Las mejores ciudades en las que vivir para los trabajadores expatriados

Viena es la ciudad con más calidad de vida del mundo, según el Estudio de Calidad de Vida elaborado por Mercer. Zurich y Ginebra se sitúan en segunda y tercera posición respectivamente, mientras que Vancouver y Auckland permanecen en cuarto lugar. Madrid está en el puesto 48 mientras que Barcelona está seis posiciones más arriba, en el puesto 42.

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Mejores ciudades para trabajadores expatriados

Estas son las principales conclusiones del Estudio mundial sobre Calidad de Vida que Mercer realiza cada año en 221 ciudades del mundo para que los gobiernos y empresas puedan adaptar la retribución de sus empleados expatriados. El informe analiza 39 factores relacionados con el entorno político, social, cultural, económico, la salud y la sanidad, la educación, los servicios públicos y el transporte, el ocio, los bienes de consumo, la vivienda y el medio ambiente para determinar sus paquetes de compensación a trabajadores expatriados.

Hay dos incentivos comunes en los paquetes retributivos de los expatriados: Incentivos para compensar a los expatriados por una disminución de la calidad de vida entre su país de origen y el país de destino e incentivos para compensar que el expatriado tenga que salir de su país para trabajar en otro. Un complemento de calidad de vida está relacionado con la ubicación donde va a ser enviado el expatriado mientras que un plus de movilidad es independiente de la ubicación. Algunas multinacionales combinan ambos beneficios pero la gran mayoría los ofrecen de manera separada.

“A medida que la economía se vuelve cada vez más global, están emergiendo nuevas ciudades donde iniciar operaciones más allá de los tradicionales centros de negocio. Ciudades de mercados emergentes, como Oriente Medio o Asia, han experimentado un aumento de compañías extranjeras y empleados expatriados en los últimos años. Las empresas necesitan una fotografía clara de cuál es la situación en el país de destino para asegurarse de que diseñan un paquete retributivo adecuado.”, afirma Rafael Barrilero, socio de Mercer.

La clasificación de Mercer se ha actualizado y ahora cubre 221 ciudades frente a las 215 de la edición anterior. La nueva selección incluye capitales y grandes ciudades de todo el mundo que ya se encuentran en nuestra base de datos y que reflejan los nuevos lugares donde las compañías están enviando a sus expatriados en el actual entorno económico.

Mercer ha llevado a cabo este estudio para ayudar a gobiernos y multinacionales a la hora de establecer una compensación competitiva para sus asignaciones internacionales. El listado se basa en una clasificación de puntos en la cual Viena suma 108,6 puntos y Bagdad 14,7. Para elaborar este ranking se toma como referencia Nueva York, la cual suma un total de 100 puntos, pero siempre debe de medirse ciudad contra ciudad para establecer el diferencial.

Las ciudades europeas están entre las 25 primeras del ranking. En el Reino Unido, Londres ocupa el puesto 39, mientras que Birmingham está en el lugar 55 y Glasgow en el 57. En Los Estados Unidos, el puesto más alto lo ocupa Honolulu (31), seguida por San Francisco en el 32. Singapur (puesto 28) es la ciudad asiática que ocupa una posición más alta de la lista, seguida por Tokio (40). Bagdad, en el puesto 221, es la última de la clasificación.

“El diferencial de calidad de vida puede ser determinante a la hora de aceptar o no una asignación internacional y, por tanto, en los paquetes retributivos deben de compararse equitativamente este diferencial según sea mayor o menor la diferencia de calidad de vida”, resalta Barrilero.

