estampitas” o “cromos” y que en casa tiene muchos más. En ese momento interrumpe otro aparente ciudadano [estafador que hace de gancho (estafador 2)], el cual ofrece a la víctima la posibilidad de engañar al estafador 1 comprándole la bolsa por una cantidad de dinero. Sin embargo, el gancho, dice no tener dinero para participar en la “compra” de la bolsa. No obstante anima a la víctima a realizar la compra dados los grandes beneficios que le va a reportar el “engaño” al estafador 1. Incluso, el gancho se ofrece para acompañar a la víctima a buscar dinero, al objeto de que no tenga ningún contratiempo. Una vez que la víctima materializa la “compra” entregando el dinero por la bolsa desaparecen los dos estafadores. Cuando la víctima abre la bolsa comprueba que no contiene billetes sino tacos de recortes de papel.

El Nazareno

Las víctimas de la estafa son empresas que suministran mercancías. Los estafadores se instalan en un lugar alquilando un almacén a nombre de una empresa. Empiezan a realizar pequeños pedidos, que se guardan en el almacén y que son abonados en el acto a las empresas suministradoras. De esta manera los estafadores se ganan la confianza de las víctimas. Seguidamente realizan grandes pedidos de mercancías, diciéndole a los suministradores que los pagos los van a realizar en varios plazos. Incluso, pueden llegar a cumplir el primero de dichos pagos. De forma repentina, la empresa desaparece de lugar, llevándose la mercancía y dejando pendiente de abonar las deudas contraídas. Cuando las empresas de suministros estafadas quieren hacer gestiones para ejecutar el cobro comprueban que la empresa que les hizo los pedidos no existe.

El Instalador

Los estafadores se personan en el domicilio de la víctima. Van vestidos con mono de trabajo. Se presentan diciendo que son trabajadores de la empresa instaladora del gas y que vienen a realizar una revisión de la instalación. Aparentan realizar varios trabajos técnicos; normalmente, se limitan a cambiar un trozo de manguera del gas. Finalizado el trabajo extienden una factura. Cuando la víctima comenta el caso con otras personas comprueba que ha sido estafada por falsos instaladores.

El Desahuciado

Suele cometerse mediante la visita al domicilio de la víctima. El estafador se hace pasar por una persona que se encuentra en graves apuros económicos, con graves problemas familiares; si es mujer dirá que ha sido abandonada, que tiene muchos hijos, etc. En todo caso trata de afectar la sensibilidad de la víctima. Al final, el estafador explica que para poder subsistir está procediendo a liquidar sus objetos más preciados. En ese momento exhibe un objeto personal (reloj de pulsera de una marca muy cara, collar, sortija, etc.) diciendo que es una joya preciosa, muy valiosa. Ofrece el objeto a cambio de un precio muy bajo en comparación a lo que dice que vale. Cuando la víctima accede a la compra del objeto comprueba que es una baratija.

Estafas por Internet

Nuevos Modus-operandi de estafa en la compra de vehículos por INTERNET. Se viene observando en diversas páginas de Internet dedicadas a la venta de vehículos entre particulares dos nuevos sistemas de estafa:

El primero consiste en que una persona de otro país se muestra interesada por uno de los coches anunciados, pero no para él sino para un conocido suyo. El caso es que esa tercera persona estaría dispuesta a pagar una cantidad de dinero muy superior a la solicitada por el vendedor, así que el presunto estafador libra un cheque al propietario del vehículo por la cantidad de dinero ofrecida por su conocido y lo que tiene que hacer el vendedor al recibirlo es efectuar un giro postal o transferencia -a través de Western Union- por la cantidad de dinero de la diferencia (quizá salvo una posible compensación por la molestia).

El vendedor del vehículo recibe el cheque y al llevarlo a su banco, éste lo recoge (es un cheque auténtico, no hay por qué sospechar), por lo que acto seguido hace la transferencia por el importe acordado. Después de un corto espacio de tiempo se le avisa de la entidad bancaria de que la cuenta consignada en el cheque no tiene fondos o no existe, por lo que por una parte no dispone del dinero apalabrado y por otra ya ha perdido la cantidad transferida. El vehículo no cambia de manos en ningún momento.

