La imagen personal en el trabajo es clave

La imagen personal es fundamental en el mundo laboral. El portal Trabajando ha querido profundizar en este aspecto tan influyente del mundo laboral, como es el de la imagen, ofreciendo el punto de vista personal y empresarial. Por ello realizó una encuesta en la que participaron más 2.000 personas. Estos son los resultados: Desde el punto de vista del empleado, el 80 % de los españoles destaca que la imagen es un elemento fundamental que hay que cuidar en todo momento. Tan sólo un 14 % resta importancia a este aspecto, destacando que su manera de vestir no influye en el desempeño de sus funciones. El otro 6 % sólo da importancia a la imagen en los procesos de selección previos al puesto.

Además, esos datos se reflejan en el porcentaje de sueldo que los trabajadores suelen destinar a su imagen, 7 de cada 10 empleados invierte un 15 % de media de su sueldo en trajes, complementos, tintorería, etc.

Desde el punto de vista empresarial, el 40 % de las organizaciones establecen una serie de protocolos o criterios a seguir en la forma de vestir, aunque de manera no explícita. Normalmente, las empresas especifican y detallan estos aspectos antes de la incorporación del trabajador al puesto, sin existir un documento que lo albergue, tan sólo un 24 % de las compañías encuestadas puntualizan estos protocolos dentro de sus estatutos. El 32 % restante no determina ningún criterio a seguir en la imagen de sus trabajadores, pues no creen que sea relevante para la organización y apelan al sentido común de cada uno.

A día de hoy en España, no es muy común que las empresas elaboren estrategias flexibilizando este aspecto de la vestimenta en los empleados. Según los datos recogidos en la encuesta, tan sólo un 11 % de las empresas practican este tipo de medidas, como por ejemplo el denominado “Casual Day”. Más del 80 % de las compañías desconocen o no practican este tipo de medidas, puesto que no lo ven como algo funcional.

Recomendaciones sobre cómo vestir en el trabajo

La imagen personal es la carta de presentación que tenemos hacia nuestro entorno profesional: clientes, proveedores, entidades financieras, nuestros colaboradores, etc., y no siempre es transmitida tal y como deseamos.

Tanto si nos encontramos buscando trabajo, como en el día a día de tu empresa, en relaciones profesionales, en networking, etc., tenemos que cuidar siempre la imagen y manera de vestir, puesto que con un sólo golpe de vista damos bastante información sobre nosotros.

Consejos para acertar con la imagen en tu carrera profesional

– Debes pensar que una persona que cuida su imagen se siente más segura y confiada en lo que ofrece.

– Hay que tener coherencia entre el entorno en el que te encuentras y la presencia externa que presentas.

– Si estás buscando trabajo, en las entrevistas debes vestirte acorde al cargo que aspiras y a lo que quieres ofrecer: seriedad, creatividad, formalidad, pero recuerda que nunca quedarás mal si vas bien vestido.

– Hay que ofrecer una imagen limpia y ordenada en todo momento.

– Cuando hablamos de imagen personal, no sólo nos referimos a los elementos externos como la ropa, si no también a las posturas, movimientos, el tono de voz, la manera de hablar, entre otros aspectos.

Las trabajadoras ven mal que otras compañeras vayan al trabajo con ropa sugerente

De los 16 países participantes en un estudio de LinkedIn, España ocupa el decimotercer puesto en el ranking de los países con profesionales con más manías. Uno de los aspectos a destacar es que las españolas (36 %) se muestran mucho más molestas que los españoles (11 %) cuando hay personas que en el trabajo llevan ropa demasiado sugerente. España en este dato coincide con países como Reino Unido, Nueva Zelanda, Holanda, Italia, Irlanda, India o Singapur, al parecer vestir de una forma adecuada y recatada para trabajar es una de las mejores cartas de presentación en la mayoría de los países encuestados.

Según el estudio, a los españoles también les molestan el envío de correos electrónicos carentes de importancia. Las tres manías más comunes entre los empleados españoles son: la falta de compromiso que muestran los profesionales con sus obligaciones, las personas que se quejan constantemente y las reuniones que muchas veces empiezan tarde y muy a menudo se alargan innecesariamente.

