Empatiza con el comprador a la hora de vender tu casa y haz lo que te gustaría ver a ti
Detalles como el orden, la limpieza o un cambio de pintura pueden significar la diferencia entre cerrar una venta o dejar escapar un comprador. “Dedicar algo de tiempo y dinero a reformar la vivienda a vender es vital. Si un posible comprador ve la casa en mal estado, puede exigir rebajas de varios miles de euros, que nos podemos ahorrar si la presentamos con su mejor aspecto”, según Luis Sancho, director general de Tenders.es. A continuación te mostramos algunos trucos para hacer más atractiva tu casa, antes de venderla.
Después de mucho pensarlo, has tomado la decisión de vender tu casa. Ahora hay que armarse de paciencia y empezar con el proceso de venta. Así, tanto si decides hacerlo directamente como a través de un intermediario, las visitas a la vivienda de los posibles compradores serán inevitables. Uno tras otro irán llegando para evaluar cada uno de los detalles del inmueble, detectar desperfectos y hacer millones de preguntas antes de tomar una decisión.
La complejidad que conlleva todo este proceso debe asumirse con tranquilidad y teniendo en cuenta desde el principio qué es lo que quieres conseguir. Si la meta es vender tu casa en el menor tiempo posible y al mejor precio, tendrás que invertir un poco más de trabajo y dinero en mejorar su apariencia. Para Luis Sancho, director general de Tenders.es, plataforma online que permite solicitar y comparar presupuestos de reformas de forma gratuita, “dedicar algo de tiempo y dinero a reformar la vivienda a vender es vital. Aunque a algunos se lo parezca, no es una locura reformar la casa que vas a vender, porque es un dinero invertido que recuperamos con creces. Si un posible comprador ve la casa en mal estado, puede exigir rebajas de varios miles de euros, que nos podemos ahorrar si la presentamos con su mejor aspecto”.
Para vender tu casa con éxito, el primer paso es ponerte en el papel del comprador y pensar qué detalles lo motivarían o no a decidirse a comprar una futura vivienda. Está claro que hay aspectos estructurales, como el espacio, la cantidad de habitaciones o la luz, que juegan un papel fundamental en la decisión de compra y sobre los que difícilmente podemos incidir. Sin embargo hay otros factores, igual de importantes, que está en nuestras manos cambiar y que pueden hacer mucho por la imagen de la casa que ponemos en venta.
Y es que dar una buena imagen y sacar el mejor provecho del espacio disponible siempre va a facilitar la venta. No se trata de ocultar los defectos de un inmueble, sino de potenciar sus puntos fuertes. Una vivienda en buen estado en el que no se encuentren grietas, tuberías estropeadas, puertas y ventanas deterioradas, goteras o humedades dejará una grata sensación en el futuro comprador y permitirá que centre su atención en los aspectos positivos.
Los expertos de Tenders.es te ofrecen una serie de consejos para que, con pequeñas mejoras y prestando atención a los detalles, logres potenciar la imagen de tu casa como un lugar acogedor donde vivir antes de ponerla en venta.
· Superficies y exteriores: pintar las paredes interiores y exteriores de la vivienda le dará una mejor apariencia. En el interior de la casa es recomendable usar el color blanco u otros tonos claros para conservar una buena iluminación. Las superficies en madera, mármol u otros materiales pueden revitalizarse con poco dinero gracias a la gran variedad de productos que hay en el mercado y que, además, son muy fáciles de utilizar. Además, de las paredes, debemos revisar el revestimiento y la apariencia de las cercas, el patio, la terraza, las superficies de la cocina, los baños, el ático y el sótano (si se trata de una vivienda unifamiliar).
· Limpieza: antes de mostrar la casa a los futuros compradores, hay que realizar una limpieza profunda de toda la casa y tener especial cuidado con la cocina y los baños, pues suelen ser puntos críticos a la hora de dar una buena impresión a los compradores. Si tienes mascotas o hay fumadores en casa, debes prestar atención a los olores, ventilar la casa, utilizar fragancias aromatizantes y limpiar cuidadosamente las zonas donde se concentran los malos olores. La limpieza crea un ambiente acogedor y ensalza el valor de la propiedad, mientras que la suciedad hace que el comprador se replantee siempre el precio.
· Orden: es importante que los compradores vean la casa ordenada, esto les ayudará a tener una mejor impresión de los espacios. Deja a la vista sólo aquello que forma parte de la decoración, evita las pilas de periódicos y revistas, la ropa tirada de cualquier manera, los platos y vasos sucios o por en medio… Si existen muebles que dificultan la movilidad, reubícalos para crear espacios más amplios, agradables y transitables.
· La entrada: el hall será lo primero que vea el comprador cuando haga una visita, así que es un punto clave. Debe estar limpio y ser muy acogedor. Para conseguirlo, no dudes en pintar la puerta, si es necesario, reemplazar las cerraduras y los pomos, renovar los números de la casa, instalar lámparas nuevas, disponer un florero o una porcelana decorativa si tienes un mueble en la entrada y reparar los desperfectos.
· El jardín: si tienes jardín, saca tiempo para cuidar de él. Arregla el césped, deshazte de las malezas, poda bien los arbustos, cuida las flores y adecenta las áreas donde se puede acumular agua o basura. Un jardín bien cuidado causará muy buena impresión y revalorizará tu vivienda; un jardín descuidado y lleno de maleza sólo ayudará a empobrecer la primera impresión del comprador.
· Detalles que cuentan: hay que prestar especial atención a imperfecciones notorias como una pared con manchas o la pintura descascarillada, puertas opacas, espejos sin brillo o rotos, grifos que no cierran por completo o superficies a las que les falta una baldosa. Con sólo invertir algo de dinero en estas pequeñas reparaciones, te verás recompensado con la buena imagen que tu casa dejará en los posibles compradores.