En el segundo método es el comprador el que resulta estafado. El presunto vendedor dice que no le importa mandar el vehículo a la residencia del comprador, pero que a cambio solo quiere saber si éste tiene realmente el dinero y que no se trata de un engaño, así que le solicita que haga una transferencia por Western Union, pero poniendo como beneficiario un nombre ficticio, así el estafador podría ver en la página web de esta empresa que realmente se ha hecho el pago, aunque no pueda acceder al dinero. Una vez visto esto le mandaría el vehículo en un plazo de 2 ó 3 días. La estafa consiste en que el comprador mediante un documento adecuadamente falsificado -dispone de varios días para confeccionarlo- cobraría el dinero sin enviar vehículo alguno.

Cómo evitar estafas a través de Internet

Los portales de compras online pueden tener una apariencia muy segura, sin embargo, no todos los que ofrecen gangas, regalos perfectos o tarjetas electrónicas son fiables. Los cibercriminales aprovechan las festividades para crear tiendas falsas y engañar a los usuarios y hacerse con sus números de la tarjeta de crédito, contraseñas, IDs o cuentas bancarias.

Con el objetivo de poner freno a las estafas o delitos de suplantación de identidad a través de la red, la empresa proveedora de soluciones de seguridad para Internet Bitdefender ofrece una serie de consejos que aumentarán nuestra seguridad en este tipo de transacciones online.

· Prestar atención cuando se introducen datos críticos en Internet: Es conveniente que dichos datos se mantengan bajo un mínimo de seguridad, asegurándose de que la dirección web en la que se encuentra es la que tiene la intención de visitar y en la que quiere comprar. Busque siempre un sello de seguridad junto a la dirección del sitio web, puesto que es una garantía de que el sitio web en el que se encuentra es el verdadero.

· Si utiliza Internet desde el móvil, escriba manualmente la dirección URL del sitio de destino. La pantalla del móvil, al ser más pequeña, impide muchas veces ver la URL de una página completamente, lo que hace que muchas veces se pueda estar en una página falsa con una URL parecida a la de la página real sin darse cuenta.

· Ser precavidos a la hora de introducir los datos de tarjetas de crédito, de ID de la cuenta bancaria o contraseña. Compruebe la dirección URL para asegurarse de que está en el sitio Web correcto al hacer sus adquisiciones.

· Evitar la descarga de cualquier contenido (formularios, tarjetas electrónicas, archivos) o hacer clic en enlaces salvo que se confíe en el origen de esos materiales. Las tarjetas de felicitación u archivos ejecutables pueden ser documentos infectados de virus, por lo que es preferible rechazar su descarga. Si realmente tienes que abrir este tipo de archivos adjuntos, es recomendable descargar una copia local y escanearla con un antivirus actualizado antes de abrirla.

· No revisar cuentas bancarias de manera electrónica o hacer cualquier pago desde ordenadores públicos conectados a Internet o desde un punto de acceso público. Sus datos críticos pueden ser interceptados por otros usuarios a menos que la conexión esté cifrada.

· Asegurarse de mantener el sistema operativo y la solución antivirus actualizados para no dar a los ciber-delincuentes ninguna oportunidad de hacerse con su dinero.

· Prestar mucha atención a sitios web falsos que se hacen pasar por tiendas online, que permiten comprar regalos y hacer el pago de los mismos sin enviar las ordenes al banco. Los softwares antivirus que incorporan módulos de lucha contra el fraude bloquean automáticamente estos sitios manteniendo protegido sus datos.

· Webs de búsqueda de pareja: Vigilar este tipo de páginas, pues son foco de estafas notorias como la de las novias rusas. También inspiran poca confianza aquellos servicios de citas online publicitados a través de correos basura y que probablemente le dejarán con el corazón roto y un par de miles de euros de deuda.

