El Gobierno y los sindicatos acuerdan la subida de 50 euros del SMI a 1.184 euros mensuales
La subida del Salario Mínimo Profesional (SMI) ya es una realidad. El Consejo de Ministros ha aprobado, a propuesta del Ministerio de Trabajo y Economía Social, el Real Decreto por el que se fija el Salario Mínimo Interprofesional para 2025. Esta retribución básica se sitúa, con la subida aprobada en 1.184 euros mensuales en 14 pagas. Supone, por tanto, una percepción de 700 euros anuales más que la establecida en la cuantía anterior.
Esta subida de 50 euros beneficiará a millones de trabajadores. Además, los trabajadores solteros y sin hijos que reciban el SMI deberán tributar por el tramo del 19 % la parte que comprenda el salario antes de la subida del SMI y con el 24 % la parte correspondiente a la subida. Anteriormente, al estar por debajo de los 15.876 euros anuales estaban exentos. En total, unos 500.000 empleados se verán afectados, según la Comisión de Expertos del SMI en su último informe. Estos eberán declarar 300,03 euros anuales en concepto de IRPF o, lo que es lo mismo, aproximadamente 25 euros al mes.
Eso sí, este aumento salarial se produce en un contexto de ajustes fiscales, como la eliminación de algunos descuentos en el IVA de alimentos y electricidad y la entrada en vigor de la cuota de solidaridad.
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Detalles del aumento del SMI para 2025
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, junto con los líderes de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, respectivamente, han firmado el acuerdo que establece el nuevo SMI en 1.184 euros al mes en 14 pagas, lo que equivale a 16.576 euros brutos anuales. Este incremento de 50 euros mensuales respecto al año anterior representa una subida del 4,4 %. Desde el año 2018 la revalorización acumulada del SMI representa casi un 61 %.
Se estima que alrededor de 2,5 millones de trabajadores se verán beneficiados por este aumento del SMI, especialmente aquellos en sectores como la agricultura, la hostelería y el comercio. El perfil más común de los beneficiarios incluye a mujeres, jóvenes y empleados con contratos temporales.
Cuándo se aplicará la subida
La subida del SMI tendrá carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2025. Esto significa que los trabajadores comenzarán a percibir el aumento en sus nóminas a partir de febrero, incluyendo los atrasos correspondientes al mes de enero.
Antes, esta medida deberá ser aprobada formalmente en el Consejo de Ministros que se celebra hoy martes 11 de febrero.
Incrementos en impuestos y tasas
Como hemos mencionado anteriormente, esta subida del SMI en 2025 acontece en un contexto en el que también se han anunciado varios incrementos en impuestos que afectarán de forma directa a los consumidores.
Por ejemplo, el IVA aplicado a la factura de la luz volverá al 21 % tras haber estado reducido al 10 % durante la crisis energética. También hay que decir adiós a la reducción temporal que hubo en el IVA de productos esenciales, como el pan, leche, huevos, frutas y verduras. Estos pasarán del 0 % a tributar el 4 %.
A partir de abril de 2025, todos los ayuntamientos deberán aplicar una tasa obligatoria para la recogida y gestión de residuos urbanos, estimada entre 165 y 200 euros anuales por hogar.
Por otro lado, el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) es una contribución adicional que se aplica a las nóminas de los trabajadores con el objetivo de reforzar la sostenibilidad del sistema de pensiones. Aunque no se han detallado cambios específicos en el MEI para 2025, es importante que los trabajadores estén atentos a posibles ajustes que puedan afectar a sus aportaciones y, por ende, a su salario neto.
Cómo afecta la subida del SMI al subsidio para mayores de 52 años
El incremento del SMI también influye en el subsidio para desempleados mayores de 52 años, ya que la cuantía de este subsidio está vinculada al SMI. Con la nueva subida, es previsible que el subsidio experimente un aumento proporcional, mejorando así la protección económica de este colectivo.
Con la subida del SMI de 1.134 a 1.184 euros mensuales, la base mínima de cotización pasará de 1.653,75 euros a 1.726,66 euros. Esto se traduce en una mejora en la futura pensión de jubilación de los beneficiarios, ya que al cotizar sobre una base mayor, las prestaciones que reciban en el futuro serán más altas.
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