Cómo proteger la batería del coche del calor y evitar averías
El aumento de las temperaturas puede dañar la batería del coche. Una auténtica faena si tienes un vehículo de bajas emisiones, puesto que tener que cambiar la batería de un coche eléctrico supone una inversión muy elevada, de miles de euros. En el caso de un coche de combustión, el precio de cambiar la batería es mucho más barato. Pero supone la consecuente visita al taller y el gasto imprevisto de la reparación. Para evitarlo, en esta guía puedes consultar algunos consejos para que sepas cómo proteger la batería del coche del calor y evitar averías.
Si se te ha descargado por completo por un despiste, aquí puedes consultar los pasos para saber cómo arrancar el coche con pinzas.
Cómo afecta el calor a la batería del coche
Las altas temperaturas disminuyen el rendimiento de la batería y aceleran su deterioro. Motivo por el que es fundamental proteger la batería, sobre todo en verano. Las cifras hablan por sí solas. El 50 % de las averías en carretera afecta a las baterías de los vehículos, según un estudio elaborado por RACE.
La batería del coche está diseñada para funcionar a una media de 25 grados de temperatura, por lo que tanto un aumento excesivo como las temperaturas bajo cero en invierno son perjudiciales. En concreto, estos cambios de temperatura afectan directamente al rendimiento y, en general, acortan su vida útil.
Según señalan desde Confortauto, el calor intenso “acelera el desgaste de la batería. Consecuencia de que las moléculas de azufre que se encuentran en el interior de esta pieza se descomponen más rápida y aumentan el depósito de placas”. Como resultado, se acelera su descarga y se pierde la gravedad en los electrolitos, concluyen.
Cómo proteger la batería para que dure más
Para que dure más y protegerla del calor, hay algunos consejos que puedes tener en cuenta:
- Revisar la batería de forma periódica junto con el sistema eléctrico del coche. Es fundamental asegurarse de que todo funciona de manera correcta. Para no estropear ni acelerar el deterioro de la batería, es aconsejable no encender muchas funciones del sistema eléctrico a la vez si el coche está apagado. Por ejemplo, el aire acondicionado, la música, las luces o la toma del mechero.
- Proteger el coche de la exposición solar. El mantenimiento en este caso es muy sencillo. Hay que procurar dejar el coche a la sombra o guardarlo en garajes. El objetivo es no dejarlo a pleno sol con 40 grados en el termómetro, puesto que, según datos, si la temperatura en el coche supera los 50 grados, la vida útil de la batería puede disminuir hasta en un 50 %.
- Niveles de ácido de la batería. Antes de comprobarlo, consulta a tu mecánico. No todas las baterías de los coches permiten realizar esta comprobación, pero si en tu caso sí es posible, revisa los niveles para asegurarte de que no estén bajos.
- Comprobar el sistema de carga de la batería. Puede que la batería esté fallando y se deba a que necesite una recarga. Esta es una revisión que puedes hacer en el taller antes y después del verano, para verificar que tu batería no se ha dañado con los cambios de temperatura. También es recomendable revisar el estado si has tenido el coche parado mucho tiempo. En estos casos, si lo que te ha pasado es que se ha descargado, puedes comprar un arrancador de batería para el coche y evitar la visita al mecánico.
- Conducir de manera eficiente. La manera en la que uses y cuides el vehículo afecta a todas y cada una de las piezas, incluidas la batería. Motivo por el que es recomendable conducir de manera suave y evitar acelerar de manera brusca.