Los esmaltes permanentes son la mejor opción para llevar las uñas perfectas y cuidadas durante varias semanas sin que tengamos que preocuparnos por ellas. Pero circulan informaciones que afirman que estos esmaltes permanentes son dañinos para nuestras uñas. Y la pregunta que respondemos en este artículo es, ¿son malos los esmaltes permanentes para las uñas?
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Existen diferentes tipos de esmaltes: Desde los que son permanentes hasta la tradicional laca de uñas. Aunque también están las uñas postizas, ya sean de gel, acrílicas, o modalidades intermedias que se crean mezclando estas dos últimas técnicas y que se conocen a través de diferentes nombres. Esta variedad de tipos de esmalte nos permite el lujo de llevar las uñas bonitas y no tener que preocuparnos por ellas durante dos, tres o cuatro semanas, puesto que permanecen como nuevas.
Cómo saber qué comprar
- Ventajas del esmaltado permanente
- Desventajas
- Tipos de manicura
- Según el tipo de uña
- Duración de cada tipo de esmalte
- Trucos para que el esmalte dure más
- Cómo saber si me están haciendo bien las uñas
- Pasos para hacer las uñas postizas
- Tipos de manicura
- ¿Quitar o no quitar la cutícula?
- Esmaltado para cada ocasión
- Cómo cuidar las uñas
- Ofertas con descuento
Pero, ¿qué beneficios o desventajas tienen este tipo de esmaltes de larga duración? Te explicamos todo acerca de los esmaltes de uñas. Los diferentes tipos, la importancia de usar productos de calidad, consejos a tener en cuenta para el cuidado de las uñas naturales, pasos y procedimientos que se sigue para realizar un buen tratamiento permanente de uñas y todo lo que necesitas saber si estás dudando en hacerte un esmaltado de uñas o ponértelas postizas y no te atreves.
Ventajas del esmaltado permanente
Los esmaltados permanentes y los diseños de uñas con dibujos o técnicas inimaginables hasta hace pocos años se han convertido en una tendencia, sobre todo entre las más jóvenes, aunque también para las mayores. Una moda que no entiende de edad y que nos permite lucir uñas perfectas durante dos o tres semanas como si estuvieran recién hechas.
Mejores esmaltes
¿Alguna vez os habéis preguntado por qué tenemos uñas? Las uñas actúan de barrera protectora para nuestra piel. Son las que se llevan la peor parte si hablamos de factores externos negativos como suciedad o golpes. Son las que están en contacto con todo lo exterior. Excepto las personas que se muerden las uñas. En ese caso la piel está igualmente expuesta a estos factores.
Por tanto, la ventaja número uno de hacernos un esmaltado permanente es que esta capa está protegiendo a nuestra uña natural de estos factores negativos externos que recibimos de forma constante.
Si pensamos en más ventajas a la hora de hacernos un esmaltado permanente, quizá lo principal es acabar con la frustración que se siente al intentar dejarnos unas uñas perfectas y que el resultado quede de forma desigual, de estropearlas según las has pintado porque no están secas del todo o de llevarlas feas a los dos días porque se ha levantado el esmalte por las esquinas y o en la parte inferior de la uña.
Otra gran ventaja de los esmaltes permanentes es que permanecen como nuevas desde el primer momento hasta que te las quitan. Aunque solo en los casos en los que el esmalte permanente se haya hecho con materiales de calidad y de forma correcta. Si no, se estropearán con el paso de los días o se irá cayendo el esmalte.
Si hablamos de las cosas buenas del esmalte permanente es que según terminan de hacértelas están totalmente secas. Puedes coger cosas, meterte la mano en el bolsillo, escribir o todo lo que puedas imaginar. Porque con estos esmaltes nos ahorramos ese valioso tiempo que en muchas ocasiones no tenemos de esperar una vez aplicado el esmalte para que se seque completamente.
Desventajas
Hacerse las uñas es una tendencia que está en auge. En los últimos años, ha habido una gran proliferación de salones tanto profesionales como otros que no lo son que se dedican al tratamiento de las uñas y de la belleza. Y si causa tanto furor, ¿cuál es su principal problema? ¿Por qué circulan informaciones sobre los efectos negativos de estos esmaltes? El gran problema es que hay una gran cantidad de personas que a un bajo precio hacen los mismos servicios que otros que son más caros. Ante esta situación, las personas que optan por ir a lo barato acaban sufriendo las consecuencias de que lo barato sale caro.
