Cómo ser piloto de drones, requisitos y sueldo

Pilotar un dron puede parecer sencillo, pero hacerlo con precisión y buena técnica es distinto. Tanto, que en la actualidad hay una gran demanda de esta formación especializada para ser piloto de drones. Esta nueva profesión abre las puertas a una infinidad de salidas laborales en sectores tan dispares como el mundo audiovisual y el de las energías renovables.

En esta información te explicamos todo lo que necesitas saber para ser piloto de drones, los requisitos, la formación específica y la horquilla de sueldos que reciben estos profesionales. Para ello, hemos hablado con los expertos de la compañía gallega Aerocámaras, especializados en drones y que ofrecen distintos cursos para que los alumnos se formen en esta profesión tan en auge. Y es que esta mayor demanda de aprendizaje para ser piloto de drones se debe a que “el desarrollo que tiene el mercado de los drones ha provocado una mayor demanda de personal cualificado“, explica Jaime Pereira, CEO de Aerocámaras.

Requisitos para ser piloto de drones

Para ser piloto de drones hay que superar una formación especializada en este sector y sacarse tanto el título como el carnet de piloto. Como puedes consultar en siguientes apartados, dependiendo del tipo de dron y del entorno en el que quieras volar, necesitas un carnet específico u otro.

A este aprendizaje de los conocimientos básicos hay que añadirle la especialización en el sector. Y, dependiendo de la salida laboral que escoja cada profesional, los requisitos adicionales que exijan desde cada compañía.

Curso de piloto de drones

Lo primero es la formación. Es la base para que cualquier persona que quiera dedicarse a este mundo pueda hacer su trabajo con profesionalidad. Una de estas formaciones es la que ha presentado Aerocámaras, que cuenta con un gran repertorio de cursos especializados en esta materia distribuidos en 30 centros por toda España.

Los cursos son online, así que cada alumno puede llevar su propio ritmo de aprendizaje. La duración, por tanto, depende de la disponibilidad y horas que dedique cada persona a esta formación. Aunque también existe la posibilidad de combinar esta formación por internet con clases presenciales.

En cuanto a las materias específicas que deben aprender los futuros pilotos de drones, dependen directamente del grado de especialización y curso al que quieran acceder. Tal y como señalan fuentes de la compañía, “hay decenas de especializaciones. Desde inspecciones técnicas, emergencias y seguridad, sector audiovisual, fotogrametría y topografía, agricultura de precisión, hasta la logística con drones”, añaden. De esta elección dependerán los contenidos y asignaturas de la formación.

La formación teórica es un pilar muy importante para asentar los conceptos clave, pero sin la práctica no es posible dominar esta profesión. Por ello, los cursos ofrecen una combinación de parte teórica y horas de vuelo de drones.

¿Cuánto cuesta formarse en este sector?

Respecto al gasto que supone especializarse en este sector del pilotaje de drones, la matrícula por curso de la formación de Aerocámaras cuesta aproximadamente 499 euros, aunque la cantidad concreta depende de cada curso.

Titulación

Con este curso los alumnos se especializan en el manejo de aeronaves no tripuladas (UAS) para operar con multirrotores. Y, tras aprobar todas las materias, obtienen el certificado oficial de piloto de UAS de nivel 3 de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA). Algunas de las certificaciones emitidas por estos cursos de Aerocámaras son oficiales del Estado, pero no todas.

¿Qué significa ser piloto de UAS nivel 3 de la AESA? Pues que estos profesionales están habilitados para manejar sistemas aéreos no tripulados (UAS), es decir, en este caso, los drones. Por ello, tras la formación, estos profesionales están capacitados para realizar vuelos en entornos urbanos. Incluso aquellos que se extiendan más allá del alcance visual (BVLOS) y estarán autorizados para hacerlo en toda la Unión Europea.

Pero ojo, porque las zonas específicas sobre las que pueden pilotar los drones dependen de la categoría de vuelo en la que se hayan formado.

Carnet de piloto de drones

Superar un curso no habilita a los alumnos para pilotar cualquier dron, sino que este hecho depende de la categoría de vuelo a la que quieran acceder. En líneas generales, hay tres categorías de vuelo:

Primera categoría o básica. Es la que permite utilizar drones de hasta 25 kilos, incluyendo la carga. En cuanto al entorno, pueden hacerlo en las zonas autorizadas por AESA, que en este caso, solamente permite el vuelo en zonas alejadas de personas. Es decir, que con este permiso no se pueden hacer grabaciones en la ciudad por ejemplo, sino que tiene que ser en descampados o espacios autorizados. Para conseguir este carnet solamente es necesario un examen tipo teórico.

