Lo que gastamos al año en productos envasados, 2.300 euros y cada vez más
Los españoles vigilamos cada vez lo que gastamos y, a pesar de los anuncios de recuperación económica, estos anuncios parecen que no se han trasladado todavía al bolsillo de los consumidores. De hecho, en 2013, cada hogar consumió unos 2.318 euros de media en productos envasados de gran consumo, un euro menos que en 2012. ¿Motivos? Actitud de ahorro para controlar el gasto, lo que se traduce en aumentar el número de veces que se acude al establecimiento y, en la medida que se acude más veces, también se realizan compras de menor importe. En total, fuimos a comprar unas 150 veces al año y gastamos una media de 15 euros visita. Parece que la recuperación todavía no llega.
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Así, el súper de toda la vida al lado de casa gana al híper por su proximidad. Y es que esta actitud frente al ahorro con más visitas a la tienda y de menor importe impulsa a los supermercados, que ganan terreno frente a hipermercados. Prueba de ello es la apertura de nuevos establecimientos puesto que los supermercados de barrio concentran el 72 % del gasto de los hogares, con una media de gasto de 1.419 euros. Por su parte, los hipermercados acaparan el 16 % del gasto de los consumidores.
Esta radiografía del informe de Nielsen sobre las tendencias de consumo dentro y fuera del hogar y preferencias de compra de los españoles incluye los productos de gran consumo, como alimentación, bebidas, droguería o perfumería… Entre las principales conclusiones destaca que el 76 % de los ciudadanos está al tanto de promociones y ofertas semanales a través de la publicidad buzoneada y un 28 % realiza compras online.
Marcas blancas al poder
El informe también recoge que la marca de la distribución, las marcas blancas, siguen avanzando alcanzando el 38 % de los productos, siendo mayor el porcentaje en supermercados (46 %) y menor en los hipermercados (22 %).
Relación calidad-precio
Los precios son un factor clave para el comprador español. El 67 % de los españoles reconoce ser plenamente consciente de cuánto cuesta lo que compra y el 81 % cree que los precios suben. Uno de cada cuatro consumidores, el 25 %, reconoce ser ‘infiel’ ante precios baratos y cambia de marca para ahorrar unos euros.
Planificación de las compras
El consumidor va a la compra sabiendo lo que va a comprar aunque a veces ‘pica’ y compra por impulso productos que no iba a adquirir. El 88 % de los consumidores hace una lista de la compra y planifica su compra antes de ir a comprar. Además, casi la mitad, el 45 %, compra promociones y ofertas y uno de cada tres consumidores acude a propósito a comprar promociones para almacenar productos no perecederos.
Consumir en casa
Un fenómeno que se ha convertido en tendencia es el de ‘vuelta a la madriguera’. Esto significa que el consumidor ahorrador deja de consumir fuera de casa para ahorrar. Por ejemplo, el consumo de bebidas en bares cayó en 2013 más de un 4 %. Bebidas alcohólicas de alta graduación bajaron un 8,8 %, la cerveza en caña un 2,7 % y los vinos sin denominación de origen un 6,2 %. Sólo la ginebra y la tónica registran crecimientos del 2,1 % y 2,2 %, respectivamente, por la moda de beber gin-tonic, junto con los vinos con denominación de origen, que experimentan un crecimiento en el canal Horeca del 6,2 %.
Cada vez compramos menos alimentos frescos y más productos envasados
Por primera vez en décadas el volumen de ventas de productos básicos para el hogar descendió en 2012, aunque el valor del mercado de productos básicos para el hogar tuvo un crecimiento del 0,6 % para la industria, gracias al aumento de precios, hasta los 70.700 millones de euros. Droguería/perfumería sufren el mayor descenso de consumo, un 2,4 %, con una caída significativa en los productos de Belleza. El 21 % de las tiendas de alimentación tradicional están regentadas por inmigrantes. La Marca de la Distribución aumenta su cuota algo más de punto y medio, hasta el 36,7 %. Las promociones aumentaron significativamente en el último trimestre, coincidiendo con la subida del IVA. Hostelería sufrió una bajada del 3,2 % en número de establecimientos y un descenso del 3,3 % en el valor de sus ventas.