Guía para evitar las estafas en internet

Las rebajas son un cebo para los ciberdelincuentes que esperan agazapados a que hagamos nuestros clicks en páginas repletas de ofertas falsas ¿Cuál es la solución? Pues hay varios trucos, en opinión de muchos expertos, aunque todos recomiendan cautela y atención en los sitios en los que realizamos nuestras compras.

Las navidades y las épocas de rebajas son la época en la temporada alta para los ciberdelincuentes. Al menos, así lo aseguran en Bitdefender. Para poner freno a sus ansias delictivas la compañía ha elaborado una lista de consejos para ayudar a los usuarios a comprar de manera segura en la red.

Estos expertos describen cómo se producen los ciberdelitos. Catalin Cosoi, Responsable de Amenazas Online de laboratorio de Bitdefender, explica que “por lo general, los ciberdelincuentes crean identidades y marcas falsas destinadas a engañar a los usuarios crédulos para que faciliten datos sensibles en sitios Web falsos – a saber, números de tarjetas de crédito, PINs, etc -, o exponiendo sus equipos al ataque de algún tipo de malware” .

Para evitar caer en sus redes es importante

1- Tener cuidado con las pantallas pequeñas en los dispositivos móviles: La pantalla más pequeña de los dispositivos móviles hace que sea difícil ver una dirección URL completa. Un enlace puede comenzar con el nombre de la tienda legítima, pero en realidad redireccionar a un sitio malicioso

2- Evitar los mensajes de desconocidos en las redes sociales: No hay que hacer clic en enlaces no solicitados que lleguen a través redes sociales. Los medios sociales no son diferentes de las bandejas de entrada del correo electrónico.

3- Lo mejor es investigar: Hay que tener cuidado con las promociones sorprendentes o que prometen fantásticos regalos. Si es demasiado bueno para ser verdad, seguramente es que no es verdad
4- – Evitar las compras mientras se navegue en una red Wi-fi pública: El hecho de que sean públicas significa que un hacker podría fácilmente robar información como nombres de usuario, contraseñas y números de tarjetas de crédito.

Los delitos de estafa por Internet crecen ante el aumento del paro

Dinero rápido que puede llevar a cometer un delito… Esto es lo que está pasando a un gran número de parados en situación límite o con una retribución salarial precaria, que llegan a aceptar un negocio a priori muy rentable y que suele conocerse a través de una atractiva oferta en correos electrónicos. La gran oportunidad se anuncia como una gestión sencilla: recibir un importe de dinero en tu cuenta y transferirlo inmediatamente a otra, deduciendo entre un 5 y un 10 % de beneficio directo. Es el SCAM.

La situación económica actual y la desesperación de muchas familias facilitan la aceptación de estas ofertas de trabajo que, frecuentemente, se llegan a disfrazar con cierta parafernalia de legalidad como contratos o sueldos mensuales. Detrás de estas ofertas de trabajo hay una eficiente técnica de estafa por Internet denominada SCAM (timo en inglés).

Según datos del Instituto nacional de Estadística (www.ine.es) en los últimos 3 meses del 2009 accedieron a Internet un total de 2.308.107 personas en situación de paro y 4.150.443 personas en situación de inactividad laboral (estudiantes, labores del hogar y pensionistas). De los más de 20 millones de personas que accedieron en este periodo a Internet, hay un total de 1.889.722 que perciben unos ingresos inferiores a los 1.100 € mensuales.

Las mafias organizadas aprovechan esta necesidad social y su propio conocimiento sobre nuevas tecnologías para cometer estafas por Internet que difícilmente pueden seguirse fuera de nuestro territorio nacional, donde debe recurrirse a organismos como Interpol o a Comisiones Rogatorias Internacionales para poder seguir el rastro al dinero estafado.

