Descuento de pagarés, qué son y para qué valen
El descuento de pagarés es una forma de cobro muy extendida entre las empresas. ¿Conoces los beneficios que puede tener para tu negocio? Te explicamos todo lo que necesitas saber sobre el descuento de pagarés. ¡Toma nota!
Contenido de la información:
Descuento de pagarés: qué son
El descuento de pagarés es un contrato en el que una financiera o banco anticipa el cobro de una cantidad a una empresa antes de la fecha de vencimiento (con un interés y una comisión correspondiente). Por tanto, es un elemento que proporciona liquidez anticipada a las empresas para que puedan cobrar de forma inmediata sin esperar a la fecha de vencimiento.
Negociar pagarés es una manera de financiarse. Y lo habitual es que las empresas cobren su pagaré sin recurrir a este servicio para no tener que pagar intereses y comisiones, pero en ocasiones puntuales puede llegar a ser muy beneficioso. Por ejemplo, si se necesita disponer de liquidez para pagar las nóminas a los trabajadores o abonar lo debido a algunos proveedores.
No hay que confundir los descuentos de pagarés, de los cuales estamos explicando sus características en esta información, con un producto similar, los pagarés de empresa, donde solo intervienen empresas mediante un contrato para asegurar un pago y no intermedian los bancos.
Descuento de pagarés: tipos
Los descuentos de pagarés pueden ser de varios tipos en función de las posibilidades de cada caso.
Descuento de pagarés sin recurso
Con esta modalidad de pagaré, la empresa recibe la liquidez de forma inmediata y es la entidad financiera la que reclama el cobro a un tercero. Eso significa que, si llegada la fecha de vencimiento el emisor no paga, la financiera asume el impago. Además, en este caso la empresa obtiene liquidez al instante y permite mejorar sus ratios de balance.
Descuento de pagarés con recurso
Frente a la modalidad anterior, le empresa es la que asume el riesgo de impago, es decir, el descuento de pagaré le permite obtener la liquidez inmediata, pero si al llegar la fecha el emisor no paga, la empresa debe pagar ese importe a la entidad.
Descuento de pagarés a la orden
Significa que un pagaré puede transmitirse como endoso a un tercero, es decir, otra persona puede descontar pagarés sin problema en un banco o sociedad financiera. El pagador tendrá que hacer frente al pago bajo las mismas condiciones que haya pactado con su primer intermediario.
Descuento de pagarés no a la orden
Implica la prohibición expresa de endosar el pagaré a un tercero y, por tanto, no puede tener otro propietario.
Descuento de pagarés urgente
El descuento de pagaré urgente puede establecerse en cualquiera de las modalidades anteriores, puesto que se puede considerar un añadido de todas ellas. Es simplemente una forma de obtener liquidez de forma instantánea, en unas horas. Los trámites se agilizan y esto permite tomar decisiones necesarias e inmediatas como, por ejemplo, pagar las nóminas a los trabajadores o comprar material. Eso sí, hay que tener muy en cuenta el coste y las comisiones que conlleva este tipo de descuento.
Coste descuento pagarés: bancos y entidades financieras
A la hora de solicitar un descuento de pagarés, se puede recurrir a un banco o a una sociedad financiera. Los costes variarán en función de una u otra opción.
Los bancos cargan muchos costes adicionales comparado con las entidades de financiación, que solo aplican la tasa de descuento. De hecho, los bancos pueden aplicar hasta cuatro comisiones diferentes.
Además, si el pagaré se descuenta a través de un banco, afecta al CIRBE de la empresa, puesto que está exigido por ley a informar de las deudas bancarias incurridas por las distintas empresas.
Al margen de los costes, existen otras diferentes entre los bancos y las financieras.
Por un lado, los bancos suelen pedir garantías y realizan muchas comprobaciones antes de conceder un descuento de pagaré para garantizar que no existan impagos.