Estas son algunas de las conclusiones del ‘Anuario Nielsen 2013 – Tendencias de los Mercados’ que desvela que en el conjunto de los gastos de los hogares en productos básicos para el hogar destaca la Alimentación Envasada, que supone el 41 % del total y tuvo un incremento del volumen de ventas del 0,4 %, y un aumento de precios del 1,9 % sobre el año anterior. Los productos frescos representan el 34 % del mercado, y sufrieron un descenso de ventas del -1,4 %, contrarrestado por una subida de precios también del 1,4 %. El 14 % del gasto de los hogares fue para los productos de Droguería y Perfumería, que experimentaron la mayor caída de ventas, un -2,4 % menos que en 2011, al tiempo que los precios también descendían un -0,4 %.
Por su parte, las Bebidas representan el 10 % del gasto de los hogares en productos básicos, y tuvieron un año estable en ventas, con un incremento de precios del 0,9 %.
Caídas de ventas en productos de belleza
Droguería-perfumería es el sector que sufre así el descenso más acusado, con una pérdida total del 2,8 % de su valor total, que queda en 10,054 millones de euros. Todas sus secciones sufrieron en mayor o menor medida un mal año, pero especialmente los productos de belleza son los que más acusaron la crisis: los de Belleza Selectiva tuvieron un descenso del -8,7 % de su valor; y los de Belleza Mass Market perdieron el -4,4 % de su valor. Por su parte, el mercado de los productos de Higiene descendió un -2,1 %; y el de Droguería bajó el -0,6 %.
Establecimientos
El número total de hipermercados y supermercados en España en diciembre de 2012 fue de 16.947, un 1,2 % más que un año antes; con una superficie comercial de 11 millones de metros cuadrados, un 1,6 % más que en 2011. Siguiendo la tendencia de los últimos años, el canal más dinámico fue el supermercado grande, de los que existen 3.172, un 3,7 % más que el año anterior. Hay también 418 hipermercados, sin variación respecto al último año; 4.876 supermercados medianos, un 0,7 % más; y 8.481 supermercados pequeños, un 0,4 % más que en 2011.
Como en años anteriores, el número de establecimientos tradicionales y especialistas continuó descendiendo en 2012. A finales del pasado año había 32.600 comercios tradicionales y autoservicios, un -1,5 % menos que en 2011; 6.300 Droguerías/perfumerías tradicionales, con un descenso del -6,6 %; y 4.900 Perfumerías/droguerías de Libreservicio, un -2,2 % menos que un año antes.
Inmigrantes
Una de cada cinco tiendas tradicionales pertenece a inmigrantes. Un fenómeno a destacar son las tiendas regentadas por inmigrantes, que están logrando amortiguar el descenso de las tiendas tradicionales de alimentación. Mientras el número total de estos comercios ha bajado de las 34.599 que había en julio de 2010 a 32.805 en julio de 2012; las tiendas con propietarios extranjeros ha pasado de 4.913 en 2010, a 5.844 en 2011 (un 19 % más) y 6.781 en 2012 (un 21 % más). Así, en los últimos tres años han pasado de representar el 14 % de todo el comercio de alimentación tradicional a suponer un 21 %.
