Coches por suscripción o cómo tener un vehículo sin comprarlo
¿Te gustaría tener coche propio y no pagar por los impuestos, el seguro o las revisiones? ¿O tener en menos de una semana un vehículo en tu puerta sin tener que dar una entrada? Pues sí, esto es posible con la nueva tendencia de suscribirse a un coche.
Sí, has leído bien. La suscripción de coches está ganando terreno como una nueva forma para disfrutar de un vehículo propio durante el tiempo que necesites sin las cargas y gastos que supone tenerlo en propiedad.
Contenido de la información:
- Cómo funciona la suscripción de coches
- Características de la suscripción
- Inconvenientes
- Cómo son los coches por suscripción
- Cómo suscribirse a un coche
- ¿En qué se diferencia la suscripción con el renting?
- Cómo suscribirse a un BMW
- Wabi, coches por suscripción desde 349 euros al mes
- Cómo saber si sale a cuenta comprar un coche
Cómo funciona la suscripción de coches
La suscripción de coches es un servicio que permite a los conductores alquilar un vehículo a una empresa para usarlo durante el periodo de tiempo que quiera, sin compromiso de permanencia y sin tener que dar una entrada.
La finalidad de esta nueva tendencia es que los usuarios paguen por lo que usan. Por ello, las personas que contraten este servicio sólo tienen que pagar una renta de forma mensual por el uso del vehículo y el combustible que gasten. Y cuando ya no lo necesiten, pueden cancelarlo sin penalización.
Características de la suscripción
Los usuarios que contraten este servicio van a poder liberarse de las cargas e impuestos que hay que pagar por la compra de un coche. Con la suscripción podrás olvidarte de conceptos como el impuesto de matriculación, el de circulación, el numerito del coche… Y tampoco tendrás que preocuparte por las revisiones del vehículo ni por el servicio de asistencia en carretera porque la empresa asume estos gastos.
El seguro también corre a cargo de la empresa, así que como puedes apreciar, la gran ventaja de la suscripción es la cantidad de dinero que puedes ahorrar en estos gastos adicionales. Porque lo único que tienes que pagar es la cuota mensual, el combustible y, en caso de que te sancionen, las multas.
Además, no es necesario tener una gran solvencia económica para hacer frente a la señal o entrada del coche porque este servicio no exige ningún pago por adelantado. Si la cuota mensual del vehículo al que te suscribas es de 400 euros, ésta es la única cantidad que vas a tener que pagar al contratarlo. Nada más.
La suscripción de vehículos es un servicio rápido. Las empresas de suscripción de coches son completamente digitales y la contratación tiene hacerse por Internet. Esto agiliza los trámites porque el proceso es sencillo y apenas se tarda diez minutos en hacerlo. Y en un plazo de una semana puedes disfrutar de tu nuevo coche.
La suscripción de coches no tiene permanencia. O sí, depende de tu elección. Cada usuario puede utilizar el vehículo todo el tiempo que necesite. La ventaja de contratar un coche con permanencia es que a mayor tiempo de uso del coche, más barata va a ser la cuota mensual. Por otra parte, suscribirse a un coche sin permanencia aporta una mayor flexibilidad. En los contratos sin permanencia la suscripción se renueva de forma automática hasta que el cliente comunique lo contrario.
Este servicio ofrece una gran flexibilidad puesto que las empresas dan posibilidad de cambiar de coche cuando lo necesites. Si planeas unas vacaciones familiares, puedes optar por un coche más grande para ese mes. Y después volver a uno más pequeño para moverte con facilidad por la ciudad.
En algunas empresas puedes seleccionar servicios adicionales, aunque debes saber que éstos pueden encarecer la cuota mensual. Algunos ejemplos de estos servicios extra son: Añadir un conductor adicional, tener autorización para viajar al extranjero, incluir sillas para niños o tener garantía de coche de sustitución.
Otra característica de la suscripción es que no hay penalizaciones por cancelación. Si de un día para otro cambian tus circunstancias personales y ya no necesitas el coche, puedes cancelarlo sin compromiso y sin miedo a una posible penalización económica.
Inconvenientes
El principal inconveniente de la suscripción a un coche es que el vehículo nunca va a ser tuyo. Es como un alquiler, por mucho que pagues mes a mes, la propiedad sigue siendo de la empresa.
Por otra parte, dependiendo del uso que vayas a darle, puede salirte más o menos rentable. El coste medio de estos vehículos es de 450 euros al mes sin ningún extra. Si, por ejemplo, mantienes la suscripción de un vehículo con este precio durante 24 meses, te habrás dejado 10.800 euros sólo para poder usarlo. Sin contar el combustible. Si vas a necesitar el coche para periodos largos de tiempo, quizá te interesen otras alternativas.
Si decides suscribirte a un coche con permanencia para que la cuota sea más barata, tienes que indicar durante cuánto tiempo vas a utilizarlo. Este requisito puede ser un inconveniente si no sabes exactamente los meses que vas a necesitarlo.
Además, a la hora de contratar este servicio también tienes que indicar cuántos kilómetros vas a hacer cada mes. En cada tarifa viene incluido un máximo de kilometraje. Si necesitas hacer más, tienes que contratar un servicio adicional. A mayor cantidad de kilómetros, más alta será la cuota que vas a tener que pagar. La condición de tener que pactar unos kilómetros de forma mensual puede convertirse en un problema ante un imprevisto puntual que te haga recorrer más kilómetros de los acordados. En estos casos, la empresa te penaliza.
Algunas empresas pueden pedirte una fianza a la hora de contratar el servicio que te devolverán una vez finalice la suscripción.
Estos coches no pueden desgravarse como actividad empresarial, por lo que no son la mejor opción como coche de empresa.
