Los 13 restaurantes centenarios de Madrid cumplen un año

La Asociación de Restaurantes Centenarios de Madrid, formada por 13 restaurantes de la región que cuentan con más de 100 años de vida, sobreviviendo a guerras, modas, crisis y cambios sociales, acaba de celebrar recientemente su primer aniversario. Los restaurantes de los que damos cuenta a continuación, además de llevar en activo más de 100 años, deben haber permanecido en el mismo local desde su fundación, que haya pertenecido a la misma familia y que no haya cambiado de nombre en los últimos 100 años; y que no haya cesado su actividad más de un 10 % de su vida.

Además, todos ellos cuentan con un vino de la casa común: se trata de un caldo de la Denominación de Origen ‘Vinos de Madrid’, cuya elección se realizó en una cata a ciegas en la que colaboraron la Cámara de Comercio, La Viña (Asociación Empresarial de Hostelería de la Comunidad de Madrid) y el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de Madrid, entre otros.

Trece establecimientos de tradición y leyenda
Cada uno de estos restaurantes con solera tiene su propia historia y despiertan el interés de los turistas y de los propios madrileños no sólo por sus especialidades gastronómicas sino también por ser establecimientos en los que se respira tradición y leyenda.

Casa Ciriaco, fundada en 1887, está ubicada en la céntrica calle Mayor de la capital. Es famosa por servir un plato con más de 100 años de tradición: la gallina en pepitoria. En sus mesas comió frecuentemente el famoso periodista y escritor Julio Camba.

Casa Pedro, en el antiguo pueblo de Fuencarral, abrió sus puertas en 1702 y cuenta entre sus especialidades con exquisitos asados en horno de leña. Desde 1894, el restaurante Los Galayos combina platos modernos con cocina tradicional castellana desde la Plaza Mayor. Próximo a este establecimiento está el restaurante Botín, el más antiguo del mundo, que sirve desde 1725 los mejores asados de cordero y cochinillo. En La Bola preparan desde 1870 el cocido en puchero de barro individual hecho al fuego lento en carbón de encina. Fundado en 1839 y situado en la Carrera de San Jerónimo, Lhardy, fue el primero restaurante de lujo de la capital.

Malacatín deleita paladares con su delicioso cocido desde 1895 en un establecimiento decorado con carteles taurinos únicos en el barrio madrileño de La Latina. En 1860 se inauguró Casa Labra, cuyas croquetas de bacalao siguen siendo tan famosas como entonces. En los comedores de este local, muy cerca de la Puerta del Sol, se fundó clandestinamente el PSOE en 1879. La Casa del Abuelo, fundada en 1906, es una taberna tradicional que ha ido enseñando a miles de madrileños y turistas la cultura de la tapa a base de las mejores gambas y langostinos y el mejor vino dulce de Madrid. Casa Alberto nació en 1882 y se ubica en el mismo edificio donde vivió Cervantes durante un tiempo, en la calle Huertas.

Entre sus especialidades está el rabo de toro o las manitas de cordero.

La Bodega de la Ardosa, fundada en 1892, tiene el grifo Guiness más antiguo y es reconocida como la mejor cervecería Pilsner de España. El Café Gijón, que abrió sus puertas en mayo de 1888 en el céntrico Paseo de Recoletos de la capital, ha albergado largas tertulias de intelectuales desde la posguerra hasta el presente, y debates culturales, artísticos y literarios. La Taberna Oliveros comenzó su actividad en 1857 y está conservada tal como era entonces. Destacan sus azulejos en relieve y su portada de típica taberna madrileña de finales del siglo XIX.

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