Cómo evitar que el ordenador se caliente
El calor es uno de los mayores enemigos de los sistemas electrónicos, y más aún del PC, al que solemos someter a un rendimiento continuado durante muchas horas. Exponer a sus componentes a una temperatura excesiva es una de las causas más habituales de malfuncionamiento, y a la larga también reduce sensiblemente su vida útil. Esto se agrava con la extremada potencia de los procesadores actuales, pero por fortuna, las técnicas de disipación y refrigeración son mucho más eficaces que antaño.
De ahí que esté en nuestra mano prolongar la vida de nuestros ordenadores y evitar daños. Por ello, Deepcool, fabricante mundial de equipos de refrigeración para ordenadores, ha elaborado una serie de consejos para que nuestros ordenadores funcionen bajo temperaturas adecuadas y seguras:
1. La pasta térmica entre el procesador y su correspondiente disipador es imprescindible. Si montamos nuestro propio PC, conviene no escatimar en este sentido y apostar por una marca de calidad contrastada. Igualmente, conviene comprobar cada cierto tiempo que siga habiendo pasta suficiente, puesto que con el calor se va consumiendo.
2. Haz todo lo posible para que el aire fluya de la mejor manera posible. Para ello, la correcta colocación de los cables en el interior de la caja y su limpieza periódica para eliminar el polvo acumulado son una práctica imprescindible. Igualmente, coloca el ordenador lo más cerca posible del suelo, pues se trata de uno de los lugares más frescos.
3. Vigila que los conductos de ventilación no estén obstruidos, ya sea por estar demasiado pegados a la pared o por obstrucción de las rejillas externas (polvo, etc.).
4. En el caso de los portátiles, el uso de bases refrigeradoras son una de las opciones más inteligentes para evitar problemas, sobre todo en verano. Además, podremos usar nuestro ordenador con mayor comodidad, sin sufrir calor en piernas y manos y adoptando una posición más ergonómica en la mayoría de los casos.
5. Por último, pero no menos importante, instala cuantos ventiladores admitan tu caja y tu placa base. Contar con ellos es el arma más eficaz para prolongar la vida de los componentes de nuestro PC. En este sentido, el más importante es el encargado de refrigerar la CPU, precisamente el mayor responsable de que la temperatura de funcionamiento se dispare.
En el mercado existen disipadores como los nuevos Ice Matrix 400 de Deepcool, adecuados para los procesadores más exigentes del mercado. Gracias a su base de cobre pulida, el contacto con la superficie de la CPU se optimiza notablemente. Además, su ventilador de 120 mm ayuda a absorber tanto la vibración como el ruido generados.