Charco del Aceite, la piscina natural con leyenda para bañarse entre pinos
El Charco del Aceite es una piscina natural de aguas cristalinas ubicada en la Sierra de las Villas, Jaén. Se caracteriza por ser una zona tranquila, con instalaciones adecuadas para disfrutar de un día en familia o con amigos y rodeado de naturaleza. Alrededor de este charco emerge un entorno único, lleno de una frondosa vegetación, donde destaca la abundante presencia de los pinos y otros ejemplares.
Además de la zona de baño, en las instalaciones hay mesas de piedra y hasta un kiosco para reponer fuerzas tras un chapuzón.
Contenido de la información:
Cómo es el Charco del Aceite
El Charco del Aceite es una piscina natural que se caracteriza por encontrarse en un entorno único y privilegiado. En el corazón de la Sierra de las Villas, esta zona de agua emerge de un paisaje de vegetación frondoso y rodeada de pinos. Esta es una piscina natural ubicada en el municipio de Villanueva del Arzobispo, situado en el corazón de la Sierra de Segura y Cazorla.
Las aguas son cristalinas y refrescantes, ideales para pasar un día en familia o con amigos. Ello la convierte en una zona perfecta para darse un baño porque en esta área se encuentra un remanso de agua encajado procedente del río Guadalquivir. Lo que forma una piscina natural ideal, de aguas tranquilas y limpias, que crea un espacio único para darse un chapuzón en los meses de más calor.
Características del Charco de la Pringue
El Charco del Aceite o de la Pringue es una piscina natural de aguas cristalinas y turquesas que se convierte en uno de los principales atractivos turísticos de la zona durante el verano. El agua está rodeada por un paisaje frondoso, enmarcado por ejemplares de pinos que cubren y descienden por las laderas rocosas que envuelven el paraje.
Además de la zona de baño, en medio del cauce hay grandes bloques de piedra hasta los que el visitante puede acercarse para vislumbrar unas vistas impresionantes del paisaje que no le dejarán indiferente.
En cuanto a las instalaciones, en esta zona hay mesas de piedra y asientos de madera donde parar a descansar o reponer fuerzas. También hay un kiosco estilo bar para tomar algo y zona de aparcamiento para dejar el coche en las proximidades.
En uno de los laterales de la charca se pueden observar unas magníficas vistas y una gran cueva vestida con hiedras. En el otro extremo, al margen izquierdo del cauce, emerge la abertura del túnel del desagüe del Pantano del Tranco.
Por qué se llama Charco de la Pringue o Charco del Aceite
No hay que dejarse llevar por el nombre de la zona, puesto que, a pesar de tener un nombre poco apetecible para darse un baño, sus aguas nada tienen que ver con el significado de un charco pringoso o de aceite.
Por el contrario, el origen de su nombre se debe a una leyenda, que cuenta la historia de que un burro que estaba cargado con pellejos de aceite se cayó al río. De ahí su nombre.
Fauna del Charco del Aceite
En este paraje natural de Jaén es habitual detectar el vuelo de algunas aves rapaces, como es el caso del buitre leonado. Además, el visitante puede contemplar también los filos de las paredes rocosas y la presencia de la cabra montés sobre ellos.
En cuanto a los habitantes de las aguas, destaca la presencia de los barbos autóctonos, las bogas de río, el martín pescador y, como no podía ser de otra manera, la trucha común, el animal por excelencia de las aguas de esta zona recreativa.
Cómo llegar al Charco del Aceite
Para llegar hasta el Charco del Aceite, que se encuentra ubicado en la Sierra de las Villas, hay que seguir la carretera en dirección Villanueva del Arzobispo. Una vez desde este punto, a una distancia aproximada de 6 kilómetros, se encuentra un cruce con el cartel que señala el camino hacia esta zona de agua. Está señalizado como Charco del Aceite.