¿Es legal vivir en un barco en España?
Sí, en España es legal vivir en un barco. ¿Te gustaría tener una casa flotante con vistas al mar? ¿Y disfrutar de espectaculares amaneceres y atardeceres? Convertir este sueño en realidad es muy sencillo. Solamente necesitas comprar un barco y avisar a las autoridades competentes del puerto que esa embarcación tiene condición de vivienda.
De hecho, esta es una alternativa que cada vez está más de moda, puesto que ofrece grandes comodidades y una gran sensación de libertad, dos aspectos muy demandados tras la pandemia. Y, además, aunque convertir una embarcación en el domicilio habitual lleva asociado una serie de costas, en ciertas circunstancias, puede llegar a ser más barato que comprar una casa en tierra firme.
Contenido de la información:
¿Cualquier barco puede convertirse en una casa?
No. Esto es lo primero que hay que tener en cuenta. Para que una embarcación tenga condición de casa debe ajustarse a una serie de requisitos y, además, debe tener un equipamiento y cierto material de seguridad a bordo por precaución.
Tanto los requisitos técnicos como el tipo de material obligatorio dependen del municipio o puerto en el que quieras vivir. Por ello, es recomendable que antes de dar el paso consultes la normativa municipal al respecto de los barcos para vivir.
En cuanto a la embarcación, debe ajustarse a los criterios establecidos en materia de seguridad, puesto que debe garantizarse que no supone peligro alguno ni para el resto de personas ni para otros barcos.
Trámites obligatorios para vivir en un barco
De manera general, para vivir en un barco necesitas dos cosas:
- Embarcación. Al comprar el barco debes hacer frente al pago de impuestos correspondientes por la operación. Es recomendable que antes de formalizar esta compra tengas una plaza de amarre porque si no, no puedes dejar el barco en ningún lugar fijo.
- Amarre en el puerto. Estas plazas se alquilan y son como la plaza de aparcamiento del barco. Una vez la tengas, puedes dejar ahí tu embarcación. En algunas localidades, al tener el amarre fijo de un barco, las autoridades permiten que te empadrones en la embarcación.
Una vez tengas el barco y hayas alquilado la plaza donde vas a ubicar tu vivienda, debes avisar a las autoridades portuarias de que ese barco va a tener condición de domicilio habitual.
Este es un trámite indispensable porque los organismos competentes deben asegurarse de que el baro cumple con las condiciones necesarias en materia de seguridad para convertirse en una casa. Y de que está equipado correctamente y cuenta con todas las licencias y los papeles en regla.
Si las autoridades te dan el visto bueno, ya tendrías todo en regla para vivir en tu barco. Eso sí, si tu intención es salir a navegar, no te olvides de que hace falta una licencia necesaria para ello.
Cuánto cuesta vivir en un barco
La inversión total de convertir un barco en una vivienda se compone de distintas partidas de gasto. Para empezar, el gasto más elevado es la compra del barco.
La horquilla de precios de un barco es amplísima, puesto que depende del tipo de embarcación y del tamaño de eslora que quieras. Los hay desde 15.000 euros hasta aquellos que superan los 100.000 euros.
En cuanto a la elección del barco, si lo vas a convertir en una vivienda, hay que tener en cuenta el tamaño para no quedarse corto de espacio. Es probable que en una embarcación siempre dispongas de algo menos de espacio en el interior que en una casa o piso, pero ofrece otras muchas ventajas que son las que incentivan usar este medio como casa.
A esta inversión inicial hay que sumarle otros gastos, como por ejemplo el alquiler del amarre. Esto es la plaza de aparcamiento del barco. La cantidad, que debe pagarse cada mes, depende del puerto en el que quieras vivir y del tamaño de tu barco. La horquilla puede variar entre los 300 hasta los 1.000 euros al mes.
Por otra parte, también hay que tener en cuenta los gastos en combustible o los costes que supone sacarse las licencias para poder navegar y conducir el barco. Y aquellos gastos relativos a las reparaciones que necesites hacer en el barco.
Como en toda compraventa de un inmueble, hay que pagar una serie de impuestos asociados, como el IVA, ITP o el Impuesto de Matriculación del barco.
En resumen, es imposible determinar un coste medio de vivir en un barco, porque entran en juegos muchos factores difíciles de contabilizar como el presupuesto de compra del barco, el gasto de combustible o el alquiler del amarre. Por este mismo motivo, si no vas a buscar una opción con todos los lujos, puede que vivir en un barco sea más barata que comprar un piso, puesto que el coste de una embarcación de tamaño medio es mucho más barata que una vivienda. Aunque todo ello depende de muchos factores externos.
Ventajas y desventajas de vivir en un barco
¿Alguna vez has pensado en cómo sería vivir en un barco? El olor del mar, la brisa, los amaneceres y puestas de sol, la paz y tranquilidad. Todos estos momentos son los que pueden disfrutar las personas que viven en un barco.
A ello se suma la libertad de movimiento total. Cada vez que quieras, puedes soltar el amarre y darte una vuelta en barco. Otra de las ventajas es que esta es una opción que puede ser algo más económica para independizarse que un piso. Todo depende del tipo de barco y la ubicación, pero ten en cuenta que en estos casos la compra de un barco suele ser algo más económica que la de una casa.
En cuanto a las desventajas, es evidente que, a no ser que compres un barco enorme, el tamaño siempre va a ser menor que en una vivienda. En estos casos, ante un barco de tamaño medio, se sacrifica en parte el espacio de una casa grande en busca de una mayor libertad, calma y tranquilidad.
Por otra parte, no es una alternativa viable para las personas que se marean fácilmente con el oleaje. Puede que al principio sea algo incómodo y molesto este meneo constante, aunque acabas acostumbrándote.