Porque cuanto más barato encuentres un sitio que te haga las uñas, peor van a ser los materiales y productos que empleen. La ejecución del tratamiento va a ser más descuidada y los instrumentos con lo que trabajan peores.
Porque si no se usan productos adecuados y de calidad, o no esterilizan constantemente los materiales de trabajo, o el propio lugar de trabajo no está higienizado, puede tener consecuencias muy negativas para nuestra piel y uñas. Puede por ejemplo debilitar las uñas y que se nos partan constantemente. Los productos más agresivos pueden dañarnos la piel, así como producirnos algún tipo de reacción alérgica o dermatitis.
Pero solamente cuando los productos no son adecuados. Es muy importante remarcar este hecho. Si se hace bien, no hay ningún tipo de consecuencia.
Es recomendable que la persona que nos haga la manicura tenga conocimientos sobre el cuidado de las uñas. Sobre los métodos de manicura más apropiados para cada clienta según el tipo de piel y uña, los mejores productos de calidad y los pasos a seguir para hacer un buen esmaltado que dure y no nos dañe.
Y en este apartado no podíamos dejar de hablar del comentario que escuchamos o leemos de forma habitual: “Las uñas necesitan respirar”, por lo que se recomienda descansar entre la aplicación de los esmaltes permanentes. En este artículo acabamos ya con este mito. Las uñas no respiran. No necesitan hacerlo. Mientras que el producto con el que se trabaja sea bueno, puedes encadenar años enteros con esmalte permanente que las uñas van a crecer sanas y en perfecto estado.
Tipos de manicura
Permanente
Esta modalidad consiste en aplicar un esmalte específico que tiene una mayor duración que una laca de uñas tradicional. Es importante saber que a pesar de lo que podemos leer en diferentes lugares, cuando alguien se refiere a un esmaltado semipermanente es lo mismo que uno permanente. No existen diferencias. A la hora de hacer este tipo de manicura tienes que contar con los productos de manicura permanente específicos y conseguir tu kit de manicura semipermanente.
Gel
El esmalte de gel consiste en crear uñas postizas. Mientras que en el esmaltado permanente pintamos nuestra uña natural, con el gel construimos encima de nuestra uña natural una uña nueva. Este tipo de esmaltado permite hacernos las uñas más largas o con una forma distinta a la nuestra. Es apropiado para personas que quieren tener uñas largas, pero las suyas, aunque se las deje crecer, son débiles y, por tanto, van a romperse.
Acrílico
Es una técnica similar al gel. La funcionalidad es la misma aunque los materiales que utilizan son distintos. Si queréis saber un truco para diferenciar el gel del acrílico es muy sencillo. El acrílico es un conjunto de polvos que se mezclan con un líquido para construir la uña y tiene un olor muy fuerte, mientras que el gel es un gel como bien indica su nombre y no tiene olor.
Térmicos
En estos últimos años han proliferado algunas otras técnicas de esmaltado como por ejemplo los que son térmicos. La principal característica de estos esmaltes es que varían de tonalidad según varía la temperatura de la uña. Por ejemplo, si el color que hemos aplicado de base es amarillo, cuando apretamos la uña unos segundos y alcanza temperatura, el color cambia a amarillo oscuro, casi ocre.
Mezclas
En la actualidad están proliferando gran cantidad de mezclas entre gel y acrílico que se presentan con diferentes nombres y que al fin y al cabo suponen una combinación entre ambas técnicas. Su funcionalidad es la misma.
Según el tipo de uña
El esmalte ideal para cada tipo de uña va a variar según las propiedades de la piel y las uñas de cada persona.
Hay esmaltes apropiados para las uñas que son más blandas. Las personas que se dedican al mundo de la estética, y en concreto de las uñas, conocen solo con mirar y empezar a hacerte la manicura si tienes excesiva sensibilidad en las manos o si tus uñas son débiles porque existen indicadores en las manos que permiten ver que reaccionamos a ciertas acciones.
Un ejemplo son las personas que tienen diabetes. En estos casos la piel es mucho más delicada, más fina. Por tanto, no se utiliza agua caliente para hacerles tratamientos y hay que tener excesivo cuidado a la hora de cortar a cutícula, puesto que si se hace una pequeña herida va a tardar mucho más tiempo en curarse.
El esmaltado permanente es más flexible que el esmaltado postizo como el gel o el acrílico. Por tanto, si tienes las uñas débiles y quieres tenerlas largas, para asegurarte de su duración es más recomendable utilizar o el gel o el acrílico que son esmaltes más duros y difíciles de romper.
