¿Lo doy todo en el trabajo? Así puedes detectar los síntomas de ser un ‘workaholic’
Pensar en el trabajo de forma constante, incluso fuera de la jornada laboral, sufrir episodios de ansiedad, estrés o fatiga continuada, necesidad imperiosa de mejorar y obtener logros de forma habitual y hasta pérdida de productividad. ¿Te identificas con alguno de estos síntomas? Todos ellos son señas de la adicción al trabajo, un problema que, según detallan los expertos de Ringover, empresa especializada en comunicación de empresas, cada vez afecta a más individuos. Y que es fundamental identificar para tomar las medidas necesarias para evitar que derive en un problema mayor.
El estrés asociado a esta situación puede afectar al descanso y al nivel de vida. De hecho, otros informes respaldan que más de una cuarta parte de los trabajadores tiene pesadillas.
Contenido de la información:
Qué es la adicción al trabajo
La adicción al trabajo es un fenómeno que experimentan los individuos y que se da cuando se invierte un excesivo tiempo y esfuerzo en las tareas laborales. A lo que se suma un desinterés de otras actividades, como el ocio, la familia, el deporte o los amigos
Se trata de un problema que cada vez afecta a más individuos, explican desde Ringover. En cifras, un 5 % de los españoles son adictos al trabajo. Y el hecho de que esté aceptada socialmente impide, en muchas ocasiones, ponerle remedio.
¿Pero, cómo identificarlo? Es un patrón de comportamiento compulsivo que se caracteriza por una dedicación excesiva al trabajo que se suma a la dificultad para desconectar de las responsabilidades laborales, incluso fuera de la jornada laboral. Las personas que sufren de esta adicción tienden a priorizar su trabajo por encima de otras áreas de su vida, sacrificando su salud, relaciones personales y actividades de ocio en favor de cumplir con sus responsabilidades laborales.
Síntomas de la adicción al trabajo
Los expertos de Ringover detallan cuáles son los principales síntomas asociados a esta adicción. Detallan que, ante todo, estos pueden variar en intensidad de una persona a otra, aunque entre los más comunes se encuentran los siguientes:
- Obsesión por el trabajo
El estar pensando de forma constante en el trabajo, incluso fuera del horario laboral, podría ser un síntoma de esta adicción. Porque trabajar 10 horas al día es síntoma de ser un workaholic. Los expertos detallan que en estos casos los trabajadores pueden experimentar dificultades para desconectar y relajarse, puesto que su mente está ocupada con responsabilidades laborales.
- Priorización del trabajo sobre todo lo demás
Una persona workaholic tiende a priorizar sus responsabilidades laborales por encima de todo lo demás. Se antepone incluso a su salud, seres queridos y su tiempo de ocio.
- Negación de los problemas
Las personas adictas al trabajo pueden negar o minimizar los efectos que este problema tiene en sus vidas, como los derivados de la salud, el estrés crónico o el deterioro de las relaciones interpersonales.
- Necesidad constante de logros
En ocasiones estos profesionales tienen una necesidad constante de superarse en el trabajo para poder sentirse satisfechos consigo mismos.
- Deterioro de las relaciones personales
El trabajo excesivo puede dar como resultado problemas de salud físicos y mentales. Entre ellos, destacan la fatiga, el insomnio, la ansiedad, depresión o los problemas cardiovasculares.
- Reducción del rendimiento laboral
Los expertos detallan que, aunque parezca paradójico, trabajar en exceso no necesariamente conduce a un mayor rendimiento, ya que la persona experimenta agotamiento y falta de concentración, lo que afecta a su productividad y desempeño laboral.
Cómo tratar una adicción al trabajo
Este es un problema que requiere un enfoque integral que aborde tanto los aspectos físicos, como los psicológicos de la adicción. Los expertos resumen en 8 estrategias las posibilidades de tratamiento:
- Reconocer el problema, que es el primer paso para superar la adicción.
- Establecer límites entre el trabajo y la vida personal. Desde definir horarios específicos, hasta aprender a decir no a las tareas y reservar tiempo para el descanso y el ocio.
- Buscar apoyo profesional para que te ayude a identificar y abordar las causas subyacentes de la adicción.
- Practicar el autocuidado y fomentar hábitos saludables como el ejercicio regular, alimentación equilibrada,m calidad ocn los seres queridos y práctica de hobbies y aficiones.
- Fijar rutinas saludables, como dormir un mínimo de tiempo para mejorar la calidad de vida
- Aprender a delegar y confiar en otros la realización de tareas para un mayor equilibrio entre la vida personal y el trabajo.
- Practicar el mindfulness. Desde hacer yoga hasta la meditación para mejorar la capacidad para enfrentarse a los retos laborales de manera efectiva.
Principales causas de la adicción al trabajo
La adicción al trabajo puede tener múltiples causas que se deriven de factores personales, sociales y laborales, aunque entre las más comunes se encuentran las siguientes:
- Presión laboral
- Perfeccionismo
- Autoestima y validación
- Falta de límites personales y laborales
- Falta de estrategias de afrontamiento
- Miedo al fracaso