Cómo hacer cerveza artesana en casa con un kit
¿Eres un apasionado de la cerveza? Si la respuesta es sí, ahora tienes la oportunidad de aprender a hacer cerveza artesana en casa. Te contamos todos los pasos necesarios para conseguir un resultado impecable. Toma nota de los materiales e ingredientes que necesitas y prepárate para elaborar tu propia cerveza. Si eres un gran aficionado de esta bebida fermentada, aquí te contamos cuándo es el Día Internacional de la Cerveza y por qué se celebra este día en todo el mundo.
Contenido de la información:
Maquinaria
El proceso de fabricación de la cerveza requiere de ciertos conocimientos técnicos, así como de un material muy concreto para su producción. Sin embargo, antes de entrar a detallarlo conviene puntualizar que existen dos maneras principales de elaborar cerveza del modo artesanal. Una de ellas es haciendo uso de botes de malta preparada y la otra, pasos para fabricarla. A esta última técnica se le llama “todo grano” y será, precisamente, la que expliquemos a continuación. Eso sí, antes de hacerlo es preciso destacar los utensilios y materiales que necesitaremos:
- Una olla.
- Un colador.
- Un termómetro.
- Botellas o barriles bien esterilizados. Además, en caso de que se trate de botellas, éstas deberán ser opacas y estar preparadas para almacenar líquidos gasificados y soportar la presión.
Por otra parte, serán necesarios los siguientes ingredientes:
- Agua.
- Malta. Conviene que ésta esté molida antes de empezar el proceso de cocinado. En caso de que la molamos nosotros mismos, es importante tener en cuenta que no hay que hacerla polvo, sino molerla un poco simplemente para que se rompa.
- Lúpulo.
- Levadura.
- Azúcar.
Una vez claros todos los materiales que necesitaremos para hacer cerveza artesana, solo queda ponerse manos a la obra.
Pasos
Es el momento de descubrir cómo hacer cerveza en casa de forma sencilla. Los pasos a seguir son los siguientes: macerado, filtrado, aclarado, cocción, enfriado, fermentación, envase y embotellado. A continuación explicaremos cada uno de ellos.
Macerado
El primero será convertir el almidón de los granos de malta en azúcares fermentables. Para ello, llena la olla con agua (tres litros por cada kilo de malta) y caliéntala entre los 67 y los 70 grados, sin dejar que hierva. Echa la malta de cebada y remueve constantemente la mezcla. Este proceso deberá durar entre sesenta y noventa minutos.
Filtrado
Es el momento de desechar cualquier resto sólido del grano y reducir una parte de los azúcares de la malta. Para hacerlo, tendrás que filtrar la mezcla que has obtenido en una cuba de filtración y repetir el proceso como mínimo unas tres veces. Hazlo hasta que el mosto se haga más cristalino.
Aclarado
Agrega el agua a 78 grados para conseguir más litros. Además, al hacerlo aprovecharás también el azúcar que queda en los granos de la malta.
Cocción
Es el momento de añadir el lúpulo, que se encargará de aportar sabor, amargor y aroma. Para conseguirlo, comienza a hervir en la olla y una vez el mosto esté a punto de ebullición, quita la capa de espuma. Esto se hace para que las proteínas no entorpezcan la labor de la levadura.
Ahora sí, llega el momento de añadir el lúpulo y aquí será imprescindible seguir la receta de la cerveza por la que se haya optado. Así pues, si se quiere más amargor se podrá añadir el lúpulo una hora después de haber hervido. Si, por el contrario, se busca dar más sabor, deberá añadirse a los 15 o 20 minutos de terminar. Por su parte, si el objetivo es amplificar el aroma, habrá que añadir el lúpulo justo al final de haber sido hervido, cuando el fuego ya se haya apagado.
Whirlpool
Este paso es opcional y se trata, fundamentalmente, de remover la mezcla una vez hayamos finalizado el proceso de cocción. Así conseguiremos un mosto más limpio.
Enfriado
Para enfriar la cerveza lo haremos con un serpentín cuando aun está hirviendo el mosto, justo diez minutos antes de que finalice el proceso. Después deberemos tapar la olla para evitar que se contamine al enfriarse. Una vez hecho esto, solo quedará hacer circular agua fría por el serpentín hasta alcanzar los 25 grados.
Fermentación
Este es el momento de añadir la levadura y se hará por encima del mosto. Eso sí, al recipiente en el que se contenga habrá que hacerle una trampa de aire para hacer que éste salga pero no entre. Además, el recipiente deberá ser conservado en un ambiente oscuro y con una temperatura cercana a los 19 grados. El proceso de fermentación durará unos 10 días aproximadamente.
Envase y embotellado
Llegados a este punto tendremos que pasar la cerveza a otro bidón para dejar descansar el mosto durante al menos una semana antes de embotellarlo. Además, será necesario aplicar la técnica de carbonatación natural con azúcar en el embotellado. El procedimiento implica crear un almíbar y colocarlo en el madurador antes de embotellar.
Una vez hecho esto, podremos colocar las cervezas en las botellas para luego taparlas y dejarlas descansar diez días más. Pasado este tiempo, ya podremos disfrutar de nuestras cervezas artesanas.
Kits
Si bien el método anterior es el más completo para hacer cerveza del modo artesanal, existen otras alternativas más sencillas en las que trabajaremos con botes de malta preparados. Esta opción es óptima para aquellas personas que están empezando a hacer cerveza artesana y todavía no tienen mucha soltura. Además, hay a la venta kits para hacer cerveza casera que facilitan enormemente la tarea porque viene todo explicado para hacerlo paso a paso.
En cuanto al precio de estos kits para hacer cerveza artesana, éste variará mucho en función de la tienda en la que se adquieran o el tamaño del lote. En todo caso, podemos estar hablando de un abanico que va de los 40 a los 60 €. Eso sí, estos traerán todos los materiales necesarios para iniciarte en este mundo y empezar a hacer cerveza artesana desde casa.