Cómo ahorrar hasta 3.425 euros en la Renta si haces esto antes de final de año

ACTUALIZACIÓN RENTA 2023: Consulta cómo ahorrar hasta 10.000 euros en la próxima declaración de la Renta.

Realizar obras de mejora de la eficiencia energética de las viviendas, hacer aportaciones a planes de pensiones empresariales o los donativos a las ONG son algunas de las acciones que permiten abaratar la próxima declaración de la Renta. Un ahorro que en este año, según los cálculos de los técnicos del Ministerio de Hacienda, Gestha, permite abaratar en más de 3.000 euros la Renta 2022.

El final de 2022 se acerca y en estos últimos días es clave hacer las gestiones necesarias para abaratar lo máximo posible la factura fiscal. En concreto, con los consejos que puedes consultar en esta información es posible ahorrar hasta 3.425 euros en el próximo año cuando haya que presentar las cuentas del año 2022.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que los mayores beneficios fiscales van a beneficiar más a los contribuyentes que tengan un nivel más alto de ingresos. En concreto, el ahorro para quienes ingresan más de 600.000 euros al año asciende a los 71.109 euros, mientras que para los ciudadanos con ingresos de 21.000 euros anuales el ahorro es de 1.626 euros. En el caso de las familias con menos ingresos, las posibilidades de la deducción son prácticamente inexistentes.

Ahorro según los tramos de ingresos

(*) En estos tramos de renta, el Ahorro total máximo señalado queda limitado con la Cuota resultante de la autoliquidación que representa la carga media del IRPF de cada uno de dichos tramos.

(1) Aumento medio ponderado del ahorro fiscal, según nivel de ingresos, invirtiendo hasta los límites máximos deducibles desde los importes medios declarados.

(2) El ahorro fiscal máximo que un ciudadano puede lograr se calcula según la renta disponible de la base declarada menos el consumo medio, si bien limitado al importe de la cuota resultante de la autoliquidación del IRPF.

(3) Inversión necesaria para alcanzar el ahorro medio estimado en el IRPF.

9 Consejos fiscales para ahorrar en la Renta antes de que acabe el año

A continuación puedes consultar el listado de los consejos elaborados por los Técnicos de Hacienda para conseguir el mayor ahorro en la factura fiscal y conseguir que la próxima declaración de la Renta te salga a devolver.

1. Deducciones por obras de mejora de eficiencia energética de las viviendas

Desde octubre de 2021 es posible aplicar tres nuevas deducciones destinadas a la realización de obras de rehabilitación en los hogares con la finalidad de mejorar la eficiencia energética.

Como requisito, para acogerse a la deducción este año es fundamental que el certificado de eficiencia energética de la vivienda posterior a la reforma se emita antes del 31 de diciembre de 2022.

Se trata de una ventaja que afecta a propietarios de viviendas habituales, en alquiler o expectativa de alquiler, siempre que se produzca el contrato de arrendamiento antes del 31 de diciembre de 2024. Las tres deducciones son las siguientes:

1. Deducción por obras de mejora para la reducción de la demanda de calefacción y refrigeración

Pueden beneficiarse de esta deducción los contribuyentes que hayan realizado las obras desde el 6 de octubre de 2021 hasta el 31 de diciembre de 2023. Las actuaciones objeto de la deducción son la sustitución de ventanas por otras de doble acristalamiento o el cambio de una caldera por otra de biomasa. Siempre y cuando después de estas obras se haya reducido en un 7 % la suma de los indicadores de la demanda en calefacción y refrigeración.

La base máxima de esta deducción será de 5.000 euros y el porcentaje de deducción es del 20 %. Descuento que se aplicará en el periodo impositivo en el que se expida el certificado de eficiencia tras la obras, antes del 1 de enero de 2024.

2. Deducción por obras de mejora que reduzcan el consumo de energía primaria no renovable

Las obras que pueden acogerse a la deducción son las realizadas entre el 6 de octubre de 2021 y el 31 de diciembre de 2023. Y las actuaciones subvencionables son la instalación de paneles aislantes en las paredes y de aislamiento térmico en los falsos techos, la instalación de sistemas de calefacción y aire acondicionado por aerotermia, entre otros.

Para optar a esta deducción, el técnico especialista tiene que certificar la reducción del 30 % del consumo de energía primaria no renovable en el hogar. O, en su defecto, una mejora de la calificación energética pasando a ser letra A o B.

La base máxima anual de esta deducción será de 7.500 euros y el porcentaje de deducción es del 40 %.

3. Deducción por obras de rehabilitación energética de edificios de uso predominante residencial

La deducción puede aplicarse en las obras realizadas entre el 6 de octubre de 2021 y hasta el 31 de diciembre de 2024. La base máxima anual por esta deducción será de 5.000 euros anuales con un porcentaje de deducción del 60 %.

En este caso, la deducción se practicará en el periodo impositivo en el que se expida el certificado de eficiencia energética después de la realización de obras y antes del 1 de enero de 2025.

2. Límite de 1.500 euros de aportación máxima a los planes de pensiones individuales

Este año se reduce a 1.500 euros la aportación máxima a los planes de pensiones individuales, aunque con la posibilidad de incrementar las aportaciones hasta en 8.500 euros más por aportaciones a planes empresariales.

