Cómo subir el pH de la piscina

Mantener un buen nivel de pH en la piscina es uno de los indicadores que garantiza la buena calidad del agua, así como la salud de los bañistas. ¿Pero, qué significa este término exactamente y cómo saber si está alto o bajo?

El pH es un término que hace referencia a la cantidad de acidez que hay en el agua y, por este motivo, es tan importante mantenerlo en la horquilla de nivel recomendada. De manera general, nunca puede situarse por debajo de 7. Y en el caso de encontrarse en estos niveles, lo ideal es recurrir a un aumentador de pH para recuperar el buen estado del agua.

Cuáles son los niveles recomendados de pH del agua

Uno de los primeros aspectos a tener en cuenta es que para mantener los niveles de pH correctos y, como consecuencia, una buena calidad en el agua, este componente debe situarse en unos niveles de entre 7,2 y 7,6.

Esta es una horquilla general y las cifras exactas pueden variar ligeramente. Es decir, que puede situarse en 7 o 7,1 y que el agua no se encuentre en mal estado. Pero nunca puede situarse por debajo de 7, dado que es ya un margen muy amplio de error y un nivel tan desfasado puede provocar problemas en la calidad del agua y, por tanto, en todos los usuarios que se metan en la piscina.

Qué significa el pH de la piscina

El pH es un indicador que mide el grado tanto de alcalinidad, como de acidez en el agua. En concreto, un buen nivel de pH señala el bajo grado de acidez en el agua y, por tanto, el buen rango de alcalinidad. Mientras que un nivel bajo de pH evidencia el alto contenido de acidez en el agua.

Como consecuencia de ello, una piscina que tenga el agua con pH bajo provoca irritación o escozor en la piel, así como en los ojos. Y, de forma adicional, también deja las paredes y el suelo de la piscina con una especie de fina capa de tacto pringoso o resbaladizo, nada agradable y poco seguro.

Además, la presencia de un pH bajo y un alto nivel de acidez atrae a partículas externas y a invitados no deseados que puedan resultar perjudiciales para la salud.

Por qué baja el pH de la piscina

Son muchas las circunstancias que pueden provocar una bajada del pH del agua de la piscina. Aunque, de manera general, hay dos de ellas que suelen ser las más habituales:

• Por el aumento de las temperaturas. La explicación se debe a que el sol evapora el agua, como consecuencia disminuye la presencia de cloro y, por tanto, puede provocar un desequilibrio en los niveles de la calidad del agua.
• Aunque también el pH suele bajar por un uso constante y repetido de bañistas. Al usar cremas de protección solar, por contacto del cabello en el agua o de las pieles muertas, se produce un descenso de los niveles de pH.

Cómo subir el pH de la piscina

Existen productos específicos que permiten subir el pH de la piscina de forma rápida y sencilla. Aunque para hacer el proceso más fácil, lo primero que hay que hacer es usar un medidor específico para ver en qué nivel está el agua de la piscina y proceder de la mejor forma posible.

En concreto, los elevadores de pH o aumentadores de pH son productos que se echan directamente en el agua y que permiten aumentar estos niveles para devolverle la buena calidad al agua.

Los hay en forma de granulado, en polvo o líquido y cada producto tiene que aplicarse siguiendo las pautas y recomendaciones de los fabricantes. En función del estado del agua de la piscina, así como del volumen y tamaño de la misma y del tipo de piscina.

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