La Marca de la Distribución supera el 50 % de cuota en Droguería y Limpieza
La Marca de la Distribución (MD) continúa ganando cuota de forma ininterrumpida: en 2012 supuso más del 36 % del mercado total de productos básicos del hogar, punto y medio más que un año antes. Sigue creciendo en todos los segmentos, si bien en alguno alcanza más del doble de cuota que en otros. En Droguería y Limpieza la MD ha logrado superar la mitad de las ventas, el 50,8 % del total, ganando 2,2 puntos sobre el año anterior. En Alimentación supone el 43,5 % de las ventas, con una ganancia de 1,9 puntos. En Refrigerados y Congelados llega al 40 %, por el 38,4 % que tenía en 2011. Las secciones con menor presencia de la MD siguen siendo Perfumería e Higiene, donde logra el 22,4 % de cuota, ganando 1,6 puntos; y Bebidas, con el 20 %, y un crecimiento de 0,8 %. Se puede comprobar así que en las secciones donde la MD tiene mayor cuota logra además mayores crecimientos que en las que su presencia es inferior, confirmando un año más la mayor importancia que dan los consumidores al valor de las marcas en mercados como los de Perfumería, Higiene Personal o Bebidas.
Aumentan las promociones
Una de las estrategias de fabricantes y distribuidores para tratar de aumentar las ventas es la actividad promocional, que fue especialmente significativa en el último trimestre del año. En diciembre de 2012 el 22,6 % de los productos básicos para el hogar vendidos en hipermercados y supermercados tuvieron algún tipo de promoción; en noviembre los artículos en promoción fueron el 20 %, y en octubre el 18,9 %. Por el contrario, los nueve primeros meses del año la actividad promocional en los productos de gran consumo fue inferior al año anterior. Esta mayor actividad promocional coincide en el tiempo con la subida del IVA, lo que puede indicar una estrategia de intentar paliar el posible efecto que tuviera este aumento de impuestos sobre las ventas haciendo ofertas atractivas para que los consumidores siguiesen comprando.
Bajan las ventas en Farmacias
El Anuario Nielsen incluye también amplia información sobre otros mercados de gran consumo como el farmacéutico, que tuvo un valor de 16.131 millones de euros en 2012, lo que supone un descenso del 5,8 % en valor y del 1,7 % en volumen de ventas respecto al año anterior. De las ventas en Farmacias y Parafarmacias el 81,2 % corresponde a los Medicamentos, cuyo volumen de ventas en 2012 descendió el -1,8 % y el valor del mercado bajó un -7,2 % respecto al 2011. Los No Medicamentos, que suponen el 18,8 % restante de las ventas en Farmacias, bajaron un -1,6 % en volumen de ventas, al tiempo que lograron crecer un 0,5 % en valor.
Tiendas en gasolineras
Otro canal interesante de analizar son las 8.333 Tiendas en Estaciones de Servicio, que facturaron 618 millones de euros en productos de alimentación envasada y droguería perfumería. Las Bebidas representan cerca de la mitad de las ventas de Gran Consumo en este tipo de establecimientos, el 44 % del total; seguidas de los productos de Alimentación, un 37 %; los Refrigerados con un 17 %; y los productos de Droguería/perfumería e Higiene, con el 2 % restante.
Por productos, las Estaciones de Servicio tienen un peso muy importante en algunas categorías de productos como el Hielo, puesto que realizan el 51 % de las ventas total de este producto incluyendo las realizadas en Hipermercados y Supermercados. También suponen el 19,8 % de las ventas de Golosinas; el 8,6 % de las Aguas embotelladas, el 7,9 % de los Snacks Salados; el 6,8 % de los Refrescos; un 5,3 % de los Helados; el mismo porcentaje (5,3 %) de Parafarmacia; el 4,6 % de las Cervezas; un 3,6 % de Pastelería y Bollería Industrial; y un 3,5 % de los Chocolates. Lógicamente, en el periodo estival aumenta el protagonismo de estas tiendas de Estaciones de Servicio en las ventas de aguas, snacks, bebidas y chocolates.
