La sopa fría de melón con jamón de Arguiñano que es muy hidratante y baja en calorías
La sopa fría de melón con jamón y el toque especial de Karlos Arguiñano es un plato que resulta irresistiblemente apetecible con la llegada del calor. Tiene un gran poder hidratante, por lo que es perfecta para combatir las altas temperaturas y, además, es rica en vitaminas, antioxidantes y baja en calorías.
¿Puede decirse que es una de las mejores opciones para disfrutar de un plato riquísimo este verano? Sí, y además, es muy fácil de preparar. A ello se suma que la combinación de sabores de las frutas, con el toque salado del jamón, va a convertir a este plato en uno de los imprescindibles de la semana.
Es una receta que, junto con el batido detox de Arguiñano de fruta y verduras y el truco de Arguiñano para preparar el auténtico salmorejo cordobés, permite incorporar en la dieta, de forma habitual, ingredientes muy saludables de una manera divertida, saciante e hidratante.
Contenido de la información:
Ingredientes para 4 personas
Si quieres preparar esta deliciosa receta fresquita y saludable que es perfecta para combatir el calor, a continuación puedes consultar los ingredientes necesarios para elaborar una ración para cuatro personas:
- 1 melón de piel de sapo, que es el más común que se vende en las fruterías o supermercados en España.
- 4 lonchas de jamón serrano
- 40 gramos de pistachos pelados
- 1 melón cantaloup
- 125 gramos de frambuesas
- Aceite de oliva virgen extra
- Cebollino
- Pimienta
- Sal
Cómo preparar la sopa fría de melón con jamón
El proceso para preparar este plato de sopa fría de melón con jamón es muy sencillo. En concreto, los pasos a seguir, según detalla Arguiñano, son los siguientes:
- El primer paso de esta receta es poner el horno a precalentar a 180 grados porque la primera elaboración de esta sopa es hacer el crujiente de jamón. Para ello, coge un par de papeles de horno y coloca el primero en la bandeja. A continuación, coloca las cuatro lonchas de jamón encima. Y, para terminar, coloca el otro papel encima de las lonchas de jamón. Para que el crujiente salga de diez, Arguiñano aprieta el papel y pasa la mano por encima con un poco de presión para que se queden las tres capas (papel y jamón) lo más juntas posible. Hecho esto, introduce la bandeja en el horno y lo deja durante 10 o 12 minutos para que se haga bien.
- Mientras que se hace el crujiente de jamón, coge el melón. Lo primero que hace es cortarle uno de los dos extremos. Coloca el melón de pie en la tabla de madera y con la zona cortada mirando hacia arriba, empieza a cortar el melón. El primer corte lo hace a la mitad.
- Con las dos mitades encima de la tabla bocarriba, el siguiente paso es quitar las pepitas de la fruta. Pero ojo, porque no las tira, sino que las introduce en un colador con un recipiente de cristal debajo para no perder el jugo del melón.
- Una vez limpio el melón, corta cada una de las mitades en diferentes rodajas, igual que si fueras a cortarlas para comer. A continuación, quita la piel de cada una de las rodajas para dejarlo limpio y las corta en cuadrados. Cuando tengas el melón ya limpio y en trozos pequeños, los mete a la batidora de vaso.
- Echa un poco de sal por encima, un chorro de aceite de oliva, una pizca de pimienta, sin pasarse, tapa la batidora y la enciende. Introduce aquí también el jugo extraído de las pepitas del melón. Hay que dejar trabajar a la batidora hasta conseguir un líquido homogéneo, sin trozos ni grumos. Una vez lo tengas, dejarlo enfriar.
- Durante este tiempo en el que el melón triturado se enfría, hay que coger las frambuesas y cocinarlas. En concreto, hay que echarlas a la sartén y poner un poco de aceite de oliva para saltearlas. El fuego no debe estar muy fuerte para que, mientras se cocinan, aprovechar y cortar el melón de cantaloup.
- En este caso, hay que cortarlo a la mitad.
- Este melón no va a triturarse, sino que sirve como toque especial de sabor y de decoración. Por ello, Arguiñano en la elaboración coge una de las mitades, la limpia de las pepitas y coge un utensilio de cocina con cabezal redondo para sacar bolas de melón.
- Una vez estén las frambuesas cocinadas, las pone en un colador con un recipiente debajo para que suelten el jugo en el cuenco y aprovecharlo para la receta. La parte que se usa en la receta no es la fruta, sino el jugo. Por ello, para aprovechar al máximo la fruta, puedes ayudarte de una cuchara y aplastar en el colador ligeramente las frambuesas para que expulsen todo el líquido.
- Corta el cebollino y coge unos pistachos y los machaca. A continuación, llega el momento de servir. Lo primero que pone en el plato es el melón triturado, bastante cantidad. Después, echa unas bolas del melón de cantaloup. Unas cuatro o cinco por plato. Un puñado de pistachos por encima picado, lo mismo con el cebollino, un poco de jugo de frambuesa y, para rematar, una loncha de crujiente de jamón. ¡A disfrutar!
Propiedades y beneficios a la salud de este plato
La sopa fría de melón con jamón es un plato hidratante, ideal para combatir las altas temperaturas que, además, aporta una gran variedad de vitaminas y antioxidantes. Se trata de una receta baja en calorías, puesto que el melón es una fruta que tiene un aporte calórico bastante moderado. En resumen, es una sopa que depura el organismo, contribuye a evitar la retención de líquidos y con propiedades reguladoras del organismo que potencia las defensas.