Cómo son los coches por suscripción
Los coches de suscripción suelen ser seminuevos, de kilómetro cero o usados. Aunque hay algunas empresas que ya están poniendo al servicio de los usuarios coches de suscripción nuevos.
El servicio de suscripción tiene un amplio catálogo de coches que ofrece a los clientes. Los hay de todos los tamaños, marcas y modelos. Tan sólo tienes que acceder a una de las webs que ofrecen este servicio para comprobarlo.
Cómo suscribirse a un coche
Para suscribirse a un coche sólo tienes que acceder a la web de la empresa con la que quieres contratar el servicio y registrarte. Una vez tengas la cuenta creada, tienes que seleccionar el tipo de coche que quieres contratar, indicar si quieres contratarlo con o sin permanencia y la cantidad de kilómetros que vas a recorrer.
Durante el proceso de contratación puedes añadir servicios adicionales, aunque encarecerán la cuota. Cuando ya hayas especificado todos los detalles, puedes proceder con el pago y seleccionar la forma de entrega del vehículo. Las empresas suelen ofrecer dos posibilidades para darte el coche: Que vayas a recogerlo a un punto o te lo llevan a casa. El servicio de entrega del vehículo no suele tardar más de una semana.
Para contratar el servicio la empresa necesitará que aportes la siguiente documentación:
- DNI o NIE
- Permiso de conducir. En algunas empresas van a pedirte un mínimo de antigüedad en el carnet
- La última o dos últimas nóminas
- Dirección de residencia
¿En qué se diferencia la suscripción con el renting?
La principal diferencia entre la suscripción de vehículos y el alquiler o renting tiene que ver con el tiempo que puedes utilizar el coche. En el renting se fijan unos tiempos mínimos de cuatro o cinco años de alquiler del vehículo, mientras que en la suscripción puedes realizar un contrato de un mes. Por tanto, la principal diferencia es que la suscripción ofrece una mayor flexibilidad porque no tiene condiciones de permanencia y puedes utilizar el coche tantos meses como necesites.
Cómo suscribirse a un BMW
Algunas empresas como Sixt ofrecen a sus clientes la posibilidad de suscribirse a un BMW modelo i3 desde 599 euros al mes. Se trata de un coche eléctrico 100 % que tiene un motor de 170 CV y una autonomía de entre 380 y 395 kilómetros. Este modelo sólo está disponible en Madrid y Barcelona.
Sixt ofrece con la suscripción de este vehículo un seguro a terceros, cobertura de daños y robo, matriculación, mantenimiento e ITV. La cancelación del servicio puede hacerse a partir de 30 días.
Si quieres suscribirte a este BMW eléctrico tienes que acceder a la web de Sixt, registrarte, seleccionar el BMW modelo i3 y contratar el servicio. Una vez realices el pago de la primera cuota, en un plazo de cinco días tendrás el coche en la puerta de tu casa.
Además de Sixt, hay otras empresas que puedes consultar para suscribirte a un coche como Bipi y Wabi. Aunque de forma paralela a estas empresas especializadas, hay marcas de automóviles que están implantando este servicio como es el caso de Volvo o de entidades financieras como el Santander:
Wabi, coches por suscripción desde 349 euros al mes
Urbanos, compactos, berlinas, SUVs, monovolúmenes, eléctricos e híbridos… La variedad es enorme y todos ellos son coches nuevos o seminuevos y nunca hay que pagar ni entrada ni permanencia. ¿El precio? A partir de 349 euros cada mes que quieras un coche por suscripción de Wabi, la solución de movilidad de Santander Consumer Finance. Desde la web de Wabi se puede disponer de un coche privado por meses para todos aquellos conductores que tienen claro que no quieren comprar un coche.
La suscripción mensual a Wabi, que se hace desde su web descargando una app y registrándose en 5 minutos, ofrece con la cuota mensual seguro a todo riesgo (con o sin franquicia, dependiendo del coche) y asistencia en carretera. También incluye el mantenimiento del vehículo, incluso el cambio de neumáticos, y los gastos de gestión e impuestos. Además, ofrece la posibilidad de añadir un segundo conductor de forma gratuita, que debe estar registrado en la app de Wabi y cumplir los requisitos mínimos de edad y antigüedad de carnet. En cuanto al kilometraje, la cuota base contempla un kilometraje por suscripción de 30 días por un límite de 1.500 km, pudiéndose exceder este límite pagando por kilómetro adicional.
Cómo saber si sale a cuenta comprar un coche
Si tras analizar con detalle los pros y contras de la suscripción, el servicio no te convence y prefieres comprar un coche para tenerlo en propiedad, te explicamos cómo puedes saber si te sale a cuenta comprarlo y qué gastos mensuales vas a tener que pagar por él.
Comprar un coche implica una serie de gastos fijos más allá del precio del vehículo. Todos estos gastos adicionales son los que debes considerar antes de comprar un coche:
- Combustible. Se trata de un gasto fijo puesto que vas a tener que llenarlo de forma periódica.
- Revisiones anuales para asegurar el buen mantenimiento del vehículo.
- Pasar la ITV porque no hacerlo es motivo de multa y supone un peligro a la circulación.
- Impuesto de matriculación y de circulación.
- El numerito del coche, impuesto al que tienes que hacer frente de forma anual.
- Seguro del coche.
Además, dependiendo del tipo de vehículo que tengas y de su combustible, los gastos pueden variar. Otros factores a tener en cuenta y que van a suponerte un gasto adicional son la cantidad de kilómetros que vas a recorrer, los intereses por financiarlo, reparaciones, multas…
Para que te hagas una idea, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) ha puesto en marcha una calculadora que te permite averiguar cuál sería el gasto mensual que te supondría tener un coche en propiedad en función de una serie de parámetros.