Contratar una hipoteca a tipo fijo supone pagar hasta un 50 % más de cuota mensual
Si has encontrado la que quieres que sea tu nueva casa, enhorabuena. Ya has conseguido la mitad del proceso, ahora, toca hacer cálculos y acudir al banco a solicitar una hipoteca. A la hora de pedir un préstamo hipotecario, la primera duda que puede surgirnos es, ¿a tipo fijo o variable? Cada modelo tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Si te estás preguntando cuál es mejor, debes saber que depende directamente de tu situación personal, de tus necesidades y del nivel al que esté el euríbor. Te contamos todas las características de cada una de ellas para que elijas la que mejor te venga.
– Mejores hipotecas fijas
– Mejores hipotecas variables
Contenido de la información:
¿Qué hipoteca interesa más?
En 2021 y manteniendo los bajos niveles en los que se encuentra el euríbor, interesa más una hipoteca con interés variable, puesto que por mucho diferencial que nos aplique la entidad bancaria con la que contratemos la hipoteca siempre será inferior a las hipotecas a tipo fijo que suelen tener un tipo de interés en torno al 4 %.
Tipo de interés variable
En las hipotecas a tipo variable el interés que se paga no es fijo, sino que depende del índice de referencia euríbor. Por tanto, la cuota mensual depende directamente de la evolución del euríbor. Esto no quiere decir que cada mes vayas a pagar una cantidad distinta, sino que la cuota variará cuando se revise la hipoteca, que suele ser cada seis meses o un año. Si el euríbor ha subido en los últimos meses y necesitas echar cuentas, aquí te explicamos cómo saber cuánto sube la hipoteca.
A diferencia de la de tipo fijo, no sabemos qué cuota mensual llegaremos a pagar en nuestra hipoteca si el euríbor fluctúa mucho, mientras que en las de tipo fijo sabes con certeza la cantidad a pagar durante todo el préstamo.
Sin embargo, la variación del euríbor suele ser gradual, por tanto, puedes conocer la evolución antes de la fecha de la revisión de la hipoteca.
Otra de las grandes ventajas es que a diferencia de las de tipo fijo, apenas tiene comisiones.
Tipo de interés fijo
Las hipotecas a interés fijo se caracterizan por tener unas cuotas mensuales estables que no cambian. Es la gran ventaja de este tipo de hipotecas, que la cuota acordada al principio se mantiene sin variaciones hasta que termines de pagar el préstamo porque el tipo de interés siempre es el mismo.
Además, las hipotecas a tipo fijo suelen ser más caras al principio, puesto que inicialmente tienen un interés superior, previendo que cuando suba el euríbor alcanzarán un mejor tipo de interés, además de fijo. También suelen aplicar comisiones a modo de penalización por una amortización anticipada, otro punto en su contra.
Hipoteca mixta
Como su nombre indica, las hipotecas mixtas ofrecen un interés fijo durante un tiempo al principio de la concesión de la hipoteca y después cambian a tipo variable. No combinan ni mezclan los dos tipos, los alternan.
Diferencias del 50 % en la cuota mensual
Supongamos que tenemos una hipoteca a interés variable del euríbor más 2,50 %, mientras que en una hipoteca a interés fijo sin bonificar puede llegar a un tipo de interés del 4 % si no contratas diversos productos financieros de la entidad con la que contrates para reducir el diferencial.
La elección para este caso concreto es optar por la hipoteca a tipo variable, con un tipo de interés final menor y, por tanto, con el que pagaremos menos intereses. Por el momento, es aconsejable seguir eligiendo hipotecas a interés variable a no ser que las condiciones de los bancos cambien o que la tendencia del euríbor cambie y sea necesario tomar esta decisión en función de la cantidad de años que estaremos pagando el préstamo.
La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros de España (ADICAE) estima hasta en un 50 % más de cuota mensual lo que el consumidor español pagaría de más en el caso de elegir una hipoteca fija con estos ejemplos, por no hablar de las comisiones.
En la medida que el euríbor ha dejado de ser un índice beneficioso para la banca, al encontrarse en negativo, las entidades ofrecen créditos a tipo fijo para obtener más beneficios.
La tendencia entre las entidades financieras es ofrecer a los pocos que tienen acceso a una hipoteca productos con intereses fijos, con el argumento de que son más seguros frente a los vaivenes del euríbor. “El argumento es tramposo”, dicen desde ADICAE. ¿Motivo? “Si tomaran valores más razonables tendría sentido optar por ellas, puesto que nos protegerían de las posibles subidas del euríbor sin tener que pagar un interés desorbitado. Pero ello no es así. El euríbor lleva ya un buen periodo en negativo y la corrección media de la banca en España (alrededor del 2,50 de añadido) deja los intereses hipotecarios actuales entre el 3 y el 3,50 %”, explican desde la asociación de defensa de consumidores.
ADICAE concluye que hoy en día las hipotecas fijas no suponen ninguna ventaja para los consumidores. En la sucursal nos dirán que nos blindaremos ante las futuras subidas del euríbor, es cierto, pero nadie sabe cómo va a evolucionar ese índice durante la vida del producto. De hecho, en un contexto de recesión como el actual, es difícil que la Unión Europea eleve los tipos de interés sin que medie una recuperación económica duradera, algo que no parece probable ni a corto ni a medio plazo.
Así pues, las hipotecas fijas hoy por hoy no son la mejor opción, pagar esas cantidades sería una barbaridad que nuestra economía no podría soportar. El Euríbor tendría que alcanzar unos niveles muy elevados para que una hipoteca al 4 % para estar protegidos de posibles subidas.
La trampa de las comisiones
No solo los intereses son excesivos y elevados en las hipotecas fijas españolas (no ocurre así en otros países como Francia). Las comisiones que se aplican entran de lleno en el abuso, con el objetivo de penalizar a aquellos clientes que quieran esquivar estos tipos o, directamente, cambiar la hipoteca. La mayor parte de las entidades analizadas aplican comisiones de subrogación que alcanzan hasta el 5 % del importe total del préstamo, 7.500 euros en el caso de la hipoteca tipo que hemos analizado anteriormente.
En fin, la negociación del consumidor con el banco pondrá sobre la mesa el concepto de hipoteca mixta, que mezcla periodos de interés variable con momentos de tipos fijos.
Si finalmente se escoge una hipoteca mixta habrá que examinar las comisiones aplicadas por la entidad, especialmente la de subrogación, puesto que “son muy elevadas en este tipo de hipotecas (4 % o 5 %) o también podríamos contratar una hipoteca variable hoy (con el euríbor en negativo) y cuando los tipos de interés subieran solicitar una subrogación a una hipoteca de tipo fijo. Entonces, el euríbor tendría que alcanzar valores superiores al 4 % para que compensase con los precios actuales, para ahorrarnos una cantidad importante de dinero”, aclaran desde ADICAE.