Cuánto cuesta montar un bar
Abrir un bar y tener éxito es un objetivo posible. Pero para conseguir los resultados deseados es necesario, antes que cualquier otra cosa, que te informes acerca de todos los requisitos y conozcas diversos aspectos, tales como los gastos iniciales que deberás asumir, los principales documentos obligatorios que necesitas y todos los aspectos a tener en cuenta que, en definitiva, son necesarios para abrir un bar. Apunta las mejores ideas, consejos y herramientas para alcanzar esta meta.
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Cuánto cuesta montar un bar
La normativa vigente para la apertura de un bar depende exclusivamente de las comunidades autónomas, y en última instancia, de los ayuntamientos correspondientes. Aunque estos trámites están bastante unificados en la actualidad, pueden existir algunas oscilaciones entre unos municipios y otros. En la siguiente lista, se presenta una breve aproximación de los que habitualmente suelen costar este tipo de trámites, aunque pueden aparecer variaciones:
- Proyecto de obra y apertura: entre 2.000 y 2.500 euros
- Licencia de obra: entre 200 y 500 euros
- Licencia de actividad: entre 1.400 y 2.100 euros
- Certificado de compatibilidad urbanística: entre 100 y 300 euros
En total, todos los trámites para montar un bar pueden situarse entre 3.700 y 5.400 euros aproximadamente. Sin embargo, esta cifra tan solo es una pequeña estimación que puede verse modificada notablemente según la localidad concreta y el proyecto específico.
Requisitos
Saber cómo montar un bar no es una tarea sencilla. A la hora de hacerlo, debes tener en cuenta los principales requisitos para no fracasar en el intento.
- Selecciona bien su ubicación: no importa si decides comprar un bar que ya existe para renovarlo o, por el contrario, piensas comenzar con esta aventura profesional desde cero, su localización es un factor esencial en el éxito. Debes tener un bar que sea fácilmente accesible para tus clientes y, sobre todo, que tenga visibilidad.
- La importancia de la calle: si quieres abrir un bar, debes ubicarlo en una avenida o calle muy transitada, a poder ser peatonal o en un centro comercial. Este tipo de negocios necesitan muchos clientes y si la gente pasa por delante de tu establecimiento, existen más posibilidades de que tenga una buena aceptación.
- El tamaño del bar: no te obsesiones con sus dimensiones, lo verdaderamente importante es que ajustes tus gastos en función de tus necesidades. En el futuro, si las cosas van bien, podrás ajustar el espacio a medida que el negocio vaya creciendo.
- La decoración del bar: es esencial que tus clientes se sientan a gusto en el interior del bar, tratando de crear un ambiente que incite a permanecer más tiempo y consumir más productos. Un truco para conseguir este objetivo es que diseñes un perfil muy detallado del público al que te quieres dirigir y decores el bar en función de sus preferencias.
- Piensa en lo que significa montar un bar: es una profesión bastante sacrificada que requiere de una inversión muy potente de tiempo en forma de horas. Tienes que tener muy clara cuál va a ser tu dedicación al negocio, y en función de eso, establecer tus propios horarios.
- Presta mucha atención al personal: los camareros de tu bar son una pieza clave para su éxito, puesto que de ellos depende, en gran medida, la posibilidad de marcar la diferencia respecto a la competencia. Es muy recomendable que el personal del bar tenga el mismo estilo y una edad similar a la de tus clientes.
- Define un buen proyecto de empresa: como en cualquier negocio, un bar también es cuestión de numerosos para determinar si es viable o no. Estos cálculos deben basarse en una estimación del número de gente que pasará por tu local, el precio medio de las consumiciones, el margen sobre las ventas y los costes fijos (personal, material, suministros…).
Trámites necesarios
Inicialmente, para poder montar un bar hay que tener en cuenta los mismos trámites que para abrir un negocio. No obstante, un bar presenta las particularidades propias de un establecimiento que está habilitado para servir alcohol. Entre los trámites necesarios se encuentran:
- Forma jurídica del bar: en España, el 65 % de los trabajadores que se encuentran al frente de un bar son empresarios individuales o autónomos. El 24 % son sociedades limitadas y el resto, cooperativos o sociedades colectivas.
- Arrendamiento o compra del local: aunque también resulta bastante habitual la modalidad de traspaso, que consiste en que un arrendatario cede su local a un tercero con el que objetivo de que comience a gestionar un negocio en marcha, con su cliente, equipo y maquinaria ya establecidos.
- Seguridad Social: alta en el RETA, comunicación de apertura del nuevo centro de trabajo e inscripción de la empresa, alta y afiliación de los trabajadores.
- Trámites en Hacienda: incluyendo la declaración central, la solicitud del CIF y el alta en el IAE.
- Autorización de instalación de máquinas recreativas: este proceso tiene que ser desarrollado por la misma empresa que presta el servicio e instala este tipo de máquinas.
- Carnet de manipulación de alimentos: todos los trabajadores de tu bar que estén en contacto directo con algún tipo de alimento deben contar con esta licencia, que es expedida por la Consejería de Sanidad y Consumo.
Licencias
Son varias las licencias para abrir un bar que existen, puesto que depende de cuál sea el planteamiento de negocio y su actividad principal. Algunas de las más comunes son:
- Licencia de obras: en este apartado se incluye la realización de obras de acondicionamiento y la mejora de locales. Si estas tareas no afectan a su estructura, su distribución o a su aspecto exterior, no resulta necesaria la obtención de este tipo de permiso.
- Licencia de funcionamiento: su objeto es autorizar el uso de los edificios, locales o instalaciones según diferentes parámetros urbanísticos, ambientales y de seguridad. Se tiene que solicitar en el Ayuntamiento correspondiente.
- Cambio de titularidad de la licencia: si buscas alquilar un local que tiene las licencias para el desarrollo de una o más actividades profesionales, debes solicitar en el Ayuntamiento correspondiente, mediante un acto comunicado, el cambio de titularidad de licencia.
- Autorización de apertura: la puesta en marcha de bares, cafeterías y restaurantes deben partir de una autorización firme de la Dirección General o Consejería de Turismo de la comunidad autónoma correspondiente.
- Licencia de terrazas: para poder ofrecer este servicio, debes aportar al Ayuntamiento algunos documentos, como la licencia de apertura y funcionamiento, junto a un plano a escala de la terraza que se pretende instalar, detallando todos los elementos de mobiliario urbano y sus dimensiones.
Estos son los cinco permisos para abrir un bar que tienes que conseguir de forma obligatoria.
Renovación de las licencias
Las licencias de actividad de un bar no caducan, puesto que son un documento personal e intransferible. Esto quiere decir que, si el local cambia de dueño, es necesario y obligatorio tramitar una nueva licencia de actividad. Por otro lado, la inactividad o cierre de un negocio durante un tiempo igual o superior a 6 meses, también supone la pérdida de vigencia de la licencia.
Aparte de todo esto, cada comunidad autónoma marca sus propias exigencias en relación con la renovación de otro tipo de permisos, como la instalación de terrazas, veladores y sistemas de emergencia.
Cómo abrir un bar sin dinero
Tal y como se explica en el apartado de costes, es imposible montar un bar sin dinero, puesto que solamente las licencias suman una cantidad considerable, además de la inversión inicial que tienes que hacer para que tu negocio salga adelante y se dé a conocer.