Los mercadillos navideños de Barcelona que no puedes perderte
Visitar un mercado navideño es uno de los mejores planes que hacer durante el último mes del año. Ya sea cualquier fin de semana, un día festivo o en el puente de diciembre. ¿Pero, cuál de todos visitar? En España se celebran una gran cantidad de mercados de Navidad con mucho encanto que merecen una visita.
Los más famosos que se celebran son los mercadillos navideños de Madrid junto con los de la ciudad condal. Para que puedas elegir entre los más populares, en esta guía puedes consultar cuáles son los mejores mercadillos navideños de Barcelona que merecen una visita.
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Mercadillo de Santa Lucía en Barcelona
El mercadillo, también conocido como Fira de Santa Llúcia, es uno de los más emblemáticos de la ciudad condal en estas fechas tan señaladas. Tiene lugar en la Plaza de la Catedral y puede visitarse desde las 10:00 de la mañana hasta las 21:00 de la noche. En cuanto a las fechas, los puestos abren sus puertas siempre antes del día 13 de diciembre y se mantiene durante la Navidad.
Es el mercadillo navideño más tradicional de Barcelona. Sus orígenes se remontan al año 1786 y en los puestos que se instalan es posible encontrar una infinidad de productos de artesanía y elementos típicos de la Navidad.
Además, es uno de los más grandes de toda la ciudad. Las instalaciones albergan más de 200 puestos que llenan el Pla de la Seu y la avenida de la Catedral. De manera general, hay cuatro sectores de puestos diferenciados:
- El de pesebres y figuras
- Sección verde y de vegetación
- Sector de artesanía y complementos, así como ropa y joyería
- Sector musical
Al igual que otros mercadillos, en los diferentes puestos podrás encontrar belenes y figuras con motivos navideños, musgo, corcho y ramitos de la suerte, además de árboles naturales y artificiales. Sin olvidarnos de la zona de artesanía y de la música, donde las zambombas son las grandes protagonistas.
Además de los puestos, destacan los árboles iluminados que se han instalado por los distintos puntos del mercadillo. Y las distintas actividades que realizan para los más pequeños.
La Feria de Navidad de la Sagrada Familia es otro de los mercadillos más populares de la ciudad condal. Es un evento de gran tradición, que lleva celebrándose desde el año 1962 a los pies de esta majestuosa catedral. Es un mercadillo navideño que abre sus puertas a finales del mes de noviembre y que puede visitarse hasta el final de año.
En las instalaciones es posible encontrar numerosos puestos que llenan la plaza con una amplia variedad de productos. Árboles de Navidad y otras plantas, la zona donde comprar elementos y figuras para el pesebre, así como otras tradicionales catalanas, como el caganer, puestos especializados en decoración de Navidad y otros de comida. Desde golosinas hasta productos artesanales. Sin olvidar la zona de regalos, una de las más concurridas, con puestos donde venden productos artesanales, bisutería y hasta ropa.
Los puestos abren esta edición el día 25 de noviembre, sábado, y va a permanecer abierto hasta el 23 del mes de diciembre, jornada previa a la celebración de Nochebuena. El horario de visita es desde las 10 de la mañana hasta las 21:00 horas de la noche en días laborables. Los fines de semana y vísperas de festivo el cierre se extiende hasta las 22:00 horas de la noche.
Feria de Reyes por Santo Tomás
Esta es otra de las ferias y mercados navideños que pueden visitarse en Barcelona. En concreto, desde finales del mes de diciembre y hasta el día de Reyes, la Gran Vía de les Corts Catalanes se llena de puestos para celebrar la Feria de Santo Tomás y Reyes. Es un mercado con gran tradición, cuyos orígenes se remontan hasta el año 1877.
Este mercado abre sus puertas el día 21 de diciembre y puede visitarse hasta pasada la festividad del Día de Reyes. En estas fechas, todos los puestos se distribuyen entre las calles de Muntaner y de Calàbria en diferentes sectores y dos largas hileras. ¿Qué encontrarás en ellos? Un poco de todo.
Desde productos de bisutería y decoración, hasta ropa, cerámica y un sinfín de productos gastronómicos, como golosinas y preparados artesanales. Juguetes, regalos y muchos objetos relacionados con la Navidad.
Aunque sin duda uno de los grandes atractivos de esta feria es la posibilidad de disfrutar del chocolate con churros que se prepara en el mercado.