Las financieras normalmente solo realizan un estudio el emisor del pagaré y no de la empresa que lo recibe. Tampoco suelen pedir garantías y, por lo tanto, se trata de un proceso más rápido y sencillo. Si bien, los bancos aceptan un rango más amplio de empresas y ofrecen servicios complementarios.
El descuento de pagarés BBVA, por ejemplo, ofrece descuentos de pagarés para autónomos con posibilidades muy atractivas.
En cualquier caso, es importante sopesar las ventajas y desventajas de ambos para solicitar el descuento de pagarés donde más convenga.
Los pagarés del Santander no los cubre el Fondo de Garantía y no son recomendables
El Grupo Banco Santander ha anunciado su intención de emitir 20.000 millones de euros en pagarés correspondientes a su Programa de Emisión de Pagarés 2012. Se venderán a partir de 1.000 euros y se ofrecerán a ahorradores normales. El objetivo es claro: reforzar las necesidades financieras del grupo, e incluso atender los pagos de parte de los pagarés emitidos en 2011.
Son un producto que no interesa a los consumidores. Es el último reclamo para captar capital de la banca amparándosse en productos tóxicos.
Hace unos meses el Santander ya puso el anzuelo mediante la venta del ‘Depósito Pagarés’, un juego de palabras que le costó una denuncia de ADICAE ante el Banco de España. Ahora la entidad presidida por Emilio Botín ha lanzado en los últimos días dos emisiones directas de pagarés, que alcanzan nada más y nada menos que la cifra de 20.000 millones de euros. Una de ellas corresponde a Santander Consumer SA, por valor de 5.000 millones. La otra pertenece a Banco Santander, SA y el importe asciende a 15.000 millones de euros.
Los folletos de emisión depositados ante la CNMV dejan claro que, en ambos casos, estas emisiones están destinadas tanto a inversores cualificados como a pequeños ahorradores -clientes minoristas-, y que se podrán adquirir a partir de 1.000 euros. No queda fijada la rentabilidad, que fijarán las entidades colocadoras de la emisión.
Son un producto tóxico. Los ahorros no están garantizados
Los pagarés son un activo de renta fija y, por tanto, se negocian en el mercado secundario -aIAF-, que es muy poco líquido ya que ofrece pocas garantías de venta antes del vencimiento. Este mercado se ha hecho ‘famoso’ porque es en el que se negocia la compraventa de participaciones preferentes -los problemas para venderlas son por todos conocidos, como también las denuncias impulsadas por ADICAE-.
Y, aunque su venta fuera posible, nada garantiza que el precio final sea igual o superior al de la compra de los pagarés, por lo que el usuario puede perder dinero con la operación. El riesgo es muy importante. Además, desde que se da la orden de venta a la entidad financiera -colocadora-, pueden pasar semanas hasta que se ejecute. Existen, por lo tanto, muchísimas dificultades para que el banco busque una salida. Sin embargo, con los depósitos las entidades están obligadas a reembolsar el dinero cuando el cliente lo solicita, y las comisiones generadas nunca superarán los intereses.
Gastos vinculados a los pagarés
Hay que tener muy presentes los gastos vinculados a los pagarés. Aunque normalmente no llevan comisiones, sí suelen requerir la apertura de una cuenta corriente o una cuenta de valores y éstas pueden acarrearnos unas comisiones importantes, sobre todo en caso de querer vender los pagarés antes de su fecha de vencimiento. Las entidades financieras suelen aplicar comisiones de entre el 0’4 y el 1 % por cancelación anticipada de los pagarés, comisiones aplicadas sobre los días que resten para el vencimiento del pagaré.
Por si esto fuera poco, el tipo de interés nominal será concertado por emisor y tomador, estableciéndose de modo individual. La entidad financiera tratará, siempre, de ofrecer la menor rentabilidad posible, por lo que el cliente, además, deberá ‘negociar’ este aspecto tan fundamental en un producto financiero.