Este Black Friday se comprará menos, excepto en ropa y productos de belleza por el fenómeno lipstick
El gasto que van a hacer los españoles durante las compras del Black Friday en 2023 va a ser, de forma generalizada, menor que en campañas anteriores. Así se desprende de los datos de un informe elaborado por la plataforma de solución logística Packlink. En datos, el 37 % de los encuestados ha afirmado que va a reducir su consumo durante esta campaña de rebajas y, como consecuente, durante las compras de Navidad.
Aunque se trata de una tendencia general, hay sectores, como el bricolaje, jardinería y la tecnología, que salen más afectados. Mientras que otros, como la categoría de belleza y de moda, no salen tan perjudicados. ¿Los motivos? Se trata de un fenómeno social conocido como el efecto liptstick, que en la práctica, lleva a los usuarios a comprar productos que les ayudan a mantener alta su autoestima en situaciones de mayor complejidad económica y social.
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Los productos que menos se van a comprar este Black Friday
Las cifras recogidas por Packlink señalan que el 37 % de los hogares va a reducir su consumo durante la campaña de Black Friday y las compras de Navidad. Y, de forma más específica, el 13 % señala que gastará mucho menos que el año pasado en estas mismas fechas.
Por sectores, los gastos que más van a recortarse son las compras de productos de bricolaje y jardinería en el 48 % de los casos, en juguetes y juegos en el 45 % y en electrónica según el 44 % de los encuestados. Llama la atención que precisamente esta es una de las categorías de productos donde los consumidores más aprovechan a comprar en rebajas para ahorrar.
El efecto Lipstick mantiene el consumo en las compras de belleza y moda
A pesar de esta tendencia, el estudio detalla que se está produciendo el fenómeno liptstick mediante el que los usuarios afirman que no van a reducir sus compras en determinados productos de las categorías de belleza y de moda. Una tendencia que parece que sigue en auge tras la llegada de la pandemia y cuyos datos lo avalan. El estudio detalla que las categorías que menos van a sufrir este impacto son la de belleza con el 35 % y de ropa con el 36 %, que logran amortiguar la caída en el consumo.
Este fenómeno social se vio por primera vez durante la Segunda Guerra Mundial con un producto tan básico como el pintalabios. Se trata de un comportamiento que implica que en etapas más complicadas y de dificultades económicas, los consumidores sí incrementan el gasto en pequeños objetos que les ayuda a mantener su autoestima.