La revista ‘Vanity Fair’ cuenta lo que nadie ha contado del viaje del Rey a Botsuana y su ‘misteriosa amiga Corinna’
La revista Vanity Fair lleva a portada del mes de junio una foto de Corinna Zu Sayn-wittgenstein, la princesa que acompañaba al Rey en Botsuana y supuesta amante del Rey don Juan Carlos, tal y como titula en portada ‘La misteriosa amiga del Rey’ esta publicación que sale a la venta a partir de mañana. Recoge en exclusiva una entrevista al ex marido de Corinna, además de recoger los testimonios de sus amigos y también de sus enemigos. Algunos de los testimonios recogidos son los siguientes:
Contenido de la información:
Testimonios
“Ella lleva bastantes años viajando con el Rey. Es una especie de asesora“, cuenta la diseñadora Bonnie Young, amiga de la princesa.
“Corinna se ocupaba de todo de la A la Z. El rey no explicaba quién era. Simplemente estaba a su lado“, dice un compañero de cacerías del Rey.
“En la cacería en Botsuana también estábamos el hijo menor de Corinna y yo“, revela Philip Adkins, su primer marido.
Los detalles
La revista Vanity Fair dedica la portada de su número de junio, que sale mañana a la venta en Madrid y Barcelona, a Corinna zu Sayn-wittgenstein, la princesa alemana que acompañaba al rey Juan Carlos durante la cacería en Botsuana en la que el Rey se fracturó la cadera derecha el pasado 14 de abril. Vanity Fair revela en exclusiva detalles inéditos de la relación con don Juan Carlos y del perfil de esta princesa cuyo nombre ha saltado a la prensa internacional.
En el reportaje, el empresario estadounidense Philip Adkins, primer exmarido de Corinna zu Sayn-wittgentein, revela que él y el hijo menor de Corinna, hijo de su segundo matrimonio con el príncipe alemán Casimir zu Sayn-wittgenstein, también participaron en el viaje a Botsuana. “Aquel era un viaje de familia y amigos. Mohamed Eyad Kayali, un hombre muy generoso, nos invitó a todos, incluido el Rey. Era, sobre todo, el viaje de dos personas mayores que querían estar en la selva juntos, probablemente por última vez en su vida, hablando frente al fuego, compartiendo experiencias entre los hipopótamos y los leones. Yo estaba allí porque conozco muy bien África y porque Corinna había querido llevar a su hijo pequeño de diez años y que yo le introdujera en la experiencia africana”, desvela Adkins.
El empresario confiesa que su exmujer está muy “asustada” desde el accidente del Rey. “¿Quién no lo estaría si de repente apareciesen periodistas de todo el mundo atacándote y acusándote de ser la amante del Rey?”, se pregunta. La revista desvela la vida de la princesa, desde su primera etapa en París, donde conoció a Adkins, hasta su estancia en Londres como responsable de la agencia Boss Sporting, donde organizaba safaris de lujo para clientes de alto standing entre los que se incluía don Juan Carlos. “Se ocupaba de todo, de la A a la Z. El Rey no explicaba quién era. Simplemente ella estaba a su lado todo el tiempo. Podría ser la asistente, la organizadora, la mánager estratégica…”, revela a Vanity Fair uno de los cazadores que participó en aquellos viajes.
Según este cazador, Corinna zu Sayn Wittgenstein empezó cobrando por la organización del evento y terminó haciendo negocio como intermediaria entre “algunos de los hombres más poderosos de Estados Unidos, Oriente Medio y Europa. Invitados que desarrollaban allí futuras transacciones y cuyos tratos acabó por cerrar ella en los países de origen a cambio de suculentas comisiones”.
Críticas a Corinna
Vanity Fair recoge además los testimonios de familiares de su segundo marido y de amigos de este, que critican a Corinna por haberse casado con él “para obtener un título y un pequeño principito”. Una imagen que sus abogados en Londres desmienten en la revista. “Cualquier sugerencia o comentario de que ella se casó con Casimir zu Sayn-wittgenstein por su posición no tiene sentido. Nuestra cliente ya conocía a todo el mundo en todas partes”, la defienden desde la firma de abogados Schillings.
Vanity Fair también analiza la presencia de la princesa alemana en algunos de los viajes oficiales de don Juan Carlos. Y aporta detalles inéditos de los mismos. Como el que el Rey hizo en febrero de 2006 a Alemania y donde ella, según recoge la revista citando a uno de los participantes en el mismo, “le organizó la agenda y concertó las citas con las personas que debía conocer. Ella controlaba cada uno de los detalles. A tal punto que hasta el responsable de protocolo de la Casa del Rey estaba desconcertado”. O el que realizó en 2006 a Arabia Saudí con los Reyes como “consejera estratégica” de la delegación, y que repitió un año después para llevarle “a título particular, un mensaje altamente confidencial al príncipe Al-waleed de parte del Rey”, dice la revista citando fuentes diplomáticas.
Sobre este punto también habla en el reportaje de Vanity Fair la diseñadora neoyorquina Bonnie Young, quien reconoce que su amiga Corinna “lleva viajando con el Rey desde hace ya bastantes años. Es una especie de asesora”. Por último, la revista apunta que don Juan Carlos habría decidido cancelar cualquier relación con la princesa para frenar la polémica desatada desde la cacería.
WWF se quita al Rey de la Presidencia de Honor por la cacería de elefantes eliminando de sus estatutos su puesto
El Rey Juan Carlos I, presidente de honor de WWF España desde la fundación de la organización en 1968, dejará de serlo. El 94 % de los socios de WWF España han votado hoy en Asamblea Extraordinaria a favor de suprimir la figura de Presidente de Honor de los Estatutos de la organización, cargo que hasta ahora era ocupada por el Rey. La Asamblea ha tenido lugar hoy después de que el pasado mes de abril se produjera una amplia controversia con relación a una cacería de elefantes en Botswana en la que participaba el Rey y que se hizo pública en los medios de comunicación después de que el monarca se accidentase.
La respuesta de WWF
A raíz de esta cacería, que se hizo pública en los medios de comunicación, WWF recibió numerosas muestras de malestar de sus socios y de la sociedad en general, tanto dentro como fuera de España (WWF está presente en más de 100 países).
Incompatible con el cargo
Aunque ese tipo de caza es legal y está regulada, ha sido considerada incompatible, por muchos de los socios de WWF debido a que entienden que desde la Presidencia de Honor de una organización internacional como WWF de defensa de la naturaleza y el medio ambiente y una de la que más esfuerzos y recursos dedica a la conservación de especies en peligro de extinción no debe actuarse de esta forma.
Una decisión de los socios
Por esta razón, la Junta Rectora de WWF España había acordado por unanimidad iniciar los trámites para la celebración de una Asamblea Extraordinaria en la que sus socios pudieran decidir sobre la conveniencia de mantener o eliminar el artículo de sus Estatutos referente a la Presidencia de Honor, ocupada por el Rey Juan Carlos. El 94 % de los socios de WWF España votaron a favor de la supresión de la figura de Presidente de Honor.