¿Cuáles son las manías más comunes de los españoles en sus puestos de trabajo? Para saberlo, la red profesional LinkedIn hizo una encuesta en 16 países (España, EE. UU., Australia, Brasil, Canadá, Francia, Alemania, India, Irlanda, Italia, Japón, Países Bajos, Nueva Zelanda, Reino Unido, Suecia y Singapur) para saber qué manías eran las más comunes en su día a día de trabajo. En total, participaron más de 17.000 profesionales, 17.653 para ser exactos. Los candidatos recibieron la encuesta por correo electrónico y las respuestas eran totalmente voluntarias.

Las manías pueden ser culturales

El estudio ha revelado unas características globales comunes en todos los países participantes. Por ejemplo, el 78 % de los encuestados ha señalado que lo que más les molesta es cuando hay compañeros que no se hacen responsables de sus actos, es decir, que actúan sin tomar en cuenta que están rodeados de otras personas y que sus actos u omisiones repercuten directamente en ellos. No obstante, la encuesta muestra también diferencias interesantes entre países y culturas. India, por ejemplo, es el país con trabajadores con más manías, mientras que Italia es el país con menos maniáticos.

Algunos otros resultados interesantes por países son los siguientes:

• Al igual que los españoles, los holandeses y los suecos odian aquellas personas que se quejan constantemente

• Los alemanes se sienten molestos por la suciedad de las zonas comunes
• Los franceses no soportan aquellas personas que llevan, según ellos, perfume en exceso
• Los indios reaccionan de forma negativa a los tonos de llamada irritantes o graciosos de los teléfonos móviles
• Los japoneses no soportan las bromas en el lugar de trabajo

Tatuajes y piercings en el trabajo, ¿están bien vistos?

Para el 34 % de los españoles tener un piercing o tatuaje puede ser negativo al presentarse frente a una empresa. Y es que las palabras no son la única forma de comunicarnos, muchas veces aquello que no decimos habla más que mil palabras, de ahí la importancia de cuidar todos los tipos de lenguajes a la hora de enfrentar una entrevista de trabajo. Cuando se forma parte de una compañía, es importante tener un aspecto cuidado, estar siempre bien peinados y correctamente vestido, aunque sin llamar excesivamente la atención. El maquillaje en abundancia, así como el perfume, mejor dejarlo en casa, nunca será bien visto. ¿Pero que pasa específicamente con los tatuajes, piercing y el resto de los complementos que muchos llevan en su cuerpo como algo permanente?

El portal Trabajando España realizó una encuesta a más de 2.500 españoles para descubrir qué opinan de la imagen personal dentro de la empresa, cómo de importante es donde trabajan y si lo consideran algo relevante para el desempeño de las tareas diarias. En primera instancia, el 83 % de los encuestados aseguraron que la imagen personal es importante en el trabajo y que hay que cuidarla en todo momento, el 13 % dijo que no, apuntando a que lo más importante es desempeñar bien las funciones del puesto y el 4 % dijo que sí, aunque sólo en los procesos de selección previos al puesto.

¿Creen los españoles que llevar complementos como piercing o tatuajes pueden influir negativamente para acceder al mundo laboral o a determinados puestos de responsabilidad? El 56 % señaló que para determinados puestos a veces, pero no para todos, el 34 % dijo que sí, porque denota valores negativos y el 10 % no, porque no tiene que influir la imagen con el rendimiento.

Del 15 % que sí tiene en su cuerpo alguno de esos complementos, el 66 % dijo que durante su horario de trabajo o al momento de presentarse a una entrevista personal, actúa con total normalidad porque no debe influir en nada, el 20 % en algunas situciones específicas intenta disimular, como en reuniones, entrevistas, presentaciones, etc. Y por último, el 14 % los intenta esconder para no incomodar a la gente.

