Fontanería, cristalería y pintura son los problemas más habituales en las casas de verano
El mantenimiento de la casa de verano durante todo el año o dejarla bien preparada antes de marcharse puede ahorrar una media de 150 euros en averías que de otro modo toca reparar durante las vacaciones. Los problemas de fontanería, cristalería y pintura son los más frecuentes durante los meses estivales. Le siguen los problemas de albañilería, carpintería de madera y electricidad. Las deficiencias en las instalaciones terminan pasando factura, y por ello se debe poner especial atención en su mantenimiento. Así que a la hora de irte de vacaciones con la toalla y el bronceador no te olvides de la caja de herramientas.
Según los datos estadísticos de la empresa HomeServe, durante los meses de verano aumentan las incidencias y reparaciones en las viviendas costeras de los destinos vacacionales. Y es que cada año, cuando abrimos la puerta de la “casa de verano” para disfrutar de nuestros días de descanso, nos podemos encontrar con que la falta de cuidado y mantenimiento de los equipos electrónicos, electrodomésticos, tuberías o termos durante el invierno ha originado desperfectos que toca reparar de inmediato. Un gasto inesperado que nos pilla de sorpresa y que puede suponernos un sobrecoste de 150 euros al presupuesto de las vacaciones.
De hecho, en el periodo estival se realizan el 22,75 % de las reparaciones del año. En función del númerode hogares, la provincia en la que existe un mayor número de incidencias es Tarragona, con 11,15 reparaciones por cada mil hogares. Le siguen Barcelona (11,13), Alicante (7,78), Cádiz (7,77), Vizcaya (7,58), Málaga (6,64) y Valencia (4,99).
Recomendaciones antes de abandonar la casa de vacaciones
Es aconsejable que antes de dejar la casa cerrada hasta las próximas vacaciones, se revisen los básicos, como el goteo de los grifos, los atranques en las tuberías, el funcionamiento del cuadro eléctrico y la red de detección de incendios, el estado de los cristales, puertas y ventanas o cualquier tipo de problema que pueda originar averías en los electrodomésticos.
Y no sólo por tranquilidad, sino también por el coste que puede ocasionar. Si no se revisa ese grifo que gotea, se están consumiendo al día hasta 30 litros de agua y si existiera alguna fuga o inundación, además de la pérdida del agua se incurriría en otros costes como pintar una mancha en la pared que puede llegar a costar una media de 60 euros. La cisterna es otro de los mecanismos más propensos a generar averías, y si no se detecta que pierde agua, podría generar grandes pérdidas de agua y renovarla costaría en torno a unos 115 euros.
Apagar los aparatos electrónicos
Tampoco hay que olvidarse de los aparatos electrónicos, que si se dejan enchufados pueden sufrir averías por subidas de tensión, además de incrementar un 5 % el consumo energético del hogar cuando permanecen en modo stand-by. El mantenimiento de “la casa de verano” durante el invierno evita sorpresas durante las vacaciones y puede ahorrar una media de 150 euros Coger los problemas a tiempo puede evitar que las incidencias se conviertan en problemas de mayor gravedad y coste. Por ello es recomendable mantener la residencia de vacaciones en correcto estado durante todo el año, acudiendo al especialista desde el primer momento que se nota cualquier desperfecto. Para solucionar este tipo de averías y que no nos supongan un gasto inesperado, es recomendable estar protegidos con algún tipo de contrato del hogar.