El Gabinete Profesional de Peritos Judiciales (https://www.peritos-judiciales.com/), compañía especializada en la realización de informes de criminalística orientados a documentar estas prácticas pero también a la defensa de los afectados, ha analizado la metodología utilizada para la comisión de este tipo de delitos y el grado de implicación de los intervinientes para que se concrete su responsabilidad penal.

Con un buen dominio de los recursos que ofrece Internet, el procedimiento de la estafa es relativamente sencillo y rápido. Se necesita:

· Un estafado: en primer lugar necesitan de él las claves de acceso a su cuenta bancaria. Pese a la ingente información sobre estas técnicas, muchas veces el estafado suele proporcionarlas voluntariamente sin ser consciente, ingresándolas en supuestos correos electrónicos de su propio banco que irónicamente solicitan su confirmación por motivos de seguridad. Son las denominadas técnicas de phishing.

· Un intermediario no voluntario: utilizan su ordenador sin que él conozca su uso. Mediante software malicioso (troyanos) han tomado control de su equipo y, de forma oculta, realizan una transferencia desde la cuenta del estafado, a la que han accedido con su nombre de usuario y contraseña, hasta la cuenta de un intermediario voluntario.

Estos ordenadores son denominados en el ámbito informático como “zombis” por su analogía con los legendarios muertos vivientes esclavizados.

· Un intermediario voluntario: ha sido captado con una gran oferta de empleo como se ha comentado. Al margen de su conocimiento o no de la legalidad de la transferencia, debe retirar el dinero de su cuenta y, tras quedarse su comisión, tiene indicaciones para transferirlo a una cuenta internacional a través de servicios proporcionados por entidades no bancarias de envío de dinero a países extranjeros.

En ocasiones, para dificultar la labor policial, suelen utilizarse diferentes intermediarios, voluntarios o no voluntarios, para cambiar el dinero de una cuenta a otra y dificultar su seguimiento.

· Un beneficiario principal: recibe el dinero en su cuenta, habitualmente, en algún país del este de Europa y es el que mayor beneficio obtiene de la estafa.

En la mayoría de ocasiones no han pasado más de 5 horas desde la retirada del dinero al estafado de su cuenta hasta su transferencia última al beneficiario.

Timo ScamEn este escenario, los mayores afectados son el estafado y los intermediarios no voluntarios. Estos últimos además se ven inmersos, sin tener ningún conocimiento del delito ni de su modus operandi, en una acusación por estafa que puede llevar a su detención y al registro de sus domicilios para obtener evidencias informáticas de su intervención.

En estos casos concretos es importante determinar la importancia del desconocimiento del afectado, puesto que puede marcar la diferencia entre su condena penal (entre seis meses y tres años según el Código Penal) o su absolución.

El Gabinete Profesional de Peritos Judiciales cuenta con expertos informáticos que se encargan de analizar cada evidencia y documentar si realmente existe participación activa de los diferentes intermediarios, permitiendo una posibilidad de defensa cuando no existe conocimiento de la utilización del propio ordenador. El afectado se ve obligado, en muchos casos, a demostrar su inocencia mediante un informe pericial externo que puede suponer un gasto superior a los 2.000 €.

Los intermediarios voluntarios, por el contrario, suelen ser conscientes de que están participando en una actividad cuando menos sospechosa, considerando que están obteniendo un beneficio económico directo por una gestión que en condiciones normales corresponde explotar a los agentes expertos en mercados financieros.

El Gabinete ha detectado en su entidad un incremento del 18 % en el año 2009, en relación al año anterior, de solicitudes de intermediarios no voluntarios para la defensa ante esta implicación no consciente en el delito de estafa.

Para Manel Cruz, Gerente del Gabinete Profesional de Peritos Judiciales, “la situación laboral actual favorece especialmente la participación en este tipo de delitos, con o sin el conocimiento sobre la ilegalidad. Corresponde a los profesionales relacionados con la justicia que puedan probarse los diferentes tipos de intermediarios y, consecuentemente, la voluntariedad o desconocimiento de los implicados ante una posible responsabilidad penal”.



WhatsApp Casacochecurro