Este año, el ranking también identifica las ciudades más ecológicas tomando en cuenta una series de parámetros como el acceso al agua potable, el tratamiento de los residuos, la calidad del alcantarillado, la polución del aire y la congestión del tráfico. Calgary encabeza esta clasificación (145,7 puntos), seguida por Honolulu (145,1 puntos) y Ottawa y Helsinki, ambas en tercer lugar con 139,9 puntos. Wellington (quinto lugar), Minneapolis (sexto), Adelaida (séptimo) y Copenhague (octavo), ocupan los siguientes cuatro puestos, mientras que Kobe, Oslo y Estocolmo comparten el noveno puesto. Puerto Príncipe en Haití, se sitúa en el último lugar de esta tabla con solamente 27,8 puntos. Madrid y Barcelona ocupan conjuntamente en puesto 57 en este apartado.

Las ciudades que ocupan los primeros puestos en la clasificación ecológica optimizan el uso de energías renovables y producen el nivel mínimo posible de contaminación (aire, agua, ruido, etc). Una ciudad con un buen estatus ecológico o con buena disposición hacia la sostenibilidad puede tener gran impacto en la calidad de vida de sus habitantes. Esto también influye en las empresas que envían a expatriados y sus familias a esta zonas, puesto que la gran mayoría de las asignaciones internacionales se dan en zonas urbanas. Para la vida de la ciudad es esencial alcanzar ciertos parámetros de sostenibilidad y además conforma una parte muy importante de la calidad de vida de sus habitantes.

Europa

Europa tiene 16 ciudades entre las 25 ciudades con más calidad de vida del mundo. Viena se mantiene en la primera posición tanto en la zona europea como a nivel mundial, de nuevo seguida por Zurich (2), Ginebra (3) y Dusseldorf (6). Las ciudades de Europa Occidental peor situadas en la clasificación son Leipzig (64) y Atenas (75).

Los niveles de calidad de vida siguen mejorando en Europa del Este y sus puntuaciones han aumentado significativamente. Praga es la más alta en el ranking (70) y su puntuación ha aumentado desde 93,9 a 84,8 en 2010. Budapest le sigue en la posición 73 y Ljubljana en el puesto 77.

En la clasificación ecológica, las ciudades nórdicas están especialmente bien situadas con Helsinki (3) como la ciudad mejor clasificada de la zona, seguida por Copenhague (8) y Oslo en noveno lugar junto con Estocolmo. Las ciudades nórdicas están especialmente bien situadas debido a que la parte moderna de las ciudades ha sido diseñada teniendo en cuenta el impacto potencial en el medio ambiente.

América

Las ciudades canadienses dominan los puestos más altos de esta zona con Vancouver en el puesto número 4, seguida por Ottawa (14), Toronto (16) y Montreal (21). Calgary ocupa el puesto 28.

Honolulu (31) es la ciudad en Estados Unidos con la calidad de vida más alta, seguida por San Francisco (32) y Boston (37). Chicago y Washington comparten la posición 45 y Nueva York, la ciudad de referencia para la comparación, está en el puesto 49. Las recién añadidas Philadelphia y Dallas se sitúan en los puestos 55 y 61 respectivamente.

En América Central y Sudamérica, Pointe a Pitre, en Guadalupe, y nueva este año en la clasificación, ocupa el puesto más alto de la región (62). San Juan de Puerto Rico le sigue en la posición 72 y Buenos Aires en el 78. La Habana (192) y Puerto Príncipe (213) ostentan los lugares más bajos.

“La calidad de vida sigue estable en las ciudades de Norteamérica. Sin embargo, en Sudamérica y Centroamérica se observa un descenso debido a la inestabilidad política, la situación económica y los cortes energéticos en algunos países. El alto índice de criminalidad también sigue siendo uno de los principales problemas de estas ciudades”, explica el socio de Mercer.

Las ciudades canadienses y estadounidenses tienen una fuerte representación dentro de la clasificación ecológica, tanto en la zona de América como a nivel mundial. Calgary ocupa el primer puesto a nivel mundial con una puntuación de 145,7, seguida de cerca por Honolulu (145,1) en segundo lugar. Ottawa se sitúa en tercera posición con 139,9 puntos y Minneapolis les sigue en sexto lugar (137,8). Calgary ocupa el primer puesto debido a su excelente nivel de servicios de tratamiento de residuos, sistemas de alcantarillado y potabilidad del agua, unido a unos niveles de contaminación del aire relativamente bajos.

