La oferta de modelos exclusivos como el Porsche Cayenne se triplica en el mercado online de segunda mano
Las dificultades económicas de la subida de tipos, las restricciones al crédito, la escalada inflacionista y el crecimiento de la tasa de desempleo, junto con el grave problema de liquidez que padecen las pequeñas y medianas empresas, han obligado a muchos a poner en venta sus vehículos de lujo. Así se desprende del estudio realizado por AutoScout24 -plataforma europea de vehículos en la red- sobre el mercado de segunda mano, que ha visto crecer la oferta global de vehículos usados en Internet en un 31,5 % hasta el mes de octubre, y multiplicar por tres la de algunos de sus modelos más exclusivos, como el Porsche Cayenne.
La compra de todoterrenos, SUV (Sport Utility Vehicle) y vehículos potentes con motor de gasolina ha sido la tendencia habitual de los últimos años, marcados por el boom inmobiliario, en particular, y la bonanza económica, en general.
Pero, la actual crisis financiera internacional ha puesto en evidencia la dificultad que tienen ahora sus dueños para afrontar su elevado consumo de gasolina, pagar su seguro a todo riesgo o abonar -previsiblemente en un futuro no muy lejano- determinadas tasas por el mero hecho de ser más contaminante. De ahí que la mayoría se pregunte ahora si merece la pena andar con el agua al cuello para pagar las cuotas o, en el mejor de los casos, tener aparcado su coche en el garaje para no hacer más gasto.
Desde mediados de año, el tipo de interés medio para la financiación de automóviles se sitúa en un 9,4 %. Con unos precios más altos, los salarios congelados, el paro subiendo y el grifo de los créditos cerrado, no sorprende que a muchos no lo les llegue para pagar el coche y opten por venderlo. Según datos del Banco de España, el aumento de la morosidad en los créditos para automóviles ha aumentado en las entidades especializadas hasta el 4,3 % en junio, dos puntos más que en el mismo período del año anterior.
“Chollos de lujo” en la red
Pero el frenazo no sólo ha afectado a los particulares, sino también a las empresas que, ante el grave problema de liquidez que padecen, están desviando la demanda de vehículos para sus altos directivos y mandos intermedios hacia modelos de segmentos altos, aunque alejados de aquellos Premium con los que no dudaban años atrás en remunerarlos.
En consecuencia, las empresas de renting están recurriendo también a Internet para dar salida a los vehículos cuyos contratos finalizan ahora, mientras que ya planifican compras orientadas hacia coches más económicos y ecológicos.
De esta forma, vehículos que hasta hace poco se compraban a partir de 68.000 euros, se encuentran ahora a la venta en el mercado de segunda mano desde 25.000 euros. Comprarlo es ahora asequible para un mayor número de personas; mantenerlo, es otra historia.