Cómo saber qué tipo de piel tengo y cómo cuidarla de forma correcta
¿Te gustaría cuidar tu piel con los productos de belleza adecuados? Para ello, es importante saber el tipo de piel que tienes, ya sea normal, seca, grasa o mixta. El tipo de piel de cada persona viene determinado genéticamente, pero el estado de la misma puede variar considerablemente según diversos factores internos y externos a los que es sometida.
En esta información te explicamos cómo identificar tu tipo de piel y cómo debes cuidarla correctamente. De esta forma sabrás cómo elegir una rutina óptima para cuidar tu piel. Los hombres también se cuidan, así que en esta otra información puedes consultar cuál es la mejor crema facial rejuvenecedora de hombre.
Contenido de la información:
Cómo saber mi tipo de piel
En primer lugar, debes saber que existen 4 tipos de piel: normal, seca, grasa y mixta. Para saber cuál es la tuya, puedes poner en práctica algunas rutinas.
Por ejemplo, puedes probar a lavar el rostro y ver su comportamiento media hora después. Una vez pase este tiempo, con la piel seca y sin aplicar ningún producto, comprueba si existe algún ligero brillo. Si es así, en la zona de la nariz, frente y mentón, tendremos una piel mixta o normal. Si después de otros 30 minutos más también brillan los pómulos, entonces se trata de una piel grasa. Por el contrario, si notas la piel tirante, se trata de una piel seca.
Otra forma de identificar el tipo de piel que tienes es presionando el rostro con un trozo de papel absorbente para la cara. Realiza toques suaves por toda la cara y comprueba si el papel tiene mucha grasa. Si esto sucede en la frente o en la nariz, tienes una piel normal o mixta. En cambio, si el papel aparece manchado de sebo, tendrás una piel grasa. Y, si prácticamente el papel sigue igual, tienes una piel seca.
Tipos de piel
Es importante saber cuáles son los tipos de piel que hay y cuál es tu tipo de piel para adoptar la rutina de cuidado idónea. A veces, nuestro tipo de piel no se ajusta a una categoría concreta, sino que puede estar a caballo entre varios tipos de piel o cambiar en función de la estación del año, los factores externos y los cambios en el estilo de vida.
Piel mixta
La piel mixta tiende a tener dos tipos de piel en toda la cara: piel normal o tirando a seca alrededor de las mejillas y la barbilla, y piel grasa con imperfecciones en la frente y la nariz. Con este tipo de piel pueden surgir dudas a la hora de realizar una rutina de cuidado de la piel porque cada zona de la cara se debe tratar de una forma distinta en función de la cantidad de grasa que se acumula.
Para cuidar una piel mixta, lo primero es eliminar la grasa y evitar que las zonas más secas se resequen. Para ello, empieza tu rutina de cuidado de la piel con un limpiador suave, indicado para tu piel, y termina con una crema hidratante sin grasa. De cualquier modo, existen cremas para pieles mixtas y así no tienes que estar mezclando varios tipos en función de la zona en la que quieres aplicar los productos.
Piel seca
Este tipo de pieles presentan un aspecto seco y escamoso. Las pieles secas no tienen casi humedad y grasas, por lo que es menos elástica y más tensa. A causa de esto, la piel puede irritarse o presentar picores. Además, la piel seca es especialmente susceptible a los cambios ambientales, como la luz del sol o el viento.
Para cuidar este tipo de piel, debes adoptar una rutina de cuidado de piel especializada para aliviar la piel seca, evitando los limpiadores fuertes. En su lugar, usa cremas para manos secas y agrietadas que las hidraten. Emplear crema solar facial y beber mucha agua también ayuda.
Piel normal
Si tu piel es fina y uniforme tienes una piel normal. Aunque parezca una piel perfecta, es importante mantenerla en el mejor estado. Para ello es relevante hidratarla y protegerla con una rutina de cuidado de piel regular. Para ello, debes limpiar y exfoliar en profundidad una vez a la semana este tipo de piel para eliminar suciedad y células muertas. Puedes comprar un jabón exfoliante facial que te acompañe en la rutina.
Piel grasa
Se llama piel grasa a aquella que genera un excedente de sebo. Esta hiperproducción se conoce como seborrea. Este tipo de pieles suelen darse, además de causas genéticas, cambios y desequilibrios hormonales, medicación, estrés y el uso de algunos maquillajes que causan irritación en la piel.
La rutina para cuidar una piel grasa debe ser sencilla. La limpieza excesiva en este tipo de pieles puede ser contraproducente, por lo que lo mejor es usar productos antibacterianos para estabilizar el nivel de grasa en la piel y usar un limpiador facial eléctrico para tener la piel limpia y radiante.