Las ciudad mejor situada en Centroamérica y Sudamérica es de nuevo Pointe a Pitre (puesto 49), seguida por San Juan de Puerto Rico (69) y Montevideo (70).

Oriente Próximo y África

¿Vivir en Dubai españoles?

Dubai (75) y Puerto Luis (82), en Isla Mauricio, son las ciudades de esta zona con mayor calidad de vida. Les siguen Abu Dhabi (83), Ciudad del Cabo (86) y Túnez (94) junto con Victoria en las Seychelles (95), Johannesburgo (96) y Muscat en Omán (100), son las únicas ciudades de la zona dentro de las 100 primeras.

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Entre las nuevas ciudades añadidas destacan Doha (110), Rabat (112), Banjul (164) y Abuja (205). Bagdad (221) sigue siendo la última de la clasificación aunque su puntuación ha mejorado ligeramente (desde 14,4 a 14,7 en 2010). La falta de seguridad y estabilidad sigue teniendo un impacto negativo en la calidad de vida de Bagdad y su puntuación permanece muy por detrás de Bangui (27,4), que es la segunda de la lista por debajo.

En cuanto a la clasificación ecológica, la mayoría de las ciudades de esta zona están por debajo de las 100 primeras. Destacan, no obstante, Ciudad del Cabo (puesto 30), Victoria (38), Muscat (48), Johannesburgo (54) y Abu Dhabi y Dubai, que ocupan conjuntamente el puesto 65. Antananarivo en Madagascar está al final de la lista (217) con una puntuación de 39,7, mientras que Bagdad está en el puesto 214 con 40,5 puntos. La falta de infraestructuras modernas en algunos países africanos combinado con una contaminación relativamente alta podría explicar por qué la mayoría de las ciudades está por debajo de las 100 primeras.

Angola, el país que más crece del mundo, destino de españoles expatriados para trabajar

Las expatriaciones para trabajar en África aumentan rápido. En 2012, el número de profesionales españoles en este continente ascendió a 16.618, un 22 % más que en los últimos tres años. Angola y Mozambique son dos de los destinos que más trabajadores extranjeros están acogiendo. Angola es el país con mayor crecimiento del PIB del mundo, un 11 % de media, y Mozambique continuará creciendo al 7 % en 2013. A continuación, recogemos consejos de expertos en relocation, que advierten sobre los principales retos a los que se enfrentan los profesionales en estos países: enfermedades, corrupción, seguridad o entorno político convulso.

África está experimentando un fuerte crecimiento económico y demográfico que supone un gran potencial para empresas y profesionales de todo el mundo, incluidos los españoles. Tal y como refleja el ICEX (Instituto de Comercio Exterior), el crecimiento económico del África subsahariana, superará el 5 % de promedio durante el periodo 2013-2015 gracias a los altos precios de las materias primas que exportan a los países de la región y al fuerte gasto privado de sus habitantes. Este crecimiento tiene su manifestación en el número de profesionales españoles expatriados en el continente que, según un estudio del INE (Instituto Nacional de Estadística), ha ascendido a 16.618 en 2012, un 22 % más que en los tres años anteriores. A juicio de Eres Relocation Services, primera empresa en servicios de movilidad geográfica en el mercado español, este continente liderará el crecimiento en los próximos 25 años.

