El ESC, tres letras que pueden salvar 600 vidas en la carretera

El ESC (Control Electrónico de Estabilidad) salvaría hasta 600 vidas al año en España si todos los vehículos lo llevaran incorporado de serie. El RACC lanza la campaña ¡Exija ESC!, protagonizada por Pedro Martínez de la Rosa.

RACC Automóvil Club, entidad líder en el ámbito de la movilidad en España con más de un millón de socios, siguiendo con su línea de fomentar la seguridad vial y reducir la accidentalidad en carretera, ha presentado, con la colaboración de Robert Bosch España, la campaña ¡Exija ESC!, protagonizada por Pedro Martínez de la Rosa que tiene como objetivo alcanzar un 100 % de implantación de este sistema de seguridad en los coches nuevos en España en los próximos 2 años. Se da la circunstancia que, si en plazo de dos años, el uso del ESC no está generalizado en todos los vehículos europeos, la UE tiene previsto aprobar una directiva europea que obligue a los fabricantes a su implantación.

Las cifras no engañan. Diversos estudios demuestran que la tecnología ESC reduce el riesgo de accidente en condiciones de humedad y hielo hasta un 40 %, mientras que el control de estabilidad también puede reducir los accidentes por derrape en un 80 %. Si todos los vehículos contaran con este sistema de seguridad, los muertos por accidente de carretera disminuirían. Se contribuiría, de este modo, a reducir el índice de siniestralidad, que sigue siendo una de las lacras de nuestra sociedad. En España, por ejemplo, según datos de 2005, si el 100 % de los vehículos estuvieran equipados de serie con ESC se habrían producido 600 muertos menos. También habría sido más bajo el número de heridos graves (1.067) y el de personas con lesiones menores por haberse visto involucradas en un accidente de tráfico (2.971), reduciéndose el total de víctimas en 4.136 personas.

Las estadísticas, en cambio, muestran que los vehículos que cuentan con ESC siguen siendo una minoría, a pesar de que, poco a poco, se va introduciendo en los nuevos modelos que aparecen en el mercado. A pesar de ello, aún hoy la disponibilidad del ESC en un mismo modelo varía en función del país en el que haya sido adquirido, algo que no hace más que acentuar las diferencias existentes de un estado a otro y poner en una situación de desigualdad a unos conductores respecto a los otros.

En España un 63 % de los vehículos tienen incorporado de serie el ESC, lo que ya indica un potencial margen de mejora en nuestro país. Se estima que apenas un 15 % del total del parque automovilístico en España lleva incorporado el ESC. Los utilitarios pequeños son los vehículos donde el potencial de mejora es mayor.

Tres letras que te pueden salvar la vida
El ESC ha sido descrito por la U.S. National Highway Traffic Safety Authority (NHTSA) como la tecnología de seguridad con el mayor potencial de salvar vidas desde el cinturón de seguridad. Además, este mismo organismo ha instado a través de una directiva a que todos los vehículos norteamericanos incorporen el ESC de serie a partir del 2012, algo que en el caso de Europa no sucede aún, a pesar de que esta tecnología ha sido creada en Europa. La Comisión Europea también trabaja para que todos los vehículos producidos en sus fronteras salgan equipados con el ESC de serie, aunque no ha previsto una regulación específica a corto plazo. Antes de dar este paso, su objetivo es que incremente la demanda del ESC concienciando al usuario final del vehículo sobre la importancia de conducir un vehículo que esté dotado de elementos de seguridad activa de este tipo.

La campaña ¡Exija ESC! con Pedro Martínez de la Rosa
El RACC quiere contribuir a la concienciación del usuario y para ello ha contado con la colaboración del piloto de F1 Pedro Martínez de la Rosa, que protagoniza, junto con Max Mosley, presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), y del expiloto de F1 Michael Schumacher, un vídeo con consejos directos al usuario con el objetivo de contribuir a salvar vidas e informar al usuario de la importante aportación que nuevas tecnologías como el ESC pueden hacer para aumentar la seguridad de sus vehículos. De hecho en la Unión Europea cada año mueren más de 40.000 personas y más de un millón sufren heridas de diferente consideración por accidentes de tráfico. La pérdida del control del vehículo es una de las principales causas de los siniestros, de ahí que el ESC se haya convertido en una de las tecnologías de e-safety más prometedoras del mercado y uno de los principales puntos de apoyo de la meta que en 2001 marcó la UE para reducir a la mitad el número de víctimas en carretera antes del 2010.

En esta misma línea el pasado mes de mayo se puso en marcha en Roma la campaña ¡Choose ESC! Esta iniciativa europea, de la que RACC Automóvil Club actúa como difusor en España, está impulsada por la Comisión Europea y por el consorcio Euro NCAP y cuenta con el apoyo de los principales Automóvil Club del viejo continente.

500.000 trípticos informativos del ESC
§ La campaña ¡Exija ESC! está protagonizada por el piloto de F1, Pedro Martínez de la Rosa que aconseja al usuario incorporar esta tecnología de seguridad activa en el momento de la compra de un nuevo vehículo.

§ El objetivo es alcanzar el 100 % de la implantación de dicho sistema en los coches nuevos en España en los próximos 2 años

Informar al usuario, la prioridad
Según los resultados de las últimas encuestas Safety-technopro y CVIS, en las que ha participado el RACC, un 72,1 % de los conductores españoles estarían dispuestos a aprender y formarse a cerca de qué aportaciones pueden hacer los sistemas e-safety para llevar a cabo una conducción mucho más segura. En este sentido, el 63 % de los españoles conocen el sistema ESC, pero reclaman más información en el momento de efectuar la compra de un vehículo. Otro dato destacable es que los conductores españoles escogen la seguridad como la principal prioridad a la hora de comprar un coche nuevo (86,20 %), seguida del precio, como segundo factor en importancia, la fiabilidad, el consumo de carburante y el confort.

El sistema ESC
El ESC es una tecnología que evita la pérdida de trayectoria del vehículo en caso de maniobras bruscas. Su funcionamiento se basa en una serie de sensores que, colocados sobre las ruedas, ejercen control sobre la dirección del vehículo. Si el automóvil se sale de su trayectoria, el ESC actúa sobre el sistema de frenos y sobre el motor para, si es necesario, interrumpir el flujo de combustible del vehículo. Así evita que la velocidad aumente y hace posible una corrección automática de la trayectoria del vehículo hacia la dirección deseada. Además, facilita la conducción en situaciones extremas (lluvia, hielo en el pavimento, etc. ).

Noticias » Coches » Motor » El ESC, tres letras que pueden salvar 600 vidas en la carretera