Según los técnicos de Gestha, el Gobierno está desincentivando las aportaciones a planes de previsión individual y apostando por los de tipo empresarial.

En estos casos, la aportación máxima a los planes individuales ha pasado de los 8.000 euros en 2020 a los 2.000 euros en 2021 y a 1.500 euros en 2022.

Según las estimaciones de los técnicos de Gestha, de esta deducción pueden beneficiarse la mitad de los declarantes que ingresan más de 60.000 euros, cuyo ahorro les supone casi la mitad de la aportación a los planes de pensiones.

TABLA. Los contribuyentes que más invierten en planes de pensiones

TABLA. Ahorro fiscal de las aportaciones a planes de pensiones según la renta

3. Deducción por compra y renovación de la vivienda

Las personas que compraron su vivienda habitual antes del 1 de enero de 2013 seguirán disfrutando de la desgravación siempre y cuando hayan aplicado deducciones en 2012 o años anteriores. De esta manera, los contribuyentes pueden deducirse hasta el 15 % de las cantidades invertidas, con el límite de 9.040 euros.

Teniendo en cuenta este límite, sumado al aumento del euríbor, puede resultar interesante realizar un pago adicional para amortizar parcialmente la hipoteca antes de que acabe el año y reducir así la factura en 742 euros. Pero solamente cuando el préstamo no tenga asociadas comisiones de cancelación anticipada.

Por otra parte, las viviendas destruidas tras la erupción del volcán de La Palma se respetarán, con efectos desde el 1 de octubre de 2021, las deducciones en la cuota íntegra autonómica del IRPF por las cantidades satisfechas en inversión para su reparación. Se incluyen además las obras de rehabilitación energética o las de adecuación por discapacidad.

4. Neutralizar la tributación de las ganancias de la venta de una vivienda habitual

Las personas que hayan vendido su casa este año, tendrán que tributar por las ganancias obtenidas en la próxima renta en función de la cuantía, en un porcentaje de entre el 19 y el 26 %.

Sin embargo, los técnicos señalan que si se reinvierte el total o una parte del importe en otra vivienda de carácter habitual es posible neutralizar el pago.

Sin embargo, quedan exentas las ganancias obtenidas por esta venta de vivienda habitual, los contribuyentes mayores de 65 años y las personas dependientes severas o grandes dependientes.

5. Compensar las pérdidas con ganancias

La recta final es un buen momento para hacer cuentas y compensar las pérdidas generadas en un fondo de inversión, acciones o derivados financieros con las ganancias patrimoniales obtenidas.

Aunque hay que tener en cuenta que no es posible adquirir estos mismos valores o similares en los dos meses anteriores o posteriores a la venta.

6. Planificación de venta de acciones

Aquellos contribuyentes que prevean que sus rendimientos netos del trabajo van a ser inferiores a 16.825 euros deben revisar que no haya rentas de otro tipo superiores a 6.500 euros. El objetivo es no perder la reducción por rendimientos en el trabajo que puede llegar a ser de 5.565 euros.

7. Hasta 60.100 euros si se trabaja en el extranjero

Es otra de las deducciones posibles que pueden aplicar los contribuyentes. Los técnicos recuerdan que los rendimientos que obtiene un trabajador fuera de España están exentos de tributación con el límite máximo de 60.100 euros anuales. Pero solo puede aplicarse la deducción siempre que en el territorio en el que se realicen los trabajos se aplique un impuesto de naturaleza idéntica o análoga a la del IRPF.

8. Donativos a ONG

Los donativos, donaciones y aportaciones realizadas a ONG pueden deducirse hasta en el 80 % de los primeros 150 euros y hasta el 35 % para los importes restantes. Una cifra que puede alcanzar el 40 % si en los dos años inmediatamente anteriores se dona a favor de una misma entidad por un importe igual o superior a la del ejercicio anterior.

Los donativos tienen un mayor atractivo fiscal, puesto que puede aumentar el beneficio hasta en 843 euros adicionales.

Por otra parte, las cuotas de afiliación y las aportaciones a partidos políticos pueden reportar al contribuyente algún beneficio más, puesto que suponen una deducción del 20 % limitada a una base máxima de 600 euros.

Las cuotas sindicales y de colegios profesionales deducen de los rendimientos de trabajo, con un límite de 500 euros. Y los gastos en defensa jurídica de litigios en la relación laboral con el límite de 300 euros anuales.

9. Incentivos para los ´ángeles’ de los emprendedores

La deducción para amigos y familiares de hasta tercer grado de los emprendedores es de un 30 % de la inversión en la cuota estatal del IRPF al suscribir acciones o participaciones en la sociedad.

En concreto, la base máxima de deducción es de 60.000 euros anuales, limitada a una participación junto con su cónyuge y familiares de hasta segundo grado incluido, nunca superior al 40 % del capital de la entidad.

Los técnicos recuerdan que es una de las deducciones más potentes del IRPF, permitiendo deducir de manera adicional 1.840 euros de media a quien financie a una empresa reciente, aunque se precisa invertir algo más de 6.000 euros.

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