La segunda categoría es la que permite pilotar drones de hasta 4 kilos, pero en este caso, sí pueden sobrevolar zonas urbanas, siempre y cuando estén autorizadas. Para obtener este carnet es necesario aprobar un examen teórico de la AESA y otro práctico de carácter obligatorio.

Tercera categoría o específica. Es la que más opciones de vuelo da y permite a los profesionales hacerlo en entornos urbanos. La teoría es más amplia que en los otros exámenes y además hay que aprobar un examen práctico bajo la supervisión de instructores de vuelo. Es un carnet que se centra más en un vuelo especializado.

Sueldo

El sueldo de estos perfiles profesionales depende del puesto que desempeñen, así como de sus funciones. No recibe el mismo salario un piloto de drones que se dedique a hacer grabaciones de un campo que aquellos que realizan comprobaciones de un tendido eléctrico. Cobran por la acción que ejecuten y responsabilidad.

En el sueldo también influye la experiencia del profesional. Así, un piloto recién salido de la academia recibirá un salario más bajo que otro con 5 o 10 años de trayectoria. Según Adecco, el sueldo de un especialista del sector audiovisual de pilotaje de drones es de entre 3.000 y 9.000 euros al mes. La media se sitúa en los 6.000 euros mensuales.

Salidas laborales

El curso de Aerocámaras ofrece la posibilidad a todos los alumnos que lo superen, acceder a una bolsa de empleo de la Universidad Complutense de Madrid para empezar a trabajar en el mercado profesional.

En cuanto a las salidas laborales de este perfil profesional, según detalla el responsable de instructores de Aerocámaras, Sergio Río, hay una gran multitud donde elegir. Los profesionales de este sector que tengan la formación específica pueden encajar en una gran variedad de mercados que van “desde inspecciones técnicas, emergencias y seguridad, sector audiovisual, fotogrametría o agricultura de precisión. También se incluyen la logística con drones, por ejemplo”, señala.

Cada vez hay más sectores que recurren a los drones para facilitar sus funciones diarias. Por este motivo, la especialización en este sector “permite a los profesionales acceder a sectores como mantenimiento de estructuras, envíos logísticos, vigilancia por parte de FCS y demás policías, cultivo de tierras, eliminación de plagas… Además de, por supuesto, todas las salidas en el mercado audiovisual que tienen debido a las grabaciones que pueden realizar”, indica Río.

Empleo como inspector de parques eólicos

Una de las salidas laborales a las que pueden acceder estos nuevos profesionales es convertirse en inspectores de parques eólicos. En estos casos, su función consiste en hacer un mantenimiento del estado de los parques eólicos con drones, puesto que esta tarea abarata los costes y aumenta la seguridad de los empleados.

La función de estos drones es sobrevolar los parques eólicos, puesto que gracias a las cámaras que llevan integradas se puede analizar el estado de los mismos y hacer un buen mantenimiento de las infraestructuras. Con estos drones es posible efectuar inspecciones del sector de manera segura y eficaz, además de detectar averías con rapidez y descartar falsas alertas sin que los empleados se expongan a peligros innecesarios.

Además, se pueden inspeccionar grandes superficies en tiempo récord, puesto que los drones pueden acceder a zonas complicadas y detallar el estado de la estructura gracias a las mediciones. De la eficacia del trabajo también depende la autonomía de los drones. Permiten subir a grandes alturas, revisar torres, góndolas y pala Cada una de ellas se inspecciona en 10 minutos con solamente la mano de obra de una persona.

Pereira concluye que “realizar un mantenimiento clásico de estas infraestructuras supone un coste y un grado de dificultad muy elevado. Este sector pedía a gritos un cambio y el uso de drones se ha revelado como una gran solución”, explica el CEO de Aerocámaras. Además, es una oportunidad laboral también para desarrollarse en el extranjero, puesto que esta forma de trabajar está implantada en otros países como Portugal, Italia o México.

En el caso de querer volar un dron para usarlo para jugar, con fines recreativos, aunque no hagas uso como profesional, te recomendamos que te informes sobre la normativa actual acerca de estos juguetes, puesto que la AESA contempla multas de entre 60 y 225.000 euros por volar drones si incumples las leyes.

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