Angola y MozambiqueUn ejemplo de este desarrollo se encuentra en Angola y Mozambique donde actualmente, según el INE, trabajan casi 600 españoles. Según apunta el FMI (Fondo Monetario Internacional), Angola es el país con mayor crecimiento de PIB, un 11 % de media mundial por delante de China que asciende al 10,5 %. Angola ha aumentado el dinamismo de su economía en un 9 % y se prevé que supere el 12 % en el 2013. Por su parte, según afirma el ICEX, el crecimiento de Mozambique será del 7 % anual gracias a los recientes hallazgos de yacimientos de petróleo y gas en el norte del país. El mismo informe indica que su economía puede experimentar un nuevo impulso en los próximos años, a través de las inversiones agrícolas futuras valoradas en 3.800 millones de dólares.

Las dificultades del continenteUn estudio realizado por el Banco Mundial refleja el gran potencial de África, con un riesgo financiero muy bajo y un rating inferior al de España, ofrece además seguridad para operar. Muchas empresas, entre ellas españolas, están expatriando delegaciones de profesionales a estas regiones con el objetivo de implantarse para localizar y desarrollar nuevas oportunidades de inversión.

Al tratarse de un continente con una gran diversidad cultural y grandes contrastes, es recomendable contar con la ayuda de expertos en recolocación, especialistas en inmigración y expatriaciones que ofrecen soluciones a medida para que la adaptación sea lo más cómoda posible. Los expertos de Eres Relocation advierten que, una vez en el continente, el profesional debe lidiar con numerosos riesgos como las enfermedades, la corrupción, la inseguridad, una complicada la burocracia y, en ocasiones, un entorno político convulso. Además, el proceso de expatriación plantea diversos retos de tipo personal (adaptación al nuevo entorno, movilidad familiar…) u organizativo (repatriación, aprovechamiento de la experiencia, costes…).

Ser realista

Para Jose Antonio de Ros, director general de Eres Relocation, “lo más importante antes de instalarse es informar al expatriado sobre los retos a los que se va a enfrentar y no generar sobre expectación, mostrar siempre lo bueno y lo malo de cada país”. Además, de Ros apuesta por la conveniencia de que los expatriados acudan a cursos de inmersión en el país, “nosotros organizamos cursos dónde nuevos y antiguos expatriados comparten sus experiencias y dudas con el asesoramiento de un experto en recolocaciones, unas jornadas que se convierten en la mejor herramienta de integración”.

Asia-pacífico

Auckland (4) mantiene su posición como la ciudad con más calidad de vida de la zona. Sydney le sigue en el décimo puesto, Wellington en el 12, Melbourne en el 18 y Perth en el 21. En el puesto 26, Canberra es nueva en la lista. Singapur sigue siendo la ciudad asiática con más calidad de vida en el puesto 28, seguida de las ciudades japonesas de Tokio (40), Kobe y Yokohama (ambos en el puesto 41), Osaka (51) y Nagoya (57). La ciudades con menos calidad de vida de la región son Dhaka en Bangla des (206) y dos ciudades nuevas, Biskek, en Kirguistán (209) y Dusanbé en Tayikistán (210).

Wellington, con una puntuación de 138,9, es la ciudad que ocupa un mejor puesto en la clasificación ecológica (5). Le sigue Adelaida (7), Kobe (9), Perth (12) y Auckland (13). Dhaka (220) ocupa el puesto más bajo con 30,9 puntos.

“La calidad de vida ha disminuido en algunos países asiáticos. El aumento de la violencia y el terrorismo junto con los desastres naturales como terremotos o tifones, ha tenido un impacto negativo en la calidad de vida de esta zona. Esto puede provocar que se diseñen paquetes más atractivos para los expatriados enviados a estos países”, concluye Rafael Barrilero.

Fuente: Mercer

Fuente: Mercer

* La clasificación ecológica de Mercer incluye los siguientes criterios: acceso y potabilidad del agua, alcantarillado, tratamiento de los residuos, contaminación del aire y congestión del tráfico.

