Diez pasos prácticos para fidelizar a los empleados
La amenaza o realidad de un expediente regulador, junto con la congelación o reducción salarial, ha provocado que muchos trabajadores enfoquen sus esfuerzos en considerar un futuro a corto plazo en detrimento del interés por la prosperidad de la empresa a largo plazo. Para funcionar de forma óptima y obtener una ventaja competitiva cuando la situación económica se normalice, las empresas necesitan reestablecer el compromiso de sus empleados con el negocio. Por eso explicamos diez medidas prácticas para renovar el compromiso de los empleados con la empresa.
La consultora Watson Wyatt sugiere 10 medidas prácticas para renovar el compromiso de los empleados con el negocio. Estas implican un compromiso por parte de los empleadores que pasa por centrarse en una serie de prioridades fundamentales para conseguir afianzar la estabilidad organizativa en la que se sustenta la empresa y asegurar de esta forma que las estructuras, estrategias, sistemas y cultura corporativa se posicionen para obtener el máximo rendimiento.
1. Crear una estructura organizativa y arquitectura de puestos transparente, eficaz y eficiente que permita a todos los profesionales conocer cuál es su papel y cómo contribuyen al éxito de la compañía.
2. Clarificar y plantear con honestidad qué es lo que la empresa puede ofrecer laboralmente, aún en las áridas circunstancias del mercado con las actuales tasas de desempleo. Ésta es la clave de éxito en la atracción, retención y compromiso del talento.
3. Revisión de la remuneración de directivos para lograr un equilibrio óptimo en línea con el interés de los accionistas y la generación de valor para el negocio, considerando criterios de eficacia en materia de riesgo, rendimiento y fidelización.
4. Revisar regularmente los elementos de compensación de su fuerza de ventas para asegurar que los planes de incentivos están alineados con las nuevas prioridades de negocio y obtener el máximo rendimiento a coste óptimo.
5. Revisar los mecanismos de gestión del rendimiento para asegurarse de que reflejan fielmente la nueva realidad corporativa y de que son eficaces en la motivación del talento clave.
6. Identificar al talento de su organización a fin de asegurar la continuidad de aquellos que en mayor medida contribuirán al crecimiento del negocio a largo plazo.
7. Asegurar la retribución de altos rendimientos (excepcionales). Conseguir que sea una realidad que garantice su capacidad de gestión ante cualquier situación económica.
8. Asegurarse de que la dirección de la empresa cuenta con excelentes sistemas de gestión de la información y fundamentar las decisiones en los hechos y el análisis, y no en las emociones y la retórica.
9. Asegurarse de comprender dónde residen las funciones y habilidades críticas. En tiempos de reajuste del negocio, las compañías bien pudieran tender a retener a buenas personas en lugar de a aquellos que desempeñan las funciones clave impulsoras del rendimiento futuro (top performers / high potentials).
10. Mantener un liderazgo visible y una comunicación abierta. Los profesionales de su organización deben conocer hacia dónde se dirige el negocio, lo que se espera de ellos y cómo se les va a recompensar. “La necesidad de realizar cambios importantes para adaptarse al nuevo entorno económico han alterado la configuración de las estructuras de organización y de los esquemas de remuneración”, afirma María Martín Hernández, directora de capital humano de Watson Wyatt, “pero aquellas compañías capaces de renovar el compromiso con sus empleados y de reorientar sus estructuras y procesos según los nuevos requerimientos del negocio se hallarán mejor posicionadas para aprovechar un clima económico más favorable cuando las circunstancias lo propicien”.