Por su parte, el canal de Cash & Carry vendió 3.424 millones de euros en 2012, lo que supone un descenso del -1,6 % en valor y del -2,1 % en volumen respecto al año anterior. En lo que a productos ser refiere dentro de Cash & Carry, destaca el peso de las Bebidas sobre el resto. Así, de los 10 productos más vendidos en este canal mayorista, 7 son Bebidas y en concreto 6 son Bebidas Alcohólicas. Los refrescos suponen el 10,2 % de todas las ventas de los Cash & Carry; las cervezas un 9,9 %, el whisky, un 7,1 %; los vinos, el 5,6 %; el ron, un 4,3 %; la leche, el 4,3 %; la ginebra, el 3,9 %; los aceites, el 3,8; los licores, un 3,0 %; y las conservas de pescado, el 2,5 %. En resumen, el 54,6 % de todas las ventas de los Cash & Carry corresponden a estos diez productos.
Sigue el descenso en Hostelería
El retroceso del consumo fuera del hogar se nota especialmente en el canal de Hostelería, que sufrió una bajada del 3,2 % en número de establecimientos y del -3,3 % en el valor de sus ventas en los productos controlados por Nielsen.
En España hay 220.488 establecimientos de Hostelería, que realizan el 23 % del consumo total de Bebidas (Alcohólicas y no alcohólicas), café y leche. Y en algunos segmentos el porcentaje de ventas realizadas en Hostelería es realmente importante: el 58 % de todas las Bebidas Alcohólicas; el 51 % de la cerveza; el 47 % del café; y el 37 % de Vinos y Cavas. En el resto de las bebidas el peso de la hostelería se reduce bastante: el 21 % de los refrescos, un 14 % de las aguas embotelladas, el 9 % de leche y batidos, y el 8 % de los zumos.
Casi siempre compramos lo mismo y en los mismos sitios
¿Hasta qué punto somos predecibles los consumidores en los patrones de compra? El consumidor es mucho más predecible de lo que parece. Así lo evidencia un estudio científico internacional, en el que participa la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), que desvela cómo se puede predecir los patrones de compras de la gente. El trabajo se publica en la revista Nature Scientific Reports.
Casi siempre compramos en las mismas tiendas, porque los comportamientos de la gente a la hora de visitar y gastar en las tiendas son repetitivos. “La principal conclusión que hemos extraído es que los comportamientos de la gente a la hora de visitar y gastar en las tiendas son repetitivos, por lo que resulta posible predecir en cierta medida dónde vamos a comprar en el futuro”, explica uno de sus autores, Esteban Moro, del departamento de Matemáticas de la UC3M.
Es uno de los autores que ha publicado el estudio en Scientific Reports, la revista del grupo Nature, junto con científicos de la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad de California en San Diego (EE. UU.), el MIT (Massachusetts Institute of Technology) y el NICTA (Australia).
Analisis de compras con tarjeta
Para realizar el trabajo , los investigadores analizaron cientos de miles de transacciones económicas realizadas con tarjetas de crédito –anonimizadas– a uno y otro lado del Atlántico. El objetivo era encontrar la ‘predictabilidad’ de las series temporales del consumo que realizaron más de 50 millones de cuentas a través de las compras que se realizaban con las tarjetas de crédito durante casi un año.
“Lo que hemos encontrado –señala el investigador– es que la gente es bastante regular a la hora de visitar, y pagar, en las tiendas y que hay bastante ‘predictibilidad’, sobre todo a largo plazo”.
Es posible saber que el próximo mes comprarás en ciertos sitios
Es decir, si estás comprando en un sitio es difícil predecir dónde vas a comprar después, pero sí es posible saber con bastante probabilidad que en el próximo mes vas a comprar en ciertos sitios, comenta el profesor Esteban Moro. En resumen: “Regresamos a las mismas tiendas con notable regularidad”.
Las aplicaciones del estudio son muy variadas, desde el geomarketing –marketing en ciertas zonas de la ciudad–, la provisión de puntos de venta, la localización de cajeros o la detección del fraude, señalan los investigadores, que todavía no disponen de datos para saber si estos datos se pueden extrapolar a las operaciones realizadas con dinero en efectivo.