Los retos de las compañías españolas con los trabajadores expatriados

El 41,7 % de los casos de retorno anticipado en las compañías españolas se debe a la falta de adaptación en los destinos, frente a sólo el 23 % de las extranjeras. ¿Qué pasa entonces con los trabajadores españoles? ¿O son las empresas españolas las que no hacen los deberes con sus trabajadores expatriados? Un estudio realizado por ERES Consulting, conjuntamente con el IESE, aborda los retos de la expatriación y pone de manifiesto la escasa formación intercultural que ofrecen las empresas nacionales, aunque siempre hay testimonios de expatriados que han tenido éxito en su trabajo en el extranjero.

ERES Consulting, empresa consultora destacada en servicios de movilidad global, ha realizado conjuntamente con el IESE un estudio sobre “Los retos de la expatriación en las multinacionales españolas y extranjeras”, donde se han podido analizar los aspectos y hábitos a desarrollar y mejorar, por las diferentes empresas participantes en la muestra (16 multinacionales extranjeras y 14 nacionales). En este sentido, y dentro de las principales conclusiones del informe, llama la atención la escasa formación intercultural de las compañías nacionales En un momento, en el que la formación de empleados para su movilidad internacional, conocida también como “gestión de expatriados”, resulta cada vez más notoria, el cuidado de los múltiples aspectos que ésta conlleva condicionará el rendimiento y la adaptación del empleado en su nuevo lugar de trabajo. Dentro de este marco, las empresas han de atender a numerosos factores, entre los que destacan la gestión de pagos, el diseño de políticas de expatriación, apoyo en la búsqueda de trabajo para el cónyuge, de la vivienda y el colegio (en familias con hijos) o la formación intercultural. Y es precisamente en este último aspecto, en el que las empresas españolas analizadas presentan grandes deficiencias con respecto a las extranjeras.

La gran mayoría de las multinacionales foráneas ofrecen este servicio como parte de los beneficios al expatriado, mientras que en el caso de las 14 compañías españolas estudiadas, tan sólo una lo hace. A la hora de determinar los factores que pueden llevar a las empresas nacionales a justificar esta laguna, habría que considerar el hecho de que una gran parte de los destinos de estos expatriados son países latinoamericanos, en los que la coincidencia del idioma hace pensar a la compañía que no es necesario atender esta demanda. Sin embargo, compartir un idioma no implica, necesariamente, compartir una cultura, ni unas costumbres sociales.

Desde este punto de vista, no es extraño comprobar cómo la mayoría de las multinacionales españolas señalan que la adaptación cultural, o los problemas derivados de la misma, suponen uno de los principales retos de la expatriación. Por ello, la escasa dedicación a la formación intercultural del empleado que va a ser destinado a otro país, puede ser la base de uno de los datos más relevantes del estudio: el 41,7 % de los casos de retorno anticipado en las multinacionales españolas se deben a problemas de adaptación del expatriado a su destino. Es el segundo motivo más importante, después del que se recoge bajo el apartado “necesidades de la empresa”, que alcanza un 58,3 %. En el caso de las multinacionales extranjeras, los problemas de adaptación apenas llegan al 23 % de los casos de retornos prematuros, siendo las necesidades de la empresa la causa principal en el 92 % de las situaciones.

Asimismo, y a la hora de anticiparse a los problemas que puedan surgir con la gestión de expatriados, un gran número de las multinacionales españolas encuestadas no consideran el choque cultural como una de las dificultades principales del proceso. Es más, estiman que esta confrontación cultural tiene una incidencia baja (15,4 %) en el mismo. Así, apuntan más bien hacia el perfil profesional o la incertidumbre respecto del regreso como puntos de referencia a tener en cuenta.

La comparación de este último dato con el anterior demuestra el mal enfoque que, en muchos casos, presentan las compañías nacionales con uno de los retos más importantes dentro de la gestión de expatriados: la formación intercultural. En este sentido, tanto ERES Consulting como el IESE esperan, a través de este estudio, servir de ayuda a las empresas para que puedan logra una mayor optimización de los recursos dedicados a este campo.

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