En caso de tener las uñas duras, todos los esmaltes son apropiados. Puedes elegir el que más te guste.
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Duración de cada tipo de esmalte
La duración estimada de un esmalte permanente oscila entre las 2 y las 6 semanas. Sin embargo, se recomienda que la duración sea de entre 2 o tres semanas. A partir de la tercera semana se va a notar que nos ha crecido la uña y si las tenemos débiles es más fácil que se produzca alguna rotura.
En el caso de las uñas de gel o de acrílico la duración media estimada es de alrededor 3 o 4 semanas, según recomiendan. Aunque cada persona puede alargar el esmaltado, ya sea permanente o postizo el tiempo que quiera mientras le aguante en buen estado.
Trucos para que el esmalte dure más
Si quieres que tu esmalte de uñas esté siempre en perfecto estado, presta atención a los dos siguientes trucos:
Para alargar la vida de tu esmalte de uñas lo mejor que puedes hacer es mantenerlo en un lugar fresco, en la nevera, por ejemplo.
Otro punto muy importante es que no les dé directamente el sol porque los rayos solares afectan al contenido de forma negativa y lo degradan. Por este motivo los mejores esmaltes vienen con envases opacos, que les protegen de los rayos del sol.
En resumen, dos claves para alargar la vida de tus esmaltes:
- Guárdalos en un lugar frío
- No los dejes expuestos al sol
Cómo saber si me están haciendo bien las uñas
Debemos tener en cuenta una serie de factores que nos indican si el servicio que nos están dando es o no de calidad.
- En primer lugar, la duración que tardan en hacerla es un factor a tener muy en cuenta. Unas uñas postizas o de esmalte no tardan una hora en hacértelas. Menos si los diseños llevan dibujos o cualquier forma específica que haya que hacer a mano.
- Los productos deben ser de calidad. Es lo más importante y básico a la hora de elegirlos. Si no tenemos conocimiento acerca de qué productos son los mejores en el mercado, hay que acudir a personas de referencia que sí lo sepan o ir a centros de uñas que sepamos por otras personas que los utilizan.
- Ver que las prácticas de las esteticistas son adecuadas. Incluye en estos factores la esterilización de los materiales a cada clienta.
Quitaesmaltes
Limas
Pasos para hacer las uñas postizas
- En caso de llevar un esmalte ya sea permanente o de cualquier tipo, el primer paso va a ser retirarlo.
- Se procede al limado de las uñas y a darles formas con diferentes tipos de limas. No hay que utilizar la misma cuando queremos limar para dar forma a la uña que para dejarla totalmente uniforme.
- Quitar la cutícula. La forma de proceder va a variar en función del tipo de manicura que nos hagamos.
- Nos aplican una base de esmaltado. Bien para los permanentes como para el gel o acrílico.
- Se termina de dar forma a la uña. Tanto de uniformidad para que quede plana y no queden partes desiguales como para que la forma sea simétrica en todas las uñas. En el caso del gel o acrílico se aplica y se da forma posteriormente.
- Aplicamos esmalte permanente o en caso de gel o acrílico aplicamos el esmalte encima de la nueva uña postiza.
- Por último, aplicar en la cutícula un aceite especial para hidratarla tras el tratamiento.
Tipos de manicura
Existen diferentes tipos de manicura que podemos elegir y cuyo precio varía. Los tres principales tipos de manicura que podemos encontrar en el mercado son:
Manicura sencilla
Consiste en empujar con un instrumento específico la cutícula, sin cortarla, y poner una laca de uñas normal.
Manicura francesa
La manicura francesa es una forma de pintar las uñas, con la raya blanca.
A la hora de pintar las uñas existen diferentes técnicas como el efecto Baby Boomer a través del que se difuminan los colores y se consigue un efecto desvanecido sin cortes.
Manicura rusa
Este tipo de manicura se trata con agua caliente para ver mejor qué parte de la cutícula es piel muerta y sobrante y, por tanto, hay que quitar. Además del tratamiento de la cutícula se liman las uñas se dan forma y se pone el esmalte que puede ser permanente o normal.
Manicura combinada
Varía con la anterior en la forma de quitar la cutícula. En esta ocasión no se utiliza el agua caliente. Se quita a través del torno y de alicates. Rematándolo al cortar la piel sobrante con las tijeras. Advertencia: No duele.