Predicciones gracias a la tecnología
En los últimos años ha habido numerosas investigaciones sobre la ‘predictabilidad’ de los comportamientos sociales. Utilizando diferentes fuentes de datos –llamadas de teléfono, puntos wifi, datos del GPS, etc.– muchos grupos científicos han estudiado cómo de predecible es nuestra movilidad, es decir, la ruta, camino o sitios por los que nos movemos en la ciudad.
Esa movilidad está determinada por las tareas que tenemos que realizar a lo largo del día –como ir al trabajo o volver a casa– pero también existen muchas variables a lo largo del día que no son totalmente predecibles, como dónde comer o sacar dinero, por ejemplo.
“Nuestro objetivo era intentar observar hasta qué punto esta ‘predictabilidad’ existe también en esas decisiones económicas –cuánto y dónde uso la tarjeta de crédito–, si bien están condicionadas por la movilidad diaria nuestra, tiene una dimensión totalmente diferente”, señala Esteban Moro.
Para la mitad de los españoles cenar fuera de casa es un lujo
Tres de cada cuatro no puede asumir una subida de la cesta de la compra sin tener que recortar de otro lado, por eso la mitad de los españoles evita cenar fuera de casa quitándose caprichos de ocio o comprar ropa ante una posible subida de los alimentos. El pasado año un 48 % de la población sólo pudo afrontar los gastos relacionados con vivienda, comida y productos básicos, mientras que un 42 % siguió viviendo normalmente permitiéndose algún capricho. Sólo un 10 % de los españoles gasta abiertamente sin preocuparles la situación económica.
El informe de Nielsen sobre el ‘Impacto de la inflación en el comportamiento del consumidor’ constata que la crisis económica hace mella en el presupuesto familiar. Los datos españoles son muy similares a los ofrecidos por el conjunto de la Unión Europea (UE), donde el ratio de los ciudadanos que sólo pueden afrontar gastos en vivienda, ropa y comida asciende al 52 %. En cambio, en países donde la coyuntura macroeconómica es teóricamente mejor como Francia o Alemania, el porcentaje de ciudadanos que únicamente pueden permitirse el gasto básico es sensiblemente mayor al caso español y a la media europea, al situarse en el 63 % y 59 % respectivamente.
Percepción del gasto del consumidor en el último año
Países | Gasto libremente | Gasto algunas cosas que no necesito | Gasto en vivienda, comida y básicos |
Alemania | 15 % | 26 % | 59 % |
España | 10 % | 42 % | 48 % |
Francia | 5 % | 32 % | 63 % |
Grecia | 8 % | 41 % | 51 % |
Italia | 11 % | 43 % | 46 % |
Europa | 11 % | 37 % | 52 % |
Por otro lado, el 71 % de los españoles consultados no puede afrontar una subida de precios en los alimentos sin descuidar otras partidas del presupuesto familiar. Aunque esta situación varía en otros países europeos, de este modo, el 57 % de los alemanes, el 76 % de los franceses y el 64 % de los italianos se ven obligados a valorar esta situación al planificar su presupuesto familiar. Alarmante es la situación de Grecia donde la crisis ha impactado con mayor virulencia, puesto que el 87 % de las familias sufren dicha circunstancia.
Quitamos cenar fuera de casa
Preguntados por un eventual incremento en el precio de los alimentos, los españoles prefieren quitar del presupuesto las cenas fuera de casa (66 %), la compra de ropa y accesorios (58 %) o la partida de entretenimiento (44 %). Otros capítulos donde los encuestados españoles prefieren reducir el gasto para dedicarlo a la cesta de la compra son los viajes/vacaciones (43 %) o los servicios de comunicación (42 %). En el lado contrario, se encuentran apartados imprescindibles como el cuidado infantil (2 %), la educación (5 %), la ropa de los niños (7 %), el gasto en salud (8 %) o el pago de los créditos, puesto que un 11 % de los entrevistados o no puede o no quiere afrontarlos.