Normas en el trabajo
En el 45 % de las empresas españolas donde trabajan aquellos que sí tienen algun piercing o tatuaje, no existen protocolos a la hora de vestir, el 42 % sí lo tiene, aunque no explícitos y el faltante 13 % de éstas, sí tiene protocolo y además aparece en los estatutos.

El 78 % de los españoles que llevan alguno de estos complementos, creen que sí influye la comodidad en la vestimenta a la hora de trabajar, puesto que cuanto más cómodo mejor, mientras que el 22 % piensa que no influye.

En el 47 % de las empresas donde trabajan aquellos encuestados que no tienen ningún complemeto en su cuerpo, hay estrablecidos ciertos protocolos a la hora de vestirse, aunque éstos no son explícitos, en un 31 % no existe ninguno, y finalmente en el 22 % restante sí existe y además aparece en los estatutos.

Para ellos la comodidad es prioridad a la hora de trabajar, así lo dejó en claro el 78 % que señaló que la comodidad influye en la vestimenta a la hora de trabajar, mientras que el 22 % no cree que influya.

La imagen y actitud corporal que proyectamos es muy importante. Con lo visual comunicamos de manera inconsciente, por lo que es lo más sincero que uno puede presentar. Cada detalle de lo que llevamos con nosotros tiene un significado que será tenido en cuenta por el entrevistador” agrega Javier Caparrós, director de Trabajando España.

Los profesionales deben diferenciarse del resto construyendo su imagen personal en Internet

Las redes sociales juegan un papel fundamental, tanto a la hora de construir nuestra marca personal como a la hora de identificar profesionales en los procesos de búsqueda. Según Catenon, multinacional española de base tecnológica dedicada a la búsqueda global de talento, en Europa un 20 % de los puestos de trabajo se consiguen a través de las redes profesionales en Internet, que se utilizan ya en el 80 % de los procesos de búsqueda.

Guido Bormann, Director General en Alemania, Turquía, Polonia y Dinamarca de Catenon, lo resume claramente: “Actualmente, un profesional compite en un proceso de búsqueda con profesionales de cualquier otra parte del mundo. Se ha ampliado el espectro de competencia, por lo que es necesario invertir en una marca personal que cree valor de cara a los empleadores y nos diferencie. Por ello, limitarse a un teléfono y una base de datos de CV’s, ha dejado de aportar valor. En Catenon utilizamos herramientas tecnológicas para acceder a información que complete el perfil del profesional a través de información disponible en la red, como KM Crawler©, una araña propia que rastrea internet; así, nuestros consultores se sumergen en toda la identidad digital de un candidato para evaluarlo en función de sus contenidos: su perfil en LinkedIn, en Twitter, su blog cuando lo tiene, participación en medios, en foros…”.

El auge del tiempo real favorece a los profesionales con mejor marca personal

La velocidad a la que accedemos a la información de cualquier persona en cualquier lugar del mundo, prácticamente en tiempo real, y la necesidad de contar con los mejores profesionales, procedan del lugar que sea, convierte a la marca personal en un valor diferencial como nunca hasta ahora en la historia.

No sólo competimos con los profesionales locales, sino que ahora lo hacemos con los más de 450 millones de curriculums que Google tiene indexados. De hecho, un 64 % de los procesos requieren de la búsqueda de profesionales en, al menos, tres países en paralelo. Por ello, más que nunca, los profesionales deben diferenciarse del resto construyendo su imagen personal en Internet. De hecho, el 68 % usuarios pertenecientes a la Generación Y, nacidos a partir de 1982, buscan trabajo a través de la Red.

Los españoles cada vez tienen más claro que el mercado laboral se ha globalizado. El número de españoles trabajando en todo el mundo es cada vez mayor y ya hay más de 900.000, siendo América (57 %) y países europeos (40 %) los lugares por los que más trabajadores han decidido apostar, según dlos últimos datos publicados por el INE. Sin embargo, se aprecia un incremento notable en países asiáticos, como en China, donde trabajan cerca de 2.000 españoles y más 1.000 estudiantes se matricularon en sus universidades en 2010.

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