Las manicuras no duelen. Independientemente del tipo que sea. Si hay dolor, te lo están haciendo mal.
¿Quitar o no quitar la cutícula?
Encontramos un gran dilema y versiones totalmente opuestas acerca de quitar la cutícula a la hora de hacernos la manicura.
La cutícula es bueno quitarla. Por una razón muy sencilla. Esta parte de la mano es piel que al igual que otras partes del cuerpo acumula suciedad. Y, por tanto, hay que limpiarla. La parte que queda debajo de la cutícula es necesario limpiarla. Además, si aplicamos un esmalte encima de esta parte de la uña, se va a agrietar y va a quedar feo, porque estamos echando esmalte sobre una parte desigual de la uña.
Cortador de cutícula
Debemos saber que la cutícula no crece igual en todas las personas. Por ejemplo, si tienes las uñas blandas, la cutícula te va a crecer mucho más que si tienes las uñas más duras. Cuanto más débil es la uña, más crece la cutícula. Hay casos de personas que la cutícula cubre la mitad de la uña.
Esmaltado para cada ocasión
Si quieres un esmaltado que te dure varias semanas puede ser tanto permanente como gel o acrílico o cualquiera de las mezclas. La elección variará dependiendo de si tus uñas son débiles o cortas y prefieres algo más resistente.
En casos concretos como la elección de uñas para ceremonias como las bodas, deberás intentar combinarlo a la perfección con la ropa que lleves, los zapatos o los accesorios.
Para trabajar de forma diaria podemos apostar por opciones con tonos claritos con algún dibujo, aunque también tonos oscuros que dan formalidad. La manicura francesa siempre es una buena opción para todo tipo de eventos.
Decoración de uñas
Si tu trabajo es logística o almacén y manipulas cajas de forma constante, olvídate de las uñas largas o se te partirán con el tiempo por pequeños golpes que reciban. El esmaltado permanente es una buena opción para que tus uñas se fortalezcan y llevarlas bonitas.
Una advertencia importante: Si trabajas en el ámbito de la limpieza, el esmalte permanente no va a ser tu mejor aliado. Debemos tener en cuenta que la exposición durante muchas horas al agua va a agrietar y levantar el esmalte.
Siempre puedes pedir consejo a tu esteticista. Normalmente, el “motivo” de uñas va aparejado a los momentos del año: Por ejemplo, en Navidad dibujos de copos de nieve, de muñecos de nieve, campanas, con purpurina, etc. O en verano de frutas, colores más vivos, incluso flúor. En invierno predominan los colores oscuros, incluso las tonalidades de marrones y negros. Sin duda, el mejor esmalte o manicura para tus uñas tendrá que ver mucho contigo y con cómo eres.
Cómo cuidar las uñas
A la hora de plantearnos si hacernos o no un esmaltado permanente o ponernos uñas postizas debemos conocernos. Es decir, hay que saber si nuestras uñas son débiles y se parten con facilidad, o si, por el contrario, son resistentes.
Tener en cuenta también si tenemos dermatitis o cualquier otro problema de piel. O si tenemos la piel sensible hasta el punto de tener reacciones de algún tipo al aplicarnos algunos productos. Ante estas situaciones lo mejor es avisar a la persona que va a hacernos las uñas para que nos ayude y valore si con esa situación concreta es aconsejable o no realizar el esmaltado.
Si ya nos las hemos hecho, hay que tener en cuenta que las uñas, ya sean postizas o sean permanentes, no duelen. No duelen cuando están puestas ni al hacerlas ni al quitarlas. Por tanto, si sientes incomodidad o dolor, lo mejor es ir a un centro a que te lo miren y te las quiten.
Y por supuesto no es aconsejable quitarte un esmalte permanente ni unas uñas postizas tú sola en casa. En los salones tienen los instrumentos apropiados para quitártelas sin dañar tu uña. Porque si en casa probamos a arrancarlas, nos vamos a llevar parte de nuestra uña con el esmalte. Y eso debilita y rompe las nuestras. Porque cuando se estropean es por malas prácticas.
En caso de tener uñas débiles de por sí, se recomienda hidratar de forma constante la uña, cutículas y la mano en general para ganar fortaleza.
Es muy importante no excederse en el limado de las uñas. Limar mucho una uña va a debilitar la capa superior y es perjudicial. Así que si la persona que va a haceros las uñas se pasa con la lima, es un indicador de que el esmaltado que va a realizar no es bueno y como consecuencia tu uña acabará debilitada y deteriorada.
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