Los errores que nunca hay que cometer al hacer una transferencia internacional

Las transferencias internacionales sirven para enviar dinero desde España a cualquier otro país extranjero. Aunque dependiendo de la ubicación de la cuenta bancaria de destino, el proceso, tiempo y gastos asociados, varían. Por ello, a la hora de realizar este tipo de operaciones, hay varios aspectos a tener en cuenta. De ello, dependerá que la operación sea más o menos rentable.

De forma paralela, antes de pulsar el botón de enviar, hay que recordar que todas las transferencias son irrevocables, sean internacionales o no. Por ello, es crucial asegurarse de que toda la información introducida es correcta para evitar quebraderos de cabeza. Para evitar que esta sencilla operación salga mal o suponga un coste asociado demasiado elevado para cualquiera de las partes, hay una serie de errores y fallos que suelen cometerse al hacer este tipo de transferencias y que hay que evitar. A continuación puedes consultar cuáles son.

Saber a qué país hay que hacer la transferencia para ahorrar costes

Uno de los primeros aspectos a tener en cuenta a la hora de hacer una transferencia bancaria internacional es conocer el país de destino al que pertenece la cuenta donde va a depositarse el dinero. Porque dependiendo de donde se encuentre, así como del importe del envío de dinero y la moneda objeto del envío, tanto el tiempo que tarda en hacerse la transferencia, como los costes asociados a la operación varían.

De manera general, hay que distinguir entre dos tipos de transferencias bancarias:

• Por un lado, las que se efectúan dentro de la zona SEPA, que son las que se realizan dentro de países pertenecientes a la Unión Europea. Aunque, de manera adicional, también se incluyen dentro de esta categoría los envíos de dinero a los siguientes países:

1. Islandia
2. Liechtenstein
3. Mónaco
4. Noruega
5. Suiza

Este tipo de transferencias tienen las mismas condiciones que las que se efectúan en territorio nacional. No requieren cambio de divisa y las comisiones que se cobran son las mismas que en las nacionales.

• Por otro lado, se encuentran las transferencias internacionales fuera de SEPA, es decir, a otro país distinto a los anteriormente mencionados. Son, por ejemplo, transferencias entre España y Estados Unidos. Esta operación tiene condiciones distintas a las anteriores, sobre todo en cuanto al cobro de comisiones, porque son más elevadas.

Cuidado con el cambio de divisas

Además, en este tipo de movimientos fuera de SEPA influye un factor adicional que hay que tener en cuenta y es el cambio de divisa, para evitar que el importe enviado se devalúe en exceso. Para efectuar este tipo de transferencias, los bancos utilizan la red de código SWIFT.

¿Código SWIFT o IBAN? Lo que se necesita para hacer una transferencia internacional

Los datos que se necesitan para hacer la transferencia internacional varían en función del país de destino. Y este es un aspecto fundamental a tener en cuenta para hacer la operación de forma rápida y sin errores durante el procedimiento. Para ello, es necesario reunir la siguiente información:

• Nombre completo del destinatario y la dirección. Cuantos más datos se posean de la persona receptora del dinero, mejor.
• En el caso de una transferencia bancaria SEPA, el IBAN o número de cuenta bancaria de destino, que es mediante el cual se efectuará el envío de dinero.
• Ante las transferencias internacionales fuera de SEPA, es necesario el código SWIFT o BIC.
• También hay que especificar cuál es el importe y divisa del envío de dinero.

Quién paga las comisiones de las transferencias internacionales

Depende de la cantidad de dinero, país de destino y plazo en el que quiera enviarse, las comisiones asociadas a esta operación varían. De manera general, las que más cuestan son las que requieren cambio de divisa, por lo que son las que hay que evitar en la medida de lo posible para que la operación no suponga un sobrecoste elevado.

Por otra parte, los gastos relativos a las transferencias SEPA suelen ser repartidos entre el ordenante y el beneficiario; tal y como explica el Banco de España. De tal manera que, el banco en el que se ordena la transferencia cobra una parte de los gastos y el banco del beneficiario cobra los suyos.

Situación que difiere en las transferencias fuera de SEPA, donde los gastos pueden ser compartidos o no. Y este es un dato fundamental para evitar sustos innecesarios en la cuenta tras hacer el envío de dinero, dado que si los costes asociados recaen exclusivamente sobre el ordenante, puede que la operación no resulte nada rentable.

Plazo del envío de dinero y diferencias horarias entre países

Para evitar problemas, este es otro dato a tener en cuenta. Porque el tiempo que tarda una transferencia en llegar al país de destino en caso de ser internacional varía en función al tipo de movimiento:

• Si es una transferencia SEPA, llega el mismo día o al siguiente día hábil.
• Si es fuera de SEPA, puede demorarse entre 1 y 5 días. Y ojo, porque a este plazo hay que sumarle las posibles diferencias horarias entre el país de origen y de destino. Para evitar imprevistos, es crucial tener este dato en cuenta, sobre todo, si el envío de dinero debe estar en su destino en un plazo determinado.

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