Ante una hipotética subida del precio de los alimentos, el 48 % de los encuestados se decantaría por aumentar el gasto en marcas de distribución, y muchos optarían por un establecimiento con filosofía discount, aunque otros se inclinarían por supermercados e hipermercados. En cambio, los pequeños establecimientos de proximidad son los que sufren en mayor medida el impacto de la eventual inflación.
Internet como supermercado de ocasión
La tecnología e Internet cobran un mayor protagonismo a la hora de llenar la cesta de la compra y como herramienta para lograr un precio más ajustado entre los consumidores. En el informe de Nielsen se percibe que un 36 % de los preguntados realiza búsquedas de ofertas por Internet que evidencian cómo la tecnología se abre paso cada vez más en el sector de la alimentación. Otro dato que apoya esta tendencia es que el 28 % de los consultados usa las redes sociales para búsqueda de ofertas.
Otra de las tendencias observadas en el informe realizado por Nielsen pone de manifiesto que ante un posible aumento en el precio de los alimentos, los españoles reducirían su gasto en productos como bebidas alcohólicas (63 %), dulces y galletas (70 %), patatas fritas y snacks (69 %) e incluso comida preparada a domicilio (69 %). En cambio los consultados en su mayoría prefieren no cambiar sus hábitos de compra de alimentos esenciales en la dieta como son lácteos (75 %), carne (74 %) o frutas y verduras frescas (72 %) aunque se constate una subida en su precio.
Lo que está claro es que ante la crisis se agudiza el ingenio para evitar el desperdicio de comida. Así se desprende del informe realizado por Nielsen, según el cual el 51 % de los preguntados asegura que compra más fresco y una cantidad más ajustada a sus necesidades. Además, el 36 % opta por comprar paquetes más pequeños o comida con un mayor periodo de caducidad.
Acerca del informe ‘Impacto de la inflación en el comportamiento del consumidor’
El informe internacional ‘Impacto de la inflación en el comportamiento del consumidor’ se realizó entre el 18 de febrero y 8 de marzo de 2013 con la participación de más de 29.000 consumidores en 58 países de Asia-Pacífico, Europa, América Latina, Oriente Medio, África y América del Norte. La muestra está segmentada en cada país por edad y sexo en función de sus usuarios de Internet y tiene un margen de error máximo de ± 0.6 %. Este informe de Nielsen se basa en el comportamiento de los consumidores con acceso a Internet. Las tasas de penetración de Internet varían según el país. Nielsen utiliza un baremo mínimo de penetración de Internet del 60 % o de 10 millones de usuarios para su inclusión en la encuesta. El primer informe internacional ‘Impacto de la inflación en el comportamiento del consumidor’ se hizo en 2005.
La carne envasada, bajo la lupa
El Grupo de Investigación en Tecnología Alimentaria de la Universidad de Murcia realizado una investigación que determina la influencia del método de envasado sobre la calidad sensorial y vida comercial de los platos cocinados mediante tecnología ‘sous vide’. Las conclusiones se publican en la revista Meat Science. El plato estudiado fue carne de cerdo en salsa vegetal envasado a vacío (bolsa ajustable de polipropileno-poliamida) y en atmósfera modificada de nitrógeno y dióxido de carbono (bandeja de polipropileno translúcido con film de cobertura). Los platos cocinados a vacío (70ºC durante 7 horas) fueron conservados en cámaras oscuras de refrigeración (2ºC) hasta 90 días.
Los datos obtenidos a partir de los análisis microbiológicos, físico-químicos y sensoriales indicaron que el método de envasado apenas influyó en la calidad sensorial y en la capacidad de conservación de la carne en salsa sous vide. Sólo se observaron pequeñas diferencias en algunos índices de deterioro, como bacterias ácido-lácticas, bacterias psicrófilas, rancidez y pH.
Ambos métodos de envasado garantizaron platos cocinados con una vida comercial adecuada para sistemas de catering, cifrada en 56 días a 2ºC. La adhesión de la bolsa a la superficie del alimento favoreció la penetración del calor, alcanzando la temperatura de